Poesía Social
Expresaba la angustia del individuo, dando paso a una postura más solidaria. El poeta debe tomar partido ante las desigualdades sociales y utilizar su poesía como instrumento para transformar la realidad. Los temas de España, la sociedad en la que viven, la injusticia social y la alienación de gran parte de la sociedad son tratados con un estilo coloquial, prosaico y directo. Predominan: Gabriel Celaya y José Hierro.
Blas de Otero
Empezó en la poesía desarraigada o existencial, tratando el tema de la angustia del hombre frente a la muerte en Ángel fieramente humano y Redoble de conciencia. Pido la paz y la palabra es, junto a Cantos iberos de Celaya, el comienzo de la poesía social.
El Grupo Poético de los Años 50
Los jóvenes poetas que comienzan a escribir en los años 50, cuya poesía marcará la década siguiente, se inician en la poesía social. Pero pronto sienten la necesidad de abarcar otros temas, entre los que destaca su experiencia personal de la vida: la amistad, el amor, la infancia. Reflexionan sobre lo cotidiano desde un punto de vista escéptico o irónico, con frecuencia inconformista. Utilizan el verso libre, pero se alejan del prosaísmo de la poesía social y su tono coloquial, que a veces aparece muy depurado. Predominan: Ángel González, Francisco Brines, Claudio Rodríguez y José Ángel Valente.
La Escuela de Barcelona
Se conoce con este nombre porque teorizaron sobre la literatura, y sus conclusiones tuvieron una gran influencia en la poesía del momento. Predominan: José Agustín Goytisolo, Carlos Barral, Alfonso Costafreda, Jaime Gil de Biedma.
Los Novísimos
Aportaron una nueva sensibilidad que unió la cultura tradicional a la cultura de masas en la que fueron educados (el cine, el cómic, la televisión, la música) y las referencias a escritores extranjeros o ciudades exóticas. Predomina: Leopoldo María Panero.
El Teatro del Exilio
Alejandro Casona (1902-1965) obtuvo el Premio Lope de Vega por La sirena varada en 1933, pero la obra más representativa de su teatro poético y simbólico, La dama del alba, se estrenó en Buenos Aires en 1944. También la mayor parte de la obra narrativa y teatral de Max Aub, con temática claramente política, la escribió en su exilio mexicano. En San Juan trata un tema actual: el drama de un barco que es retenido fuera de los puertos durante la II Guerra Mundial y a cuyos pasajeros, judíos que huyen de los nazis, se les prohíbe desembarcar.
El Teatro Humorístico
Se apoyaban en las posibilidades cómicas de la lengua (juegos de palabras, ruptura de la lógica, equívocos) y en situaciones inverosímiles, con un humor cercano al absurdo que muestra una visión triste de la realidad. La mayoría de estos autores hacen un teatro de circunstancias con una historia disparatada, llena de chistes. Jardiel Poncela aspira a lo inverosímil en sus obras, por lo que defiende las situaciones absurdas, con extraños personajes y diálogos humorísticos que reflejan, en el fondo, una amarga crítica a la sociedad. Predomina, con el teatro del absurdo, Miguel Mihura.
Antonio Buero Vallejo
Buero Vallejo es el dramaturgo que mejor refleja en su trayectoria las etapas del teatro español de la segunda mitad del siglo XX, dominada en gran parte por el teatro de inspiración histórica. Ese es el caso de Un soñador para un pueblo, protagonizada por el Marqués de Esquilache; o Las Meninas y El sueño de la razón, cuyos protagonistas (Velázquez y Goya) no eran ajenos a su primera vocación. También trató el tema de la mitología, la ceguera o la toma de conciencia y el mundo como prisión en La Fundación. En Historia de una escalera, la obra que le dio a conocer, la escalera de una casa será testigo mudo, junto a los espectadores, de la debilidad de las clases modestas para superar las duras condiciones de vida. Buero Vallejo transmite en ella la frustración de los personajes y de sus opciones, individual o colectiva, para salir de la mediocridad de su estado a lo largo de tres generaciones, y al final los hijos repetirán la historia de sus padres. En la obra aparece el protagonista colectivo común a la literatura social de la época.
Teatro Experimental en España
A finales de los 40, introducidas por los grupos de teatro independiente y universitario, entran en el teatro español esas nuevas técnicas que se experimentan en Europa. Uno de los pioneros fue Fernando Arrabal. Su trayectoria comienza con Pic-Nic y El triciclo. Ante el rechazo de la crítica y la censura, se exilió a París donde continuó con Fando y Lis y El cementerio de automóviles. Desde los años 60, Arrabal fue mundialmente reconocido como uno de los grandes dramaturgos del teatro del absurdo. En 1962 creó, junto a Topor y Jodorowsky, el movimiento Pánico: un teatro heredero del dadaísmo y el surrealismo cuyas obras se representan en todo el mundo.