TEMA 6. ELTEATRO POSTERIOR A 1939. PRINCIPALES TENDENCIAS. Miguel Mihura Y Antonio BUERO VALLEJO. Frente a las manifestaciones oficiales y conservadoras, van surgiendo nuevas propuestas escénicas. En los primeros años de la posguerra perdura la alta comedia decimonónica de Jacinto Benavente. Un teatro convencional del agrado de la burguésía, que era la que llenaba los locales. A finales de los 60 y en los 70 aparecen algunos dramaturgos y “compañías” innovadores. Son jóvenes que escriben y representan un teatro diferente, que, con frecuencia, ha de afrontar problemas de censura. En los 80 la situación del teatro mejora notablemente: se representan obras hasta entonces prohibidas y nace un nuevo concepto de teatro. 1.Situación del teatro en la posguerra. El panorama teatral de la España de la inmediata posguerra es pobre. Por una parte, las innovaciones más interesantes habían desaparecido con sus autores. Por otra parte, el exilio alejó de los escenarios a autores como Casona, Aub o Alberti. Por último, la censura y el afán comercial de los empresarios constituyeron escollos difíciles de salvar. Muchos espectadores, hartos de la guerra, deseaban entretenerse con obras insustanciales. Pero a finales de los 40 despuntan ciertas actitudes sociales que se plasman en el teatro realista y existencialista que tendrá su máximo apogeo a mediados de los 50. En los 60 e inicios de los 70 se produce un cansancio del Realismo social y se experimenta con nuevas formas teatrales. A la cabeza de las innovaciones estéticas se sitúan dramaturgos como Fernando Arrabal o Francisco Nieva, cuyas obras suelen representarse al margen de los circuitos comerciales. 2.La alta comedia. Los representantes de la alta comedia española escriben un teatro burgués, con gran éxito de público, cuyas carácterísticas son: Concede especial importancia a la obra bien elaborada: gran habilidad en la construcción de la trama y los diálogos y dominio de los juegos escénicos.Es un teatro costumbrista.Es superficial e ingenioso, con grandes dosis de humor; aunque, a veces, hay obras más serias que plantean problemas morales. Hay cierta monotonía temática. El tema del adulterio o la infidelidad son recurrentes. El autor más destacado es Edgar Neville. Presenta en sus obras una visión amable de la vida, que propicia la evasión de la realidad.
Su originalidad se basa en la ironía y la hipérbole con intención desmitificadora, y en las situaciones absurdas. 3.El teatro humorístico. Enrique Jardiel Poncela y Miguel Mihura se propusieron renovar el teatro de humor español. En una línea más conservadora se sitúa el teatro de Alfonso Paso. 3.1.Enrique Jardiel Poncela. Pretendía romper con las formas tradicionales de lo cómico, centradas en lo verosímil. La novedad de Jardiel radica en el encadenamiento de situaciones inverosímiles y el empleo de un humorismo de raíz intelectual. Entre sus obras destacan: Cuatro corazones con freno y marcha atrás y Eloísa está debajo de un almendro. 3.2.Miguel Mihura. Nace en Madrid en 1905 en el seno de una familia dedicada al teatro. En 1932, Mihura realizó su entrada en el mundo del teatro con: Tres sombreros de copa. Escrita en 1932, la obra no se estrenó hasta veinte años después. Por su originalidad, esa pieza supone una ruptura completa con el teatro cómico anterior. Desarrolla el tema de la libertad alcanzada y perdida. El protagonista, un joven ingenuo llamado Dionisio, se aloja en un hotelito de provincias la víspera de su boda. A lo largo de la noche desfila por su habitación todo un elenco de personajes grotescos que lo introducen en un mundo que pone en entredicho valores como la fidelidad, el honor o las convenciones sociales. En la obra se enfrentan dos mundos: el burgués, anodino e inmovilista, al que pertenece Dionisio, el joven burgués, y el frívoló y libertino del music-hall, al que pertenece Paula, la otra protagonista. A través de un lenguaje irracional (expresiones absurdas, situaciones ilógicas…) el autor muestra lo absurdo del ser humano, sus contradicciones y su estupidez; y por este camino nos lleva a comprender mejor lo racional. Mihura combina el humor trágico, la verdad profunda y el ridículo, y caricaturiza el miedo a contravenir las normas. El tema de la libertad aparece también en obras como Sublime decisión, en la que el autor se ocupa de la emancipación de la mujer. El humor de Mihura consiste en ridiculizar a los personajes y las acciones de la realidad inmediata, como puede advertirse, por ejemplo, en la crítica a la tontería y al esnobismo de El caso del señor vestido de violeta. 