La generación del 98
Alude a un grupo de escritores que expresaron su desagrado ante la sociedad de la Restauración. Se inspiran en pensadores reformistas y evolucionan hasta centrarse en la sociedad española. Reflejan el pesimismo existencial y el subjetivismo carácterístico de la época. El género preferido es el ensayo.
Se suele incluir en el grupo del 98 a Unamuno, Azroín, Baroja y Maeztu. Los rasgos que caracterizan al grupo: • Los antecedentes del grupo: Larra, los liberales o regeneracionista. • La evolución desde posturas juveniles radicales hacia posiciones conservadoras en su madurez. • La preocupación por los problemas sociales y culturales sobre la sociedad española • El tema de España surge cuando pretenden entender qué es España. • Preocupaciones existenciales: el sentimiento de angustia, su desconfianza en la razón y la inclinación hacia el subjetivismo. • La estética del Grupo del 98 se inclina hacia la sencillez. • El género más empleado es el ensayo, que trata sobre temas muy variados: historia, literatura, religión..
Unamuno es uno de los ensayistas más interesantes del momento. Predominan dos temas: • El tema de España: aparece en sus libros de viajes y en ensayos de tono más reflexivo. Unamuno critica la realidad española, y apuesta por la europeización y posteriormente evoluciona hacia una postura espiritualista y pasa a defender al españolización de Europa. • El tema existencial lo plantea en ensayos como “Del sentimiento trágico de la vida”; desarrolla el conflicto entre el ansia de inmortalidad que apoya la religión y la razón, que parece oponerse a ese deseo.
Azorín
La obsesión por el tiempo, el paisaje y la melancolía y las descripciones minuciosas y detallistas. Predominan dos temas: el paisaje y la crítica literaria. • Los ensayos sobre paisajes españoles reflejan la evolución ideológica del autor. Azorín suele revivir el pasado de aquello que describe, las ciudades, sus personajes históricos y literarios, y también la vida cotidiana de las gentes humildes y anónimas. • Los ensayos de crítica literaria ofrecen su visión subjetiva de la literatura española.
Con el novecentismo culmina un periodo de gran desarrollo del ensayo. Predominan los planteamientos reflexivos y el tono objetivo y desaparece la vehemencia y el subjetivismo. Tratan temas muy variados.
José Ortega y Gasset:
Es considerado el inspirador del grupo. Fundó diversas publicaciones como la “Revista de Occidente” que acoge las aportaciones artísticas y filosóficas más renovadoras. Escribíó sobre todo ensayos de tema filosófico. En sus reflexiones sobre España denuncia el aislamiento del país y se declara europeísta convencido. En cuanto a la estética, destacan La deshumanización del arte. Para Ortega el arte nuevo se caracteriza por ser original, minoritario, antirromántico y antirrealista.
Eugenio D’Ors
Influyó en la aceptación de las nuevas corrientes intelectuales y artísticas. Acuñó el término novecentismo y desde los diarios de Barcelona y más tarde desde los de Madrid, predicó la doctrina de la inteligencia. Con el seudónimo de Xenius publicó en catalán la novela
La Ben Platada. Como periodista, fue muy conocido por las Glosas, breves artículos que responden a la mentalidad educadora novecentista. Sus libros sobre arte reflejan tanto una sólida formación humanística como su pasión por lo clásico y lo moderno. La novela Los narradores novecentista abandonan la novela realista y experimentan nuevos caminos. Gabriel Miró se decantó por una novela sensual, Wenceslao inició la narrativa humorística y Ramón Pérez de Ayala y Benjamín Jamés crearon una novela intelectual.
Dámaso Alonso
Se dedicó tanto a la poesía como a la critica literaria. La poesía de Dámaso nace en la estética de la generación del 27. Su segunda etapa de tono existencial, culmina en Hijos de la ira. Desde entonces, se dedicó al ensayo. Otros autores del 27 también cultivaron el ensayo literario aunque con toques autobiográficos; Luis Cernuda con “Poesía y Literatura” , Rafael Alberti con “La arboleda perdida” o Gerardo Diego con “Antología del 27”. En las décadas posteriores a la Guerra Civil, algunos géneros específicamente literarios como novela y poesía asumieron el carácter didáctico del ensayo. En una época de gran auge los medios de comunicación, las relaciones entre literatura y periodismo son estrechas. Abundan los escritores que colaboran en la prensa. Entre los numerosos narradores que escriben artículos periodísticos se encuentran Juan José Millas, Antonio Muñon Molina, Manuel Vicent, Manuel Vázquez Montalban, etc. Quedan pocos autores que escriban ensayos en un sentido clásico. Entre ellos cabe citar Agustín García Calvo en el ultimo tercio del Siglo XX, de intención literaria y libertaria. Modernamente destacan Fernando Sabater, ensayista filosófico muy adaptable a la enseñanza en aulas con obras como “Ética para Amador” o “Filosofía para Amador”