EL TEATRO ESPAÑOL EN LA SEGUNDA MITAD DEL S.XX
TEATRO EN EL EXILIO
Al acabar la Guerra Civil Lorca había muerto y valle-Inclán no producía, además figuras ya consagradas marcharon al exilio. El teatro empieza a recuperarse, vigilado de cerca por la censura, por lo que surge un nuevo conjunto de tendencias con nuevas figuras.
TEATRO DE HUMOR
En esta modalidad surgen dos tendencias: 1) Esta primera contribuyó a mantener la escena española alejada de las cuestiones reales, destacó Alfonso Paso que cultivó un tipo de comicidad amable, evasiva e intrascendente no exenta de ingenio. 2) Frente a la primera, se va imponiendo un teatro radicalmente innovador 3)
Enrique Jardiel Poncela, que rompíó con el humor convencional estrenando “ Cuatro corazones con freno y marcha atrás”, obra que se adentra por los terrenos de lo absurdo y lo inverosímil, al escenificar la peripecia de un grupo de personajes que, a medida que pasa el tiempo, en vez de envejecer rejuvenecen. 4)
Miguel Mihura, escribíó una de las obras maestras del teatro español contemporáneo: “ Tres sombreros de copas”, la cual no llegó a estrenarse hasta casi veinte años después.
TEATRO REALISTA Y COMPROMETIDO
Con “ Historia de una escalera” de Antonio Buero Vallejo se abre paso el teatro realista centrado en el compromiso político y la denuncia social, cuya presencia será escasa a causa de los problemas con la censura. Buero Vallejo defendía el teatro de lo posible, en el que el autor debe acatar ciertas normas del sistema social y de la censura para que sus obras puedan subir a los escenarios y desde allí ejercitar la lucha contra la injusticia. Para esto se vale de personajes históricos o situaciones alejadas de la actualidad para deslizar su mensaje acerca de los males presentes.
TEATRO EXPERIMENTAL
A finales de los años sesenta una serie de autores huyen del Realismo en intento de contactar con la vanguardia. Es preciso mencionar la influencia del teatro universal contemporáneo: el teatro épico, del absurdo, que plasma en la escena la falta de sentido de la existencia humana por medio de obras sin argumento coherente con personajes que hablan en medio de disparatados escenarios, el teatro de la crueldad, que a través de lo violento, lo macabro, o desagradable pretende sacudir al espectador poniéndolo en contacto con las realidades ocultas del inconsciente y el teatro independiente, que proliferó aquí en los últimos años de Franco, con grupos formados por jóvenes universitarios críticos con la dictadura entre los cuales algunos aun se mantienen en activo.
Entre los dramaturgos vanguardistas españoles hay que citar:
Francisco Nieva, que supo añadir las influencias extranjeras a un profundo conocimiento de la literatura española, en obras de delirante argumento, imaginación opulenta y sorprendente expresión.
Fernando Arrabal, que ha estrenado casi siempre en Francia ante la imposibilidad de darse a conocer en España, representa el experimento más audaz y original del teatro español posterior a la Guerra Civil.
TEATRO DE LAS DOS ULTIMAS DÉCADAS
ASPECTOS GENERALES
Desde la abolición de la censura una serie de momentos, cuya especial relevancia les hizo trascender el ámbito de la política, se convirtieron en símbolos con incidencia notable en el desarrollo de la cultura. Como por ejemplo; la aprobación de la constitución, el intento de Golpe de Estado, la victoria del PSOE en las elecciones con mayoría absoluta, la integración de España en la uníón europea, la huelga general de 1988, la expo en Sevilla y los juegos olímpicos en Barcelona, además del triunfo del partido popular en las elecciones de 1996. Durante estas dos décadas las manifestaciones culturales experimentan un desarrollo muy vivo, entre los rasgos generales que definen esta evolución podemos destacar: Una creciente difusión exterior de la obra de nuestros escritores. La mayor presencia de obras y autores de lengua no castellana como consecuencia de la presencia de los poderes autonómicos. Una extraordinaria vitalidad creadora en todos los géneros literarios.
TEATRO DE AUTOR
Los que ya escriben durante el franquismo pero que a partir de 1975 amplían y consolidan su prestigio, como Antonio Gala y Fernando Arrabal, sin olvidar a Buero Vallejo o Alfonso Sastre. Nombres procedentes de grupos de teatro universitario, que se dan a conocer en esta época, como José Sanchís Sinisterra, dramaturgo que destaca por la coherencia entre teoría teatral y práctica escénica.
TEATRO DE DIRECTOR
La progresiva desaparición de los grupos de teatro independiente, dio lugar a la aparición de compañías estables, formadas por profesionales del teatro unidos por comunes planteamientos estéticos e ideológicos, que trabajan juntos de modo permanente asumiendo por lo general todos los aspectos del proceso de la creación dramática: Textos, dirección, escénica, interpretación y gestión económica.