LA GENERACIÓN DEL 27: CarácterÍSTICAS, AUTORES Y OBRAS REPRESENTATIVAS
En este período, considerado como parte de la denominada por José Carlos Mainer Edad de Plata de la literatura española (1902-1939), surgíó un grupo de jóvenes poetas vinculados a las vanguardias artísticas que, junto a otros intelectuales, participaron en el homenaje a Góngora celebrado en el Ateneo de Sevilla, en 1927. La nómina de estos escritores que constituyeron una generación literaria, la Generación del 27, está integrada por: Federico García Lorca (1898-1936), Rafael Alberti (1902-1999), Pedro Salinas (1891-1951), Vicente Aleixandre (1898-1984), Jorge Guillén (1893-1894), Dámaso Alonso (1898-1990), Gerardo Diego
81896-1987), Luis Cernuda 81902-1963), Emilio Prados (1899-1962), Manuel Altolaguirre (1905-1959). A este grupo tradicional tenemos que añadir a Ernestina de Champourcín (1905-1999), Concha Méndez (1898-1986) y Josefina de la Torre (1909-2002), entre otras poetas; la primera y la última de ellas fueron incorporadas por Gerardo Diego en su Antología. Representan la voz poética femenina.
Se destacan tres ETAPAS en la evolución de esta generación:
· Hasta 1928: La poesía pura.
Influencia de G. A. Bécquer; las primeras vanguardias: ultraísmo, creacionismo… Influencia de Juan Ramón Jiménez: búsqueda de la belleza absoluta, sin contaminar de circunstancias personales: deshumanizada. Esto les acerca a Góngora.
· Hasta 1936:
Poesía humanizada
Jorge Guillén y Pedro Salinas continúan con la poesía pura; los demás buscan una poesía humana y apasionada. Toman elementos del Surrealismo. Libros y poetas más significativos: Luis Cernuda: Los placeres prohibidos; Rafael Alberti: Sobre los ángeles; V. Aleixandre: Espadas como labios; F. G. Lorca: Poeta en Nueva York. En 1935 influirá Pablo Neruda con su revista Caballo verde para la poesía.
· Después de la Guerra Civil: Exilio y dispersión. F. G. Lorca, muerto. V. Aleixandre, D. Alonso y G. Diego se quedaron en España. Miguel Hernández (1910-1942), el epígono de esta generación por su vinculación a la estética neogongorina y surrealista, murió en la cárcel. En el exilio, Pedro Salinas, Jorge Guillén, Rafael Alberti, Luis Cernuda, Emilio Prados, Manuel Altolaguirre, E. Champourcin y J. De la Torre. Los más significativos temas de sus poesías giraron en torno a la nostalgia de España, de los amigos muertos, el desarraigo.
Las principales CarácterÍSTICAS de la Generación del 27 las podemos sintetizar de la siguiente manera:
1) Conocen la literatura y admiran a los clásicos. Algunos de ellos son profesores de Literatura:
Dámaso Alonso, Jorge Guillén, Pedro Salinas, Gerardo Diego, Luis Cernuda.
2) Suponen una síntesis entre tradición (literatura tradicional, tanto culta como popular) y renovación o vanguardia. De las vanguardias artísticas toman lo novedoso, lo original y provocador, el juego de ingenio y la ruptura humorística.
3) Equilibrio entre lo intelectual y lo sentimental, lo culto y lo popular
4) Papel central de la metáfora y la imagen: lenguaje muy elaborado que llevará a algunos poetas hacia el Surrealismo: Lorca, Alberti, Aleixandre.
5) Ideología: visión pesimista de la vida; están en contra de la represión ejercida por una sociedad alienante porque está construida por la razón que es dogmática y antivital. Defienden la vida, lo instintivo, espontáneo y natural. Les interesa lo nuevo, lo diferente, lo raro, lo inocente. Se hace patente la influencia de Freud y la noción del inconsciente.
Autores y obras más relevantes, en el ámbito de la poesía:
· Rafael Alberti: Su poesía se caracteriza por una gran variedad de temas, tonos y estilos. Podemos destacar, de su poesía neopopularista, sus primeros libros, Marinero en tierra (1924). De su etapa neogongorina y vanguardista: Cal y canto (1929). Poesía surrealista: Sobre los ángeles (1929). De su obra dramática podemos señalar El adefesio (1944).
· Vicente Aleixandre: Atendiendo a su visión del mundo, su obra se estructura en tres etapas. Poesía pura: Espadas como labios (1930-1931) y Sombra del paraíso (1939-1943). Poesía surrealista: Historia del corazón, escrito entre 1945 y 1953. Poesía antropocéntrica: Poemas de la consumación (1968). Fue miembro de la R.A.E. Y obtuvo en 1977 el Premio Nobel de Literatura.
· Dámaso Alonso: En él se aúna su labor crítico-docente con la investigadora y la creación poética. De esta última destacamos su libro
Hijos de la ira (1944).
· Manuel Altolaguirre: Su poesía está dotada de un gran intimismo. Destacamos Las islas invitadas (1926) y Poemas de América (1955).
· Luis Cernuda: Reuníó sus diversos libros bajo el título de La realidad y el deseo (versión definitiva en 1964).
· Gerardo Diego: Su obra poética sigue dos líneas simultáneas, la tradicional y la vanguardista (Manual de espumas y Fábula de Equis y Zeda).
· Jorge Guillén: Es, posiblemente, el máximo representante de la poesía pura, recogida en estos títulos que cada uno representa un ciclo poético: Cántico y Clamor, son la cara y la cruz de la realidad.
· Federico García Lorca: .Federico García Lorca. Fuentevaqueros (Granada), 1898)/ Viznar (Granada) 1936.
Biografía. Estudió Letras en Granada, pero abandonó la carrera
carrera; también música con Manuel de Falla. En 1919, se instala en Madrid, en la Residencia de Estudiantes; allí conoce a escritores y artistas como Dalí, Buñuel, Juan Ramón Jiménez… Pronto se convierte en el centro de la vida cultural del lugar. Durante el curso 29/30 obtiene una beca y viaja a Nueva York, experiencia que le marcará profundamente. Durante la República recorre España con la compañía La Barraca, representando autores del Siglo de Oro; su labor cultural se complementa como poeta, dramaturgo, conferenciante, director escénico… Su progresivo acercamiento al pueblo y su personalidad le atraen odios que motivan su fusilamiento por los nacionales durante la Guerra Civil.
Carácterísticas. El malestar y la frustración son contenidos presentes en toda su obra, y son simultáneos con las manifestaciones festivas, alegres y lúdicas. Es el destino trágico el tema que da unidad a toda su obra, tanto a la poética como a la dramática. En ella la inspiración y la técnica se funden a la perfección. Así pues, representa la fusión entre la tradición y la vanguardia, la lírica popular y culta. Su lenguaje poético utiliza las metáforas e imágenes sorprendentes y los símbolos, que confieren al poeta un estilo personal inconfundible. El Surrealismo influyó notablemente en Lorca y la fuerza expresiva y trágica con que lo emplea muestra su capacidad de adaptación poética.
Trayectoria poética. Sus principios poéticos se recogen en Libro de poemas (1921), con meditaciones neorrománticas e influencia modernista. Se pone de manifiesto una crisis juvenil y religiosa. Tras la etapa juvenil se inicia otra de plenitud que abarca toda su obra. No hay un verdadero proceso de evolución, sino una serie de exploraciones simultáneas en diferentes direcciones. Paralelamente crece su actividad como dramaturgo. En 1927 se publica Canciones, en él se aprecia una perfección formal que se pone de manifiesto en composiciones en línea andalucista y popularista con clara presencia de temas trágicos. Con frecuencia se sirve de la alternancia del estribillo para lograr una estructura cerrada. En él se observan saltos entre la poesía pura, el Vanguardismo, la brillantez y el puro juego. Entre otras destaca la Canción del jinete, que presenta a uno de tantos hombres malditos destinado a morir. El Poema del Cante Jondo (1931) lo había iniciado en 1921 expresa el propio dolor vital del poeta, en una perfecta fusión entre lo culto y lo popular; es el libro de la Andalucía del llanto . Supone un nexo entre Canciones y El Romancero gitano. Suites, de esta época, refleja sus inquietudes humanas y estéticas. Una de las creaciones más universales del poeta es el Romancero gitano (1928), escrito entre 1924 y 1927. Según Lorca: mi gitanismo es un tema literario y un libro. Nada más… El motivo ha de buscarse en la inclinación de Lorca por el perseguido y el marginado. Eleva el mundo de los gitanos a la altura de un mito moderno. El tema, de nuevo, es el destino trágico; los personajes son seres marginados que están abocados a la muerte.
En relación con esto Lorca afirmó: …Hay sólo un personaje real, que es la pena que se filtra. Es un fiel reflejo de del sentimiento trágico de la vida que siente Lorca. La mezcla de lo culto, lo popular y lo vanguardista alcanza aquí la máxima perfección. El choque violento que supone la estancia del poeta en Nueva York, su éxito y una crisis personal le conducen a Poeta en Nueva York (1929-30), se publica en 1940. El lenguaje desgarrador se utiliza como un grito de protesta contra la civilización industrial, inhumana y cruel. Está formado por dos partes: Poeta en Nueva York y Tierra y luna en ellas se recogen todos los poemas de tema neoyorquino, en los cuales se aborda el asunto del enfrentamiento entre la naturaleza pura y el hombre elemental, y la civilización de la máquina, que acaba por destruir a ambos: geometría y angustia. Otros temas que aparecen en el libro son: el poder del dinero, la esclavitud por la máquina, la injusticia social, la deshumanización… Una de sus partes está dedicada a los negros, que aparecen como una raza marginada, por lo que el acento social se incorpora a la obra. El Surrealismo en que se enmarca la obra es de tono bastante personal; utiliza el versículo amplio y la imagen alucinante, que le sirven para expresar el mundo ilógico y absurdo. Algunos poemas destacan como: La aurora, Oda al rey de Harlem, Oda a Walt Whitman y Grito hacia Roma. Llanto por Ignacio Sánchez Mejías (1935) es una elegía dedicada a la muerte del famoso torero, amigo del poeta. Andalucía, lo taurino y la meditación sobre la muerte se combinan en versos de distintos ritmos. Seis poemas galegos (1935) recrea la melancolía gallega utilizando esa lengua trata el tema de la lengua gallega y de su futuro. Diván de Tamarit (1935-36) refleja una clara influencia de la cultura arábigo-andaluza. Utiliza formas métricas árabes: 9 casidas, poemas de contenido amoroso y 12 gacelas, de carácter anacreóntico. Predominan los versos octosílabos y hexasílabos. El tema por excelencia es el amor, sujeto a experiencias dolorosas y trágicas. Sonetos del amor oscuro (1935-36) profundizan en la literatura clásica. En ellos el amor angustiado se mezcla con la idea del paso del tiempo y la muerte inminente. Los once sonetos que conocemos son de extraordinaria calidad y expresan la gloria y el dolor de amar
· Emilio Prados: Su poesía abarcó tanto el neopularismo andaluz como el Surrealismo. Destacamos los títulos Canción del farero (1926) y Memoria del olvido (1940).
· Pedro Salinas: Considerado el poeta del amor por excelencia, escribíó la trilogía amorosa formada por La voz a ti debida (1933), Razón de amor (1936) y Largo lamento