CAPÍTULO I:
La novela se inicia con un cuadro que nos sitúa en una aldea perdida en el Amazonas, El Idilio. Un dentista hace su trabajo subido a una diminuta tarima sobre la que ha colocado un sillón de barbero. Trabaja en vivo, sin más anestesia que el aguardiente; mientras, despotrica del Gobierno e insulta a los clientes para que dejen de quejarse. Entre los espectadores de la escena encontramos por primera vez en la novela a los mal llamados «jíbaros», nombre con que los españoles bautizaron Seguir leyendo “Que trato le prodigaron al niño bolívar” »