Literatura años 40:
Los escritores de postguerra rechazan el concepto de arte puro, ya que consideraban que la literatura debía dar una respuesta a la realidad que se vivía en España. Las obras literarias estaban llenas de angustia existencial, denuncias de injusticias, solidaridad y experiencia personal. El problema estaba en la censura, que impedía la libertad de expresión, por lo que varios autores se fueron al exilio, y otros utilizaban símbolos y alegorías para asociarlo a la situación social y política. Se distinguen dos tendencias:
Conservadora que comparte los ideales de los vencedores exaltando las nueva España y con temas intemporales para evadir los problemas de la realidad.
Rehumanización que es una poesía llena de angustia y desesperanza. Un teatro y una novela dominados por el vacío existencial.
Literatura de exilio:
Sus temas comunes son la evocación de España, el recuerdo de la guerra, el deseo de recuperar el pasado y la experiencia del destierro. León Felipe, Pedro Salinas, Alejandro Casanova, Max Aub y Rosa Chacel.Poesía:
Se caracteriza por la desaparición de los grandes poetas y por la limitación en la libertad de expresión. Los primeros años, estuvieron protagonizados por poetas del régimen franquista (poetas arraigados), con una poesía de evasión y exaltación del régimen. Su lenguaje, es retórico y culto, y utilizan el soneto. Escriben poesía basada en la experiencia personal, y para ello utilizan un lenguaje sencillo, un verso libre, e imágenes surrealistas. Luis Rosales, La casa encendida. En 1944 se renueva la poesía con Hijos de Ira, de Dámaso Alonso, y Sombra del paraíso de Vicente Alexandre (poesía desarraigada); su finalidad es demostrar el descontento de la sociedad. Es una poesía rehumanizada, centrada en la angustia existencial y el tema de Dios como fuente de caos y sin razón. Lenguaje directo con tono tremendista y apasionado, utilizando el verso libre y soneto.Teatro:
Se divide en teatro de evasión y humor. Tardó en renovarse debido a la censura, por el gusto burgués y por la desaparición de autores vanguardistas. Dominó el teatro de propaganda al régimen, y el teatro burgués. En 1949 se renueva el teatro con Historia de una escalera de Buero Vallejo, con un teatro comprometido y crítico que renueva la escena teatral frente al teatro burgués. Otra renovación fue el teatro de humor (Poncela y Mihura) pensaban que el humor no solo era diversión, sino un instrumento para dar una visión del mundo crítico. Este teatro se caracteriza por situaciones inverosímiles, un dialogo absurdo y GAGS.Eloisa esta debajo de un almendro, de Poncela, y Tres sombreros de copa, de MM.