Este documento resume la trama de una obra teatral ambientada en Madrid durante la Guerra Civil Española, centrándose en la vida de una familia y su entorno.
Inicio del Conflicto
Conversaciones Preliminares y Vida Familiar
La obra teatral empieza con Luis y Pablo hablando sobre libros y, en concreto, de qué pasaría si en Madrid hubiera una guerra y en qué lugares podrían haber barricadas. También hablan de sus cosas.
Poco más tarde, en el comedor de Doña Dolores (madre de Luis), ella y Doña Antonia (una vecina) hablan de sus cosas mientras María (la criada) está en la cocina. Al cabo de un rato aparece Manolita (la hija de Doña Dolores) y Doña Antonia se marcha. Después aparece Luis y, mientras ponen la mesa, van hablando de sus novedades. Más tarde, aparece Don Luis (marido de Doña Dolores) preocupado por la actualidad y la empresa donde trabaja (las Bodegas). Después de comer, Luis “recuerda” que le ha de dar unos apuntes a Pablo, pero va a ver a Charito, una “amiga”. Mientras, Manolita le cuenta a su madre que su vecino (Julio) quiere casarse con ella.
Primeros Impactos y Noticias
Dos días más tarde, en casa de Doña Antonia, ella le comenta a su hijo que le ha encontrado un empleo. Luego aparece su otro hijo (Pedro) que le dice a su madre que han asesinado a Calvo Sotelo, pero su madre le responde diciendo que Manolita se ha hecho artista (algo para ella más horrible que el asesinato) y eso ha hecho entristecer a Julio (que la quiere). Un rato más tarde, Doña Antonia invita a Don Ambrosio, su mujer Laura, a los padres de Don Ambrosio, a Don Luis, Doña Dolores, Luis y Manolita, para hablar con ellos y celebrar que su hijo Julio tiene un empleo.
Más tarde, en casa de Doña Dolores, Manolita y Julio hablan de su relación. Mientras, aparece Don Luis dando la noticia de que se han sublevado los militares y poniendo a la misma vez la radio. Al día siguiente, Doña Dolores habla con María para empezar a almacenar alimentos para los días que se avecinan.
La Guerra en Madrid (1936-1938)
Noviembre de 1936: Tensiones Familiares y el Frente Cercano
La acción se sitúa en el mes de noviembre, en el comedor de Doña Dolores. Ella y su marido discuten sobre María y Luis, ya que según Manolita, Luis entraba en la habitación de María y hacían algo más que hablar. Al final, después de hablar con ella, deciden que se marche con su familia, que la debe necesitar. Dicho esto, Don Luis pone la radio para saber las noticias del frente y se pone a hablar con su hijo Luis sobre las Bodegas. Mientras, en la calle se escucha el ruido del combate, cada vez más cerca, juntamente con algún que otro himno comunista.
Enero de 1937: Noticias del Frente y la Llegada de Anselmo
En enero de 1937, en la habitación de Luis, él y Pablo hablan sobre las últimas noticias de la guerra, de las últimas víctimas cercanas, de sus pequeños trabajos temporales y de las discusiones en casa de Pablo a causa de la ideología de sus familiares. Un par de horas más tarde, en el comedor se encuentran reunidos Doña Dolores, Don Luis, Manolita, Luis, Pablo y un primo de Luis: Anselmo. Anselmo es un joven un poco más grande que Luis que es miliciano que ha aprovechado para venir a ver a su familia y de paso explicar las novedades del frente y la situación en Valencia. Después de conversar un rato con ellos, él decide marcharse hacia el campo de batalla. Nada más irse, suenan las sirenas y bajan todos al sótano.
Septiembre de 1937: Incautaciones, Rumores y un Embarazo
Al mismo tiempo, en casa de Doña Antonia, ella, Doña Marcela y Doña Dolores discuten sobre una incautación y la actualidad de las Bodegas. También se informan con las últimas noticias llegadas del frente y Doña Dolores le pregunta sobre la novia de Pedrito (Rosa).
