Antes de comenzar a desarrollar el tema, sería conveniente realizar una pequeña introducción histórico-social. España
durante el siglo XX es un país pobre y rural, lo que llevó a muchos españoles a emigrar a América.
Se desarrolla a principios del siglo XX la Primera Guerra Mundial en la que España se mantiene neutral
En España, las primeras décadas de este siglo se caracterizan, políticamente, por el reinado de Alfonso XIII y por la crisis originada al perder las colonias de ultramar (1898). En 1923, el General Primo de Rivera dio un golpe de Estado y estableció una dictadura. En 1930, Alfonso XIII vuelve a España y convoca unas elecciones a las Cortes, en las que vence,
en 1931, la República.
Contrario a la República se encontraba el bando nacionalista que da otro golpe de Estado con ei que se inicia, en 1936,
la Guerra Civil. A esta le siguen los años de la dictadura franquista.
En el plano artístico, se produce una verdadera explosión creativa muy diversa que da lugar a la aparición de las
Vanguardias y, más tarde, al grupo poético del 27.
En cuanto al teatro, en las primeras décadas del siglo XX se ignoraron las tendencias experimentales y renovadoras que triunfaban en Europa. Se produjo una división del teatro: había un teatro que triunfaba en los escenarios y un teatro
Innovador
Esta división fue debida a los siguientes factores:
- El teatro, como espectáculo, tenía muy poca competencia.
- El público era burgués y convertía la representación teatral en un acto social
- Los críticos teatrales, los empresarios y los autores se sometieron a los deseos del público. Dentro del género dramático, existían dos tendencias: el teatro conservador y el teatro innovador.
El teatro conservador exploto la estetica impuesta por los realistas en el siglo XIX. Dentro de él se cultivaron, a su vez,
otras cuatro tendencias:
–Alta comedia. Su mayor representante fue Jacinto Benavente. Este teatro se caracterizaba por desarrollar unas puestas en escena colmadas de lujo y ostentación. Se planteaban conflictos familiares. El lenguaje es de gran calidad
literaria.
–Teatro en verso. Heredado de los dramas románticos, se utilizó ei pasado imperial y conquistador de españa como fuente de inspiración. Se idealizaba a los héroes nacionales. Podemos destacar dentro de esta tendencia a Eduardo
–Teatro costumbrista. Pretende reflejar idílicamente la vida. Se desarrollan unas cuantas situaciones sociales elementales, sin profundidad psicológica y sin ningún atisbo de crítica. El lenguaje imitaba la expresión popular. Los
hermanos Álvarez Quintero cultivaron el sainete y la comedia de costumbres.
– Teatro cómico. Tenía muchas semejanzas con el costumbrista. Podemos destacar la tragedia grotesca dentro de esta
tendencia, en la que se alternan lo trágico y lo cómico, la apariencia y la autenticidad. Un autor destacado fue Carlos
Arniches.
Elteatro Innovador no obtuvo el aplauso del público, pues este teatro reacciona contra el convencionalismo del teatro realista. Los primero intentos renovadores proceden de los hombre He la generación del 98 Después llegaría el teatro de
Valle-Inclany el de los poetas de la Generación del 27. Las razones por las que no triunfó fueron dos:
Marquina.
–Los autores del teatro innovador se propusieron, sobre todo, debilitar el teatro que triunfaba en los escenarios. Por
Sus creaciones eran, en muchas ocasiones irrepresentables.
–El público que comprendía estas piezas,generalmente joven y cultor era minoritario.
Los principales autores del teatro de comienzos del siglo XX fueron Jacinto Benavente, Ramón María del valle-Inclan
Federico garcía Lorca.
Jacinto Benavente nació y murió en Madrid. Perteneció a te Real Academia Española V recibió el premio Nobel en 1922,
Su teatro gozódel favor del publico y se caracteriza en líneas generales, por el uso de una suave ironía.
Los intereses creados, en la que desarrolla pi tpma Hol poder del dinero por medio de personajes que proceden de la commedia dell’arte Italiana. Se trata, probablemente, de su meior obra.
- Señora ama y La malquerida, pertenecientes al drama rural. Presentan como personajes centrales carácter femeninos dominados sexualmente por hombres de escasa altura moral. La malquerida es la obra más conocida del autor y en ella se destaca mucho el sentido de la honra. El lenguaje utilizado intenta reproducir el lenguaje popular.
Ramón María del Valle-lnclán es, para muchos crfticos, el autor más Importante del siglo XX. En su trayectoria dramática mostró una constante voluntad de renovación formal y temática. Progresivamente evolucionó hasta su creación
máxima, el esperpento.
SI exceptuamos sus obras de carácter modernista, se distinguen dos ciclos en el teatro de este autor:
– Ciclo mítico. A este ciclo pertenecen la trilogía Comedias Bárbaras y Divinas palabras. Todas estas obras se localizan en una Galicia mítica, intemporal. Se presenta una visión de un mundo en el que la existencia humana se rige por las
fuerzas primarias. Se tratan problemas como la lujuria, la soberbia o la crueldad, entre otros.
– Ciclo esperpéntico. Valle-lnclán creó un subgénero teatral que denominó esperpento, en el que se integran varias obras: Luces de Bohemia, que constituye una sátira pnlítira y «¡nrial Hp la Fspafia del momento, v una trilogía publicada
bajo el título de Martes de carnaval, en la que se critica al ejército español.
El esperpento constituye una estética que se refiere a una visión particular y crítica del mundo; deforma determinados aspectos del personaje y de las situaciones, produciendo una visión caricaturizada, alternativamente cómica y macabra.
Federico Garda Lorca es uno de los mejores dramaturgos de la literatura española; goza de gran fama internacional.
Entre sus obras podemos destacar Mariana Pineda, drama modernista en verso que presenta a una heroína granadina que murió ajusticiada por bordar una bandera liberal; Bodas de sangre, drama de oscuras pasiones, de odios familiares y venganzas; Yerma, sobre el sentimiento de maternidad insatisfecho, por el cual la protagonista mata a su marido; y La casa de Bernarda Alba, donde se desarrolla la lucha entre el principio de autoridad, encamado en Bernarda que dicta años
de luto y reclusión a sus hijas, y el de libertad, representado por una de esas hijas.
Aparte de las citadas, Lorca escribió unas interesantes y difíciles obras teatrales surrealistas, y algunas obras breves con
técnica de marionetas como Amor de don Perlimplfn con Belisa en su jardín y Retablillo de don Cristóbal.
No hay que olvidar tampoco la importante labor de este autor al intentar hacer llegar el teatro al público, ejerciendo el
cargo de codirector de la compañía estatal de teatro «La Barraca».