4.El teatro social. Antonio Buero Vallejo y Alfonso Sastre muestran en sus escritos su disconformidad. Son dos formas distintas de entender la protesta: política, en Sastre; social en Buero Vallejo. En cuanto a Max Aub, el exilio, la cárcel y los campos de concentración dejan una profunda huella en su obra.´ 5.El teatro poético. 5.1.Alejandro Casona. En su teatro hay dos vertientes: teatro fantástico y teatro pedagógico. Su habilidad en la creación de una atmósfera irreal y mágica a través del lenguaje poético se demuestra en Los árboles mueren de pie y La dama del alba. En obras como Nuestra Natacha, Casona intenta comunicar ideas de índole pedagógica. 5.2.Antonio Gala. Ha cultivado todos los géneros: poesía, novela, guión televisivo, periodismo y teatro. Este autor entra en el mundo de la dramaturgia con Los verdes campos del Edén, pieza en la que aparecen dos temas que serán recurrentes a lo largo de toda su producción: la frustración y la soledad. Otra obra interesante es Anillos para una dama, donde hace una revisión de la figura de doña Jimena y de su relación con Minaya Álvar Fáñez. 6.El teatro independiente. A la muerte de Franco existían numerosas agrupaciones teatrales no comerciales o independientes, que reciben distintos nombres: teatro amateur (el realizado por aficionados), teatro de cámara (reduce la expresión escénica con decorados mínimos y escritura depurada), teatro universitario (es innovador y no comercial. Trata de transmitir un mensaje de crítica social. Fue muy activo en los años 60 y 70) y teatro experimental independiente (escenifica obras marginadas y crea una escuela de actores que siguen el método Stanislavski). Grupos de teatro independiente: Els Joglars, Los Goliardos, Tábano, Els Comediants, La Fura dels Baus. Todos ellos juegan o han jugado en sus comienzos con la improvisación; muchos hacen (o han hecho) teatro de calle; pero lo que une a todos es su compromiso de denuncia, de ridiculización y parodia de situaciones, tipos y caracteres. 7.
Teatro de denuncia y protesta. 7.1.
Teatro hermético, representado por José Rubial y Martínez Mediero. El teatro experimental. Sus representantes son Luis Matilla, Jerónimo López Mozo y, sobre todo, Fernando Arrabal, creador del teatro pánico, caracterizado por la búsqueda de nuevos elementos formales. Entre sus obras más representativas se encuentran: Pic-nic y La guerra de los mil años. . 7.3.Teatro puesto en cuestión. En los años 60, una serie de autores dramáticos escriben obras en las que se plantean la identidad del hecho teatral. Dos son los autores más destacados: Francisco Nieva. Entre su producción sobresalen obras que se caracterizan por la ruptura de las convenciones teatrales: La carroza de plomo candente y Pelo de tormenta. Luis Riaza. Pone en entredicho la validez y autenticidad de las nuevas fórmulas dramáticas. 8.Antonio Buero Vallejo.Cuando Buero estrena Historia de una escalera en 1949 nace un teatro que, arraigado en la realidad inmediata, va en busca de la verdad y pretende remover la conciencia española. La crítica suele dividir su producción dramática en diversos periodos, a pesar de que el autor reivindicó la unidad radical de su teatro. Según el propio autor, el tema común que liga toda su producción es la tragedia del individuo analizada desde un punto de vista social y ético. 8.1.Teatro de crítica social. En las obras de tipo social se analiza la sociedad española con todas sus injusticias, mentiras y violencias. Historia de una escalera. Plantea la imposibilidad de algunos individuos de mejorar materialmente debido a la situación social y a la falta de voluntad. El tragaluz. Revive la trágica historia de una familia en la España franquista. 8.2.Teatro simbolista. A través de la ceguera, Buero simboliza las limitaciones humanas en su drama En la ardiente oscuridad. El tema del misterio predomina en otras obras, también de corte simbolista, como La Fundación, obra que trata el tema de la represión política y la falta de libertad. 8.3.Dramas históricos. Se incluyen en esta categoría obras como las siguientes en las que el trasfondo histórico es a menudo un pretexto para reflexionar sobre la realidad contemporánea: Un soñador para un pueblo. Plasma el fracaso del marqués de Esquilache (Siglo XVIII), ministro ilustrado que trató de modernizar España. Las meninas. Refleja la ocultación de la verdad, la corrupción moral y la negación de la realidad. El concierto de San Ovidio. Plantea una situación en la que afloran lo grotesco, la injusticia y la falta de ética.
Su originalidad se basa en la ironía y la hipérbole con intención desmitificadora, y en las situaciones absurdas. 3.El teatro humorístico. Enrique Jardiel Poncela y Miguel Mihura se propusieron renovar el teatro de humor español. En una línea más conservadora se sitúa el teatro de Alfonso Paso. 3.1.Enrique Jardiel Poncela. Pretendía romper con las formas tradicionales de lo cómico, centradas en lo verosímil. La novedad de Jardiel radica en el encadenamiento de situaciones inverosímiles y el empleo de un humorismo de raíz intelectual. Entre sus obras destacan: Cuatro corazones con freno y marcha atrás y Eloísa está debajo de un almendro. 3.2.Miguel Mihura. Nace en Madrid en 1905 en el seno de una familia dedicada al teatro. En 1932, Mihura realizó su entrada en el mundo del teatro con: Tres sombreros de copa. Escrita en 1932, la obra no se estrenó hasta veinte años después. Por su originalidad, esa pieza supone una ruptura completa con el teatro cómico anterior. Desarrolla el tema de la libertad alcanzada y perdida. El protagonista, un joven ingenuo llamado Dionisio, se aloja en un hotelito de provincias la víspera de su boda. A lo largo de la noche desfila por su habitación todo un elenco de personajes grotescos que lo introducen en un mundo que pone en entredicho valores como la fidelidad, el honor o las convenciones sociales. En la obra se enfrentan dos mundos: el burgués, anodino e inmovilista, al que pertenece Dionisio, el joven burgués, y el frívoló y libertino del music-hall, al que pertenece Paula, la otra protagonista. A través de un lenguaje irracional (expresiones absurdas, situaciones ilógicas…) el autor muestra lo absurdo del ser humano, sus contradicciones y su estupidez; y por este camino nos lleva a comprender mejor lo racional. Mihura combina el humor trágico, la verdad profunda y el ridículo, y caricaturiza el miedo a contravenir las normas. El tema de la libertad aparece también en obras como Sublime decisión, en la que el autor se ocupa de la emancipación de la mujer. El humor de Mihura consiste en ridiculizar a los personajes y las acciones de la realidad inmediata, como puede advertirse, por ejemplo, en la crítica a la tontería y al esnobismo de El caso del señor vestido de violeta. 4.El teatro social. Antonio Buero Vallejo y Alfonso Sastre muestran en sus escritos su disconformidad. Son dos formas distintas de entender la protesta: política, en Sastre; social en Buero Vallejo. En cuanto a Max Aub, el exilio, la cárcel y los campos de concentración dejan una profunda huella en su obra.´ 5.El teatro poético. 5.1.Alejandro Casona. En su teatro hay dos vertientes: teatro fantástico y teatro pedagógico. Su habilidad en la creación de una atmósfera irreal y mágica a través del lenguaje poético se demuestra en Los árboles mueren de pie y La dama del alba. En obras como Nuestra Natacha, Casona intenta comunicar ideas de índole pedagógica. 5.2.Antonio Gala. Ha cultivado todos los géneros: poesía, novela, guión televisivo, periodismo y teatro. Este autor entra en el mundo de la dramaturgia con Los verdes campos del Edén, pieza en la que aparecen dos temas que serán recurrentes a lo largo de toda su producción: la frustración y la soledad. Otra obra interesante es Anillos para una dama, donde hace una revisión de la figura de doña Jimena y de su relación con Minaya Álvar Fáñez. 6.El teatro independiente. A la muerte de Franco existían numerosas agrupaciones teatrales no comerciales o independientes, que reciben distintos nombres: teatro amateur (el realizado por aficionados), teatro de cámara (reduce la expresión escénica con decorados mínimos y escritura depurada), teatro universitario (es innovador y no comercial. Trata de transmitir un mensaje de crítica social. Fue muy activo en los años 60 y 70) y teatro experimental independiente (escenifica obras marginadas y crea una escuela de actores que siguen el método Stanislavski). Grupos de teatro independiente: Els Joglars, Los Goliardos, Tábano, Els Comediants, La Fura dels Baus. Todos ellos juegan o han jugado en sus comienzos con la improvisación; muchos hacen (o han hecho) teatro de calle; pero lo que une a todos es su compromiso de denuncia, de ridiculización y parodia de situaciones, tipos y caracteres. 7.
Teatro de denuncia y protesta. 7.1.
Teatro realista
Toma como motivos centrales la injusticia social, la explotación del hombre…Los autores más representativos son los siguientes: José María Rodríguez Méndez. La denuncia y la crítica social aparecen Los inocentes de la Moncloa. Carlos Muñiz: El precio de los sueños. José Martín Recuerda. Sitúa sus dramas en la Andalucía trágica y violenta. La protesta caracteriza sus obras: Las salvajes en Puente San Gil. 7.2.Teatro no realista. Atribuye a los personajes un valor simbólico y los hace actuar como nexo entre las diferentes acciones. Se pueden distinguir dos corrientes:Teatro hermético, representado por José Rubial y Martínez Mediero. El teatro experimental. Sus representantes son Luis Matilla, Jerónimo López Mozo y, sobre todo, Fernando Arrabal, creador del teatro pánico, caracterizado por la búsqueda de nuevos elementos formales. Entre sus obras más representativas se encuentran: Pic-nic y La guerra de los mil años. . 7.3.Teatro puesto en cuestión. En los años 60, una serie de autores dramáticos escriben obras en las que se plantean la identidad del hecho teatral. Dos son los autores más destacados: Francisco Nieva. Entre su producción sobresalen obras que se caracterizan por la ruptura de las convenciones teatrales: La carroza de plomo candente y Pelo de tormenta. Luis Riaza. Pone en entredicho la validez y autenticidad de las nuevas fórmulas dramáticas. 8.Antonio Buero Vallejo.Cuando Buero estrena Historia de una escalera en 1949 nace un teatro que, arraigado en la realidad inmediata, va en busca de la verdad y pretende remover la conciencia española. La crítica suele dividir su producción dramática en diversos periodos, a pesar de que el autor reivindicó la unidad radical de su teatro. Según el propio autor, el tema común que liga toda su producción es la tragedia del individuo analizada desde un punto de vista social y ético. 8.1.Teatro de crítica social. En las obras de tipo social se analiza la sociedad española con todas sus injusticias, mentiras y violencias. Historia de una escalera. Plantea la imposibilidad de algunos individuos de mejorar materialmente debido a la situación social y a la falta de voluntad. El tragaluz. Revive la trágica historia de una familia en la España franquista. 8.2.Teatro simbolista. A través de la ceguera, Buero simboliza las limitaciones humanas en su drama En la ardiente oscuridad. El tema del misterio predomina en otras obras, también de corte simbolista, como La Fundación, obra que trata el tema de la represión política y la falta de libertad. 8.3.Dramas históricos. Se incluyen en esta categoría obras como las siguientes en las que el trasfondo histórico es a menudo un pretexto para reflexionar sobre la realidad contemporánea: Un soñador para un pueblo. Plasma el fracaso del marqués de Esquilache (Siglo XVIII), ministro ilustrado que trató de modernizar España. Las meninas. Refleja la ocultación de la verdad, la corrupción moral y la negación de la realidad. El concierto de San Ovidio. Plantea una situación en la que afloran lo grotesco, la injusticia y la falta de ética.