Capitulo 1:
Martín Fierro se hallaba en una pulpería (bar-despensa) y decide contar su historia, pidiéndole a Dios y a los santos que lo ayudaran a refrescar su memoria y aclaren su entendimiento. El decía que no era cantor letrado, que si se ponía a cantar no iba a terminar, que hacia gemir a la prima y llorar a la bordona (Cuerdas de la viguela). Contaba que tenia mucha experiencia en la vida, y que nada enseñaba tanto como el sufrir y el llorar.
Capitulo 11:
Luego supo Cruz que había una milonga por la zona y allí fue. Se puso a bailar, pero el guitarrero lo ofende con una payada y Cruz de un faconazo le corta todas las cuerdas de la guitarra. Un gringo con fusil acudió en defensa del cantor entonces Cruz se vio obligado a salir. De adentro de la pulpería salio el guitarrero y se puso a pelear con Cruz, pero este con un corte lo dejo en el piso. Monto su bagual y se largo a los campos.
Capitulo 12:
Un dia lo llamo el juez a Cruz y le propuso que se hiciera soldado de policía. Así obtuvo el cargo de sargento, pero como a el no le gustaba andar con el revolver en la cintura y por haber prestado ayuda a Fierro que no lo iba abandonar, decide dejar la policía y seguir como matrero.
Capitulo 13:
Luego se retiran del rancho y mientras van cabalgando, Fierro alaba las creaciones de Dios, en especial la mayor que le dio al hombre que es una lengua que habla. Luego deciden ir a tierras indígenas, al lugar donde estaban los caciques, pues estos trataban a los cristianos que iban por su gusto de «hermanos». Y hacia esas tierras partieron porque allí iban a tener mas seguridad y pasarían menos males. Cruz y Fierro, arriando su tropilla cruzaron la frontera. Y cuando la habían pasado Cruz le dijo a Fierro que mirara su pueblo, y a este dos lagrimas le rodaron por la cara. Siguieron su rumbo y entraron al desierto. El relator concluye diciendo que no sabe si se habrán muerto y que el ha relatado a su modo: «Males que conocen todos, pero naides canto» Capitulo 15:
-«Solo me aconsejaba cuando estaba borracho.»- Le decía que se haga amigo del juez y nunca le lleve la contra; que nadie le tenga envidia; y que si buscaba vivir tranquilo que no se case. Le aconseja que es necesario llevar armas. Luego de estos consejos se quedaba dormido por la borrachera.
Capitulo 30:
Fierro explica que el hombre debe mostrarse cuando llegua la ocasión, hace mal en que se niegue o en que se lo rueguen; y dice que hará gemir las cuerdas hasta que las velas no ardan. Cuenta que era costumbre de el cantar las noches enteras. El moreno le dice que el es un pobre guitarrero y da gracias a Dios por poder cantar con alguien que lo experimenta a el. El negro cuenta que tenia nueve hermanos, que ha vivido libre sin depender de nadie, y que sabe mucho. Explica que si tiene alguna falta al cantar que se la perdonen y que se debe escuchar al cantor, aunque sea negro, por que aprenden todos. Fierro le replica que si el sabia tanto, que le diga cual es el canto del cielo. El moreno le dice que Dios había creado a los hombres negros y blancos, pero que no hizo dos clases distintas, pues los negros pintaban al diablo blanco, y los blancos lo pintaban de negro. Continua y explica que los cielos lloran y cantan hasta el mayor silencio. Fierro, por su parte, dice que los negros y los blancos tienen los mismos dolores, y que le relate el canto de la tierra. El moreno, a pesar de sus pocos conocimientos, lo explico bien, y entonces Fierro le pide el canto del mar, el de la noche, de donde nace el amor, y que explique que entiende por ley. Como relata todas bien, Fierro le permite al moreno que le pregunte algo. El moreno, entonces le pregunta «¿Para que fin el Eterno ha creado la cantidad?» Fierro le dice que Dios creo solo la unidad, y que el hombre aprendió a contar.
Al ver que le contesto correctamente, el moreno le pregunta para que formo Dios la medida. Fierro le contesta que la medida la invento el hombre para el bien suyo, pues Dios no tenia que medir sino la vida del hombre. Luego el moreno le pide que le diga que significa el tiempo y el peso. Fierro se lo relata bien, y le dice que si quería aprender mas cosas que se lo preguntara. El moreno le dice que ninguno debe abusar de la ignorancia de nadie, que es seguro que pierda un cantor de media talla contra otro de talla entera, que esta deprimido y triste y que solo cantaría para buscar consuelo. Cuenta que de los diez hermanos solo quedan nueve, pues el primero murió a manos de un pendenciero, que jamas encontró. Dice finalmente que si en otra ocasión payan, cantaran sobre las muertes injustas que algunos hombres cometen. Fierro le responde que por fin se había callado, que el conoció a los morenos mas peleadores, y que el no busca peleas y que las contiendas no le gustan, pero ni las sombras lo asustan ni los bultos lo menean.
