La Celestina
La Celestina es una de las obras de la literatura castellana más importantes que marca una transición entre la Edad Media y el Renacimiento.
Esta obra tiene la cualidad de doble autoría ya que ha sido escrito por múltiples autores. Podemos afirmar que Fernando de Rojas escribíó toda la obra excepto el primer acto y este fue escrito por Rodrigo de Cota o Juan de Mena.
La Celestina fue publicada en diferentes años, y con cada publicación la obra presentó unos cambios. Podemos diferenciar: la primera versión, Comedia, formada por 16 actos y la segunda versión, Tragicomedia, con los 21 actos definitivos. Los cambios más destacables entre las dos versiones es el alargamiento de la historia amorosa y la introducción de una nueva trama.
El género de la obra también es confuso ya que se estructura con actos y escenas cosa propia de los textos teatrales pero debido a su extensión y a la complejidad de los personajes y de la trama hace que sea irrepresentable. Por su temática la relacionamos con la comedia humanística, obras para ser leídas dramáticamente. Por tanto, La Celestina, es una comedia humanística en lengua vulgar.
– Personajes
En la obra aparecen múltiples personajes que se pueden agrupar en diferentes categorías: el mundo de los señores, el mundo de los criados y el mundo marginal. Todos los personajes tienen una pasado literario pero gracias a la atención y el trato singularizado recibido por los personajes de baja condición y la evolución de algunos aporta a la obra verosimilitud psicológica.
En el mundo de los señores encontramos a: Calisto que es un noble esclavo de sus pasiones obsesionado por conseguir el amor carnal de Melibea que mediante sus palabras y actos realiza una parodia del amor cortés; Melibea que es una mujer enamorada de Calisto (quizá desde el principio o desde la magia de La Celestina), joven, hermosa y energética; Pleberio y Alisa son los padres de Melibea que aparecen en el planto final.
En el mundo de los criados encontramos a Sempronio que un criado contradictorio y débil que desprecia a su amo y superado por la codicia; Pármeno es el otro criado fiel pero corrompido por Celestina cuando le ofrece a Areúsa, Tristán y Sosia son los nuevos criados de Calisto y Lucrecia es la criada de Melibea.
En el mundo marginal encontramos la Celestina que es una mujer que destaca por su inteligencia y dominio sobre los otros personajes aunque también se caracteriza por la perspicacia, hipocresía, el orgullo profesional y a la resistencia del paso del tiempo; otros personajes son Elicia y Areúsa que son las discípulas de La Celestina y las amantes de Sempronio y Pármeno respectivamente.
– Estructura
La Celestina se divide en 3 partes: el planteamiento formado por el acto I, el desarrollo que incluye los actos desde el II hasta el XIX y la conclusión constituida por los 2 últimos actos (XX-XXI).
En el planteamiento Calisto expresa su amor a Melibea que le rechaza. Cuándo vuelve a casa expresa su dolor a Sempronio que le sugiere que acuda a La Celestina una alcahueta que le ayudará. Pero La Celestina y los criados tienen un trato para aprovecharse del pobre Calisto.
En el desarrollo se puede dividir desde el 2º hasta el 12º acto que cuenta como La Celestina visita a Melibea para hacerle creer que tiene la poción que le proporcionará el hacia Calisto. La Celestina celebra el triunfo del amor y se niega a compartir sus ganancias con sus cómplices y éstos con el enfado deciden matarla.
La segunda parte del desarrollo formada por los actos 13º hasta el 19º narra como Sempronio y Pármeno son ajusticiados por el crimen que han cometido. Calisto contrata a dos nuevos criados, pero las amantes de los anteriores deciden contratar a Centurio para que mate a Calisto pero este muere accidentalmente al caer desde la tapia del jardín.
En la conclusión, Pleberio es alertado del sufrimiento de su hija pero este la ignora por tanto Melibea decide encerrarse en una torre para expresar su dolor y finalmente decide suicidarse. Entonces Pleberio realiza un planto ante el cadáver de su hija.
-Rasgos formales
La Celestina se caracteriza por su intención paródica, la importancia de la lengua y el uso de diferentes técnicas dramáticas.
Respeto a la intención paródica destaca el personaje de Calisto que realiza una parodia a los principios del amor cortés. La importancia de la lengua se manifiesta en el uso de recursos estilísticos, refranes y sentencias de autores anteriores por tanto se representa el habla real de la época. En La Celestina aparecen diálogos tanto intercambios rápidos como parlamentos extensos, monólogos usados para expresar dudas o vacilaciones de los personajes, apartes que se utilizan principalmente para criticar a Calisto y las acotaciones que expresan acciones y gestos de los personajes.
Finalmente podemos clasificar los rasgos en medievales como el didactismo de la obra y el peso de la magia y en renacentistas la ruptura de las tradiciones del amor cortés y los lazos feudales.
Seguramente, Fernando de Rojas escribíó La Celestina con una finalidad moralizadora: advertir de los peligros del loco amor y de la maldad de las alcahuetas y criados.
La obra transmite una concepción pesimista del mundo y de la vida que se refleja en los temas de las bajas pasiones como la lujuria y la codicia, el paso del tiempo y la muerte, la traición y la violencia y la falta de sentido de los sucesos.