TEATRO ANTERIOR
A la altura de 1900 la afición al teatro en España era muy grande.El teatro de consumo destinado a un público de extracción popular era el más abundante. El género que domina la escena es el género chico: parodias de óperas y zarzuelas de éxito, operetas, revistas…etc.En el teatro más propiamente literario, o género grande por su mayor duración, la alta comedia decimonónica deriva en la comedia burguesa o de salón.
En esta línea comienza su carrera teatral el dramaturgo Jacinto Benavente que inicialmente estaba vinculado a estética simbolista, pero después evoluciónó hacia el conservadurismo. Destacan tres de sus obras: Los intereses creados, Señora ama y La malquerida.Otra tendencia teatral de raíces modernistas es el teatro poético, que intenta aproximar el género dramático de la poesía lírica para constituir un drama lírico. Con los años, triunfa un teatro histórico en verso que renuncia al cosmopolitanismo modernista para replegarse al más puro casticismo. A esta línea teatral pertenece Eduardo Marquina (Las hojas del Cid).Durante la primera década el teatro tiene carácterísticas propiamente modernistas:
El primitivismo, decadentismo, gusto por lo mortecino y ruinoso, erotismo, etc.
Valle- Inclán
Aunque durante esta primera etapa la dedicación literaria primordial de don Ramón es la narrativa, da también sus primeros pasos como dramaturgo: Tragedia de ensueño, Comedia de ensueño, El yermo de las almas, El marqués de Bradomín…Unamuno
Ni busca ni alcanza el éxito comercial. Pero es muy interesante literariamente. En sus primeras obras, es influenciado por la estética simbolista. Sus carácterísticas son la simplificación dramática, reduciendo al mínimo la intriga y los personajes. Como en las novelas, el diálogo y el monólogo son siempre densos.Notables dramas son Fedra, El otro y El hermano Juan.En la segunda década, el teatro comercial sigue siendo el éxito de la comedia de Benavente.Dentro del teatro cómico, la figura más destacada es la de Carlos Arniches.Abundan en él las deformaciones humorísticas de vocablos y expresiones, los términos de argot, los juegos de palabras… La decadencia del sainete llevó su teatro a partir de 1916, fecha de estreno de La señorita de TréVélez, por el camino de la tragedia grotesca, modalidad teatral a la que también pertenecen ¡Qué viene mi marido!, Los caciques…Mención especial merece en esta línea innovadora Jacinto Grau con su obra El señor de Pigmalión (1921).Durante la segunda década el teatro tiene las carácterísticas propias del Novecentismo: Racionalismo, antirromanticismo, defensa del arte puro, aristocratismo intelectual y estilo cuidado.
Ramón Gómez de la Serna
Como dramaturgo, en su juventud intentó participar en la renovación del anquilosado teatro español con casi una veintena de originales piezas. Destacan Los medios seres y Escalera.Valle- Inclán
En su etapa del primitivismo, destacan las Comedias Bárbaras: Ágüila de blasón y Romance de lobos que tienen por protagonista a Don Juan Manuel Montenegro, un señor feudal bárbaro y lujurioso que reina sobre un medio social rural en el que abundan seres marginales y extraños, ya que hace frente finalmente a sus seis siniestros hijos, uno de los cuales acaba con su vida. También tiene lugar Cara de Plata (1922). En su etapa de distanciamiento artificioso destacan Cuento de Abril, Voces de gesta, La Marquesa Rosalinda, etc. Están inspiradas en la tradición teatral clásica y recrean ambientes y motivos tópicos, pero se distancian cada vez más de personajes y situaciones.Por último, en la tercera década el teatro comercial no es demasiado diferente de de las décadas anteriores. Siguieron predominando las comedias al estilo de Benavente, el teatro poético, las piezas cómicas y los espectáculos musicales. Durante la tercera década el teatro presenta las siguientes carácterísticas:Está muy influido por las vanguardias, sobre todo por el Surrealismo y el Expresionismo.
El dramaturgo más importante de esta época fue Federico García Lorca. Otros dramaturgos menos importantes fueron Max Aub, autor de piezas vanguardistas, y Alejandro Casona (La sirena varada, Nuestra Natacha).
Federico García Lorca
Fue, además de poeta, un gran autor dramático. Durante los años treinta su deseo de experimentación dramática lo llevó por dos caminos distintos: el teatro vanguardista próximo al Surrealismo y el teatro realista. Destacan obras como El público que desarrolla el tema del amor homosexual y el problema del teatro convencional o Así que pasen cinco años, donde Lorca reitera algunos de sus temas carácterísticos: el amor, la muerte, la frustración… Más convencionales estéticamente son Bodas de Sangre, Yerma, Doña Rosita la soltera…En el género cómico destaca Enrique Jardiel Poncela, quien supo fundir en sus obras el humor de la comedia convencional con rasgos propios del arte vanguardista: uso de imágenes sorprendentes, primacía de la fantasía, humor intelectual…Valle- Inclán
Por último, en su etapa de esperpentos, Valle- Inclán mezcla la tragicomedia con elementos grotescos. En esta etapa, publica Divinas palabras pero la que más destaca es Luces de Bohemia, que es sin duda la obra clave en el giro radical de la literatura del autor. Ésta, fue la primera obra a la que Valle- Inclán designó con el término de esperpento. Después, publicó Los cuernos de don Friolera y otros cuatro breves experimentos dramáticos reunidos en Retablo de la avaricia, la lujuria y la muerte de nuevo en la tradición del guiñol, caracterizan estas obritas la parodia de motivos religiosos o culturales y los temas de la avaricia, la lujuria o la muerte.