Capitulo 32:
Fierro los empieza a aconsejar y le dice que estos concejos, que le ha costado adquirirlos, se los da porque desea dirigirlos, pero que su ciencia no alcanza para darles la prudencia que precisan para seguirlos. CANTO XXXII:Un padre que da consejos-más que padre es un amigo;-ansí como tal les digo-que vivan con precaución:-naide sabe en qué rincón-se oculta el que es su enemigo.//Yo nunca tuve otra escuela-que una vida desgraciada:-no estrañen si en la jugada-alguna vez me equivoco;-pues debe saber muy poco-aquel que no aprendíó nada.//Hay hombres que de su cencia-tienen la cabeza llena;-hay sabios de todas menas,-mas digo, sin ser muy ducho:-es mejor que aprender mucho-el aprender cosas buenas.//No aprovechan los trabajos-si no han de enseñarnos nada;-el hombre, de una mirada,-todo ha de verlo al momento:-el primer conocimiento-es conocer cuándo enfada.//Su esperanza no la cifren -nunca en corazón alguno;-en el mayor infortunio-pongan su confianza en Dios;-de los hombres, sólo en uno;-con gran precaución en dos.//Las faltas no tienen límites-como tienen los terrenos;-se encuentran en los más buenos,-y es justo que les prevenga:-aquel que defetos tenga,-disimule los ajenos.//Al que es amigo, jamás
lo dejen en la estacada,-pero no le pidan nada-ni lo aguarden todo de él:-siempre el amigo más fiel-es una conducta honrada._//Ni el miedo ni la codicia-es bueno que a uno le asalten;-ansí no se sobresalten-por los bienes que perezcan;-al rico nunca le ofrezcan -y al pobre jamás le falten.//Bien lo pasa, hasta entre Pampas,-
el que respeta a la gente;-
el hombre ha de ser prudente-para librarse de enojos:-cauteloso entre los flojos,-moderado entre valientes.//El trabajar es la Ley,-porque es preciso alquirir;-no se espongan a sufrir-una triste situación:-sangra mucho el corazón -del que tiene que pedir.//Debe trabajar el hombre-para ganarse su pan;-pues la miseria, en su afán
de perseguir de mil modos,-llama en la puerta de todos-y entra en la del haragán.//A ningún hombre amenacen,-
porque naide se acobarda;-poco en conocerlo tarda-quien amenaza imprudente:-que hay un peligro presente-y otro peligro se aguarda.//Para vencer un peligro, -salvar de cualquier abismo,-por esperencia lo afirmo:-más que el sable y que la lanza-suele servir la confianza-que el hombre tiene en sí mismo.//Nace el hombre con la astucia
que ha de servirle de guía;-sin ella sucumbiría,-pero, sigún mi esperencia,-se vuelve en unos prudencia -y en los otros picardía.//Aprovecha la ocasión-el hombre que es diligente;-y ténganló bien presente-si al compararla no yerro,-la ocasión es como el fierro,-se ha de machacar caliente.//Muchas cosas pierde el hombre-que a veces las vuelve a hallar;-pero les debo enseñar,-y es bueno que lo recuerden:-si la vergüenza se pierde,-jamás se vuelve a encontrar.//Los hermanos sean unidos-porque ésa es la ley primera;-tengan uníón verdadera-en cualquier tiempo que sea,-porque si entre ellos pelean,-los devoran los de ajuera.//Respeten a los ancianos,-el burlarlos no es hazaña;-si andan entre gente estraña-deben ser muy precavidos,-pues por igual es tenido-quien con malos se acompaña.//La cigüeña, cuando es vieja-pierde la vista, y procuran-cuidarla en su edá madura-todas sus hijas pequeñas:-apriendan de las cigüeñas-este ejemplo de ternura.//Si les hacen una ofensa,-aunque la echen en olvido,-vivan siempre prevenidos:-pues ciertamente sucede-que hablará muy mal de ustedes-aquel que los ha ofendido.-El que obedeciendo vive-nunca tiene suerte blanda;-mas con su soberbia agranda-el rigor en que padece: -obedezca el que obedece-y será bueno el que manda.//Procuren de no perder-ni el tiempo ni la vergüenza;-como todo hombre que piensa-procedan siempre con juicio;-y sepan que ningún vicio -acaba donde comienza.//Ave de pico encorvado -le tiene al robo afición; -pero el hombre de razón -no roba jamás un cobre,-pues no es vergüenza ser pobre -y es vergüenza ser ladrón. /El hombre no mate al hombre-ni pelée por fantasía;-tiene en la desgracia mía-un espejo en que mirarse;-saber el hombre guardarse-es la gran sabiduría.//La sangre que se redama-no se olvida hasta la muerte;-la impresión es de tal suerte,-que a mi pesar, no lo niego,-cai como gotas de fuego -en la alma del que la vierte.//Es siempre, en toda ocasión,-el trago el pior enemigo;-con cariño se los digo,-recuérdenló con cuidado:-aquel que ofiende embriagado -merece doble castigo. //Si se arma algún revolutis,-siempre han de ser los primeros;-no se muestren altaneros,-aunque la razón les sobre:-en la barba de los pobres-aprienden pa ser.
Capitulo 33:
Luego se separaron todos, una para cada punto cardinal, pero hicieron una promesa: convinieron entre todos cambiarse el nombre. El relator explica que ha cumplido con su deber, pero todavía le quedan rollos por si se ofrece a dar lazo, que le permitan descansar porque en este punto (33 cantos) se planta; dice que recordemos estas palabras «En mi obra he de continuar hasta dárselas concluidas, si el ingenio o si la vida no me llegan a faltar», y que si algún dia faltasen, los gauchos sentirán tristeza en el corazón y lo tendrán en su memoria para siempre. «Que nadie se ofenda si canto de este modo no es para mal de ninguno si no para bien de todos».