Estamos en septiembre de 1937, en el comedor de Doña Dolores (una escena habitual en esta obra). Manolita, su hija, le confiesa a su madre que está embarazada de cuatro meses, y que el padre es un miliciano. Mientras le explica esto, suena el timbre. Doña Antonia va a ver y vuelve a entrar con Doña Antonia, que se la ve muy preocupada. La razón: le ha llegado una nota anónima diciendo que Rosa (la novia de Pedrito) es una mala mujer, una mujer de la calle, y que Pedrito lo afirma, pero aun así la quiere.
Vida en el Sótano y Escasez
En el sótano del edificio donde viven todos, se encuentran Doña María Luisa (la casera), Maluli (su hija), tres vecinos del inmueble, Don Ambrosio, Laura, Doña Marcela, Don Luis, Doña Dolores, Manolita y Luis. Empiezan a hablar de que al principio de los bombardeos bajaba más gente de la que baja ahora. Luego, el tema de conversación gira en torno al frente de guerra y a la radio y las emisoras que por ella se escuchan. Mientras, en un rincón del sótano, Luis y Maluli hablan animadamente y Luis le entrega a ella una poesía y le dice cuándo se podrán volver a ver. Y durante este rato, los mayores hablaban de la situación y escasez de los alimentos.
Octubre de 1938: Visitas, Críticas y una Tragedia
En octubre de 1938, en el comedor de Doña Dolores, Manolita y Don Luis hablan con María y Basilio (el marido de esta) que han venido a hacerles una visita, a ver al hijo de Manolita y a traerles algo de comida (puesto que Basilio es el dueño de un colmado). Una vez se han despedido y se han marchado, Padre e hijo se dedican a criticarlos sobre su aspecto físico y los rumores que corren sobre ellos (María y Basilio) en el barrio, pese a que Doña Dolores les reprocha, también les da algo de razón. Luego, una vez reunida toda la familia, Doña Dolores expone que va faltando comida del puchero donde guisa y, al cabo de muchos argumentos, descubre que toda la familia tiene la culpa, ya que todos “meten mano” al puchero.
Pero de repente llega Rosa con una mala noticia: ha caído un obús en el bazar donde trabajaba Julio (el marido de Manolita) y él ha fallecido.
El Final de la Guerra (1939)
Bombardeos y la «Lluvia» de Pan
Un día de 1939, en el sótano del inmueble se encuentran Doña María Luisa, su hija Maluli y su criada Josefa. Se encuentran ahí metidas a causa de que han sonado las sirenas, lo que significa que sobrevolaban el cielo de Madrid aviones. Pero entonces llega Luis y les dice que está “lloviendo” pan. Al principio, Doña María Luisa no se lo cree y, cuando accede y manda a Josefa, resulta que es demasiado tarde y ya no queda pan en las calles de Madrid.
Despidos, Agresiones y Despedidas
Unos días más tarde, otra vez en el comedor de la casa de Doña Dolores, están sentadas y charlando ella, Doña Antonia y Doña Marcela. De repente suena el timbre y resulta ser María, que viene con mala cara; la razón de ello ha sido que ha roto con Basilio. Pero aparte de ello, María les pide si pueden volver a contratarla. La respuesta de Doña Dolores es que no, ya que no atraviesan una buena situación económica, pero Doña Dolores le recomienda que vaya a casa de Doña María Luisa, ya que su criada Josefa se ha ido. Un rato más tarde, aparece Don Luis y le cuenta a su mujer que les han despedido de las Bodegas (a él y a su hijo) por fundar un sindicato. En ese instante entran Manolita y Luis. Él, hecho un cirio, ya que ha recibido una paliza por parte de unos soldados por defender a su hermana. Al poco de decir esto, suena el timbre: es Pablo y su familia que vienen a despedirse porque se van a Barcelona por motivos de trabajo. Después de hablar un rato, Don Luis descorcha una botella que le ha entregado el padre de Pablo. Brindan y beben a la salud y suerte de todos.
Después de la Guerra
Reflexiones Finales
Días más tarde de acabarse la guerra, Don Luis y su hijo, pasean por un descampado y Luis le explica a su padre que, antes de que empezara la guerra (al inicio de la obra), él y Pablo hablaban de cómo podría convertirse Madrid en un campo de batalla.