La Novela Española Desde los Años 70 Hasta Nuestros Días
Tras la muerte de Franco en 1975, se inicia una época de transición y de cambios. Desde 1975 hasta hoy, la novela vive un periodo feliz. Aparecen más autores nuevos y se publican muchos más títulos que antes: los novelistas vuelven sus ojos a la tradición, recuperan muchos de los…
1. Características Generales
En los años setenta, prosigue la búsqueda de nuevas formas narrativas y alcanza insospechados extremos los deseos de experimentación. La presencia de lo imaginativo y de lo absurdo nos indica que seguimos lejos del realismo. Es una novela de estructuras en secuencias, con ruptura temporal y punto de vista múltiple; con la técnica del contrapunto; con monólogo interior y digresiones; de lenguaje culto y sintaxis compleja.
A partir de 1975, con la muerte de Franco, se abre un nuevo periodo para la narrativa. En unos pocos años, el frenesí renovador desembocó en un gran desconcierto.
Las novelas de esta época vuelven al relato tradicional y en la historia, predomina un sentimiento de desencanto, una visión irónica y distante de los problemas colectivos en beneficio de temas más personales o íntimos como la soledad, las relaciones personales, la realización como individuo, el amor, el erotismo; no se refleja la actualidad política, pero sí hay una gran influencia de los medios de comunicación de masas y una vuelta al estilo realista, de frase corta más fácil de leer.
Desde 1975 conviven cuatro generaciones de novelistas:
- La generación de 1936 con Camilo José Cela, Miguel Delibes, Gonzalo Torrente Ballester, Álvaro Cunqueiro y la incorporación de José Luis Sampedro.
- La generación del Medio Siglo con Juan Goytisolo, Juan Benet, Juan Marsé, Carmen Martín Gaite…
- La generación del 68 (novelistas nacidos entre 1937 y 1951) con Manuel Vázquez Montalbán, Eduardo Mendoza, Luis Mateo Díez, Juan José Millás, Luis Landero,…
- La nueva promoción de los 80 con jóvenes novelistas ya muy representativos como Antonio Muñoz Molina, Julio Llamazares, Arturo Pérez Reverte, Almudena Grandes,…
2. Las Tendencias Narrativas
La coexistencia de novelistas de varias generaciones y la plena libertad en que puede moverse la literatura española actual favorecen el cultivo de todas las tendencias novelísticas. No existe ahora una tendencia dominante. Comparten el panorama literario novelas muy diferentes en estilo, temas y calidad. Entre las más importantes están las siguientes:
A) Una manifestación de modernidad novelística es la metanovