Poemas matemáticos románticos

1. El culto al «YO». Espíritu individualista (egocentrismo) y rebelión del individuo contra la norma.  2. El ansia de libertad. El afán de vivir sin normas le simpatiza con personajes al margen de la ley bandoleros, piratas…) y le lleva a protestar contra todo aquello que limita sus aspiraciones amorosas, sociales o políticas: a. En política: Se proclama el Liberalismo frente al absolutismo del s. XVIII. B. En la moral: La pasión y el instinto marcarán la conducta, y no la Religión o la Razón.  c. En los sentimientos: Emociones, angustia metafísica, pérdida de su fe en la razón, le llevan a un choque con la realidad y le sobreviene el desengaño.
3. El espíritu idealista: El ROMántico aspira a un mundo superior, e idealiza la Humanidad, la Patria y la Mujer. 4. Temas preferidos: – La intimidad del poeta.
El escritor exhibe sus sentimientos, afanes…Su subjetividad. – El amor. El amor se presenta como un sentimiento idealizado y divino que lleva a igualar a la amada con  Dios y como una fuerza apasionada que domina y destruye al hombre sometíéndolo a un destino trágico. – La naturaleza. El poeta proyecta sus sentimientos en ella, que se adapta a su estado de ánimo. Prefiere ambientes agrestes y lúgubres: ruinas,  castillos, bosques, mar embravecido, cementerios, noches tormentosas… – La evasión. El autor ROMántico huye de su espacio (países exóticos) y su tiempo (Edad Media y Romancero). – La exaltación de lo nacional y popular: Edad Media, Romancero, lo folklórico (costumbrismo).  

LA POESÍA ROMÁNTICA  
Si la prosa fue más adecuada para transmitir el pensamiento neoclásico, la lírica se convirtió en el Romanticismo en el modelo ideal para expresar todas emociones que siente el ser humano. Las fuentes inmediatas de esta poesía hay que buscarlas en los poetas ROMánticos europeos (Goethe y Lord Byron). Dentro del desarrollo de la poesía ROMántica podemos distinguir VARIAS ETAPAS: – El Prerromanticismo: sobresalen Alberto Lista y Blanco White (fuerte influencia en Espronceda, Larra)  – El Romanticismo histórico-nacional: Ángel de Saavedra, duque de Rivas. Su obra El moro expósito fue considerada el primer gran poema ROMántico español.  – La Romanticismo exaltado, cuyo principal representante es José de Espronceda.  – El Posromanticismo: busca un Romanticismo más auténtico e íntimo: G. Adolfo Bécquer y Rosalía de Castro.  
CarácterÍSTICAS DE LA LÍRICA ROMÁNTICA  
La poesía lírica adquiere los siguientes rasgos: – el lenguaje simbólico: capaz de reflejar el misterio, la melancolía, el desengaño – el subjetivismo: el poeta vierte sobre el verso sus sentimientos, sus emociones, sus vivencias ; desde la tristeza, la soledad, la angustia o el desengaño, hasta la rebeldía social y las ansias de libertad – una naturaleza y un paisaje acordes con su alma: lugares exóticos, cementerios, mar furioso, tormentas, ruinas – Temas: el amor apasionado e idealizado, y otros de carácter social, religioso, filosófico, histórico… – la polimetría. Combina estrofas diversas en un mismo poema: silva, octava real, redondilla, quintilla,  romance  
 Departamento de Lengua castellana y Literatura   
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JOSÉ DE ESPRONCEDA  
La vida de José de Espronceda (1808-1842) estuvo marcada por dos hechos: el ahorcamiento de Riego, héroe liberal, por el que fue hecho prisionero y su enamoramiento en Portugal de Teresa Mancha. Su vida impulsiva, su turbulencia sentimental, su desengaño ante el fracaso de las ilusiones, su temperamento, hacen de él un auténtico ROMántico y una de las figuras más representativas del Romanticismo español, junto a Larra.  Representa el Romanticismo liberal más exaltado por su vida anárquica.  En la poesía de Espronceda podemos distinguir TRES ETAPAS: – Neoclásica: Influencia de Lista. Poema narrativo Pelayo sobre el fin del reino visigodo y la invasión musulmana. – De transición: Evolución hacia el Romanticismo, con temas medievales, ambientaciones árabes. “Himno al sol”. – ROMántica: Con un sello más personal, camina hacia un Romanticismo más social. Pertenecen a este periodo: “Canción del pirata”, “El mendigo”, “El reo de muerte”, “A jarifa en una orgía”, etc. Y sus dos poemas narrativos más extensos, El estudiante de Salamanca y  El diablo mundo.   
EL ESTUDIANTE DE Salamanca Con unos dos mil versos polimétricos, narra las impiedades de Félix de Montemar, cuya amada, Elvira, abandonada por él, muere de pesar. Una noche se le aparece; la persigue por Salamanca; contempla su propio entierro y boda con el esqueleto de Elvira, y después muere sin contrición. Es el mejor poema narrativo del  XIX.  
EL DIABLO MUNDO Publicado en 1840, sin terminar, consta de más de ocho mil versos, y pretendía crear un ambicioso poema lírico, filosófico y social, una epopeya de la vida humana. Su mejor fragmento es el Canto a Teresa, evocación de su  gran amor. Constituye una de las más hermosas elegías de nuestra literatura.  
Gustavo Adolfo BÉCQUER  
Dos constantes dominan la breve vida del más excelso lírico español del Siglo XIX: la pobreza y el sufrimiento. Nacíó en Sevilla (1836); queda huérfano en su niñez y lo acogíó su madrina, Manuela Monahay, dama culta y sensible. Inició los estudios de NáÚtica, que abandonó; quiso ser pintor y por fin, encontró su vocación y se consagró a las letras. A los dieciocho años, en Madrid pasa increíbles penurias escribiendo artículos. A los veintiún años contrae la tuberculosis. Tras enamorarse de varias damas (Julia Espín, en el silencio; Elisa Guillén, le abandonó), se casa con Casta Esteban con la que tiene dos hijos. Su esposa le fue infiel y se separan. Bécquer lleva una vida bohemia, solitaria; pero, al final, se reconcilian y cuando logra cierto bienestar económico y sentimental muere a la edad de treinta y cuatro años (1870). Bécquer escribe en pleno auge del Realismo, pero su poesía nada tiene que ver con la poesía prosaica, al gusto burgués de la Restauración borbónica. Su carácter tímido y soñador va más con la poesía lírica ROMántica alemana, un lirismo intimista, que resalte el sentir profundo del poeta. La poesía de Bécquer, también de Rosalía, se caracteriza por la imaginación y el lirismo, la subjetividad (yo), el esteticismo y el sentimentalismo.  
OBRA Su inmensa importancia como lírico no debe hacernos olvidar que Bécquer fue un extraordinario prosista (Leyendas, veintiocho relatos, con rasgos ROMánticos: el amor imposible (El rayo de luna), lo misterioso y sobrenatural (Maese Pérez el organista, El Miserere) y Cartas desde mi celda,  crónicas escritas en el monasterio de Veruela)  
LAS RIMAS Son ochenta y cuatro poemas breves, asonantados en general, y polimétricos, en los que se basa la importancia de Bécquer en nuestra literatura. Fueron editadas en diversas revistas, después recopiladas por el autor en un libro (Libro de los gorriones) y, póstumamente, con el título de Rimas fueron publicadas en 1871 por un grupo de amigos. Sus composiciones de corta extensión se pueden dividir temáticamente en cuatro series:  
  a.
Poesía,  b. Amor,   c. Desengaño y fracaso          y       d. Desolación absoluta  
Si comparamos la poesía del primer Romanticismo (Espronceda) con esta poesía postromántica de Bécquer y Rosalía, observamos un proceso evolutivo dentro del espíritu ROMántico: frente al lenguaje sonoro y altisonante, aparece el lenguaje depurado y profundo; frente a la poesía externa, la poesía intimista y, por último, frente a la rima consonante, a los metros largos y a las estrofas cultas, la rima asonante, los metros cortos y las estrofas 

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