Vanguardismo y Generación del 27: Innovación y Tradición en la Literatura Española

El Vanguardismo

Los movimientos de vanguardia significan una verdadera ruptura. Se han designado aquellos movimientos que se oponen a la estética anterior y que proponen concepciones nuevas del arte y de las letras. Los «ismos» vanguardistas se suceden en Europa entre las dos guerras mundiales y a un ritmo muy rápido.

Las vanguardias en Europa

  • El Futurismo: antirrománico, exalta la civilización mecánica y la técnica.
  • El Cubismo: el Cubismo literario se propone descomponer la realidad para proceder a composiciones libres de conceptos, frases o imágenes. Añaden disposiciones tipográficas de los versos, formando imágenes visuales, el collage, etc.
  • El Dadaísmo: es la rebeldía pura: contra la lógica, las convenciones estéticas o sociales y contra el sentido común. Propugna liberar la fantasía de cada individuo, superar todas las inhibiciones y recurrir a un lenguaje incoherente.
  • El Expresionismo: la percepción de la realidad va a ser deformada por el artista. Lo que interesa explicar es cómo el artista ve el mundo, ofreciendo una visión pesimista y trágica de la realidad y del ser humano.
  • El Surrealismo: es el movimiento más revolucionario y el de más larga influencia. Su objetivo es cambiar la vida del ser humano, liberado de todas las esclavitudes sociales e individuales que le aplastan. Los surrealistas exploran el mundo del subconsciente para liberar los impulsos. Emplean la escritura automática, se escribe todo lo que pasa por la mente, sin control de tipo racional. El surrealismo se manifestó en todas las artes: cine, pintura, escultura, etc.

Las vanguardias en España

Surgieron dos «ismos» hispanos: el Creacionismo y el Ultraísmo. El Futurismo dejará huella temática en algunos poetas del 27. España es el país europeo en que la repercusión del Surrealismo resultó mayor. El Surrealismo español no es ortodoxo; nuestros poetas no llegaron a los extremos de la pura creación inconsciente, ni practicaron la escritura automática. La irrupción del Surrealismo significa la crisis del ideal de pureza y deshumanización. Lo humano, lo social y político penetrarán en la literatura, por los cauces de la expresión surrealista: así lo prueban las trayectorias de Lorca, Alberti o Cernuda.

El grupo poético del 27

En 1927, el Ateneo de Sevilla organiza un acto para conmemorar el tercer centenario de la muerte de Góngora. Están: Pedro Salinas, Luis Cernuda, Manuel Altolaguirre, Emilio Prados, Rafael Alberti, Jorge Guillén, Federico García Lorca, Vicente Aleixandre, Gerardo Diego y Dámaso Alonso. Constituyen la Generación de 1927. Grupo compacto con una conciencia de grupo nacida de una amistad y una experiencia comunes. Generación de la amistad, compartió una serie de lugares, actividades e ideas estéticas que estrecharon los lazos entre ellos. Entre 1920 y 1936 hay una estrecha convivencia truncada por la Guerra Civil.

Afinidades estéticas

El grupo del 27 nació a la literatura a la par que el auge de las vanguardias, buscó integrar a los clásicos con la poesía vanguardista. Los poetas del 27 suponen una síntesis entre tradición y renovación o vanguardia. Los escritores del 27 son los protagonistas del surrealismo. Enlazan con la tradición literaria y toman como modelo la poesía popular y los autores clásicos, Góngora. Destaca en todos ellos el gusto por la metáfora.

Evolución conjunta

Primera etapa: hasta 1927: la búsqueda de la poesía pura

  • Influjo de las primeras vanguardias: Ultraísmo, Creacionismo.
  • Juan Ramón Jiménez los orienta hacia la poesía pura. Con audaces metáforas vanguardistas. Se les tildó de herméticos, de fríos, de deshumanizados.
  • Lo humano se hace presente por influencia de Bécquer o de la lírica popular.
  • La huella clasicista caracteriza un momento de la evolución del grupo con estrofas tradicionales. Se desemboca en el fervor de Góngora.

Segunda etapa: de 1927 a la Guerra Civil: Surrealismo y rehumanización

  • Tras el culto a Góngora comienza a notarse cierto cansancio del puro formalismo, iniciándose así el proceso de rehumanización.
  • Irrupción del Surrealismo. Pasan a primer término los más hondos sentimientos humanos: el ansia de plenitud, frustraciones, el amor, las inquietudes existenciales o sociales…
  • Los acentos políticos y sociales entran en la poesía. Algunos poetas adoptarán una concreta militancia política, y todos se mostrarán partidarios de la República al estallar la Guerra Civil.

Tercera etapa: después de la guerra: la guerra y el exilio

  • Al finalizar la Guerra Civil el grupo se ha dispersado: Lorca ha muerto en 1936; los demás parten al exilio. Aunque cada uno sigue su rumbo, ninguno abandonará los caminos de la poesía humana.
  • En el exilio Guillén (poeta puro) inicia con Clamor un nuevo y humano ciclo poético. La nota dominante será la nostalgia de la patria perdida.
  • En España, la poesía deriva hacia un humanismo angustiado, de tonos existenciales:
    • Hijos de la ira de Dámaso Alonso.
    • Historia del corazón de Vicente Aleixandre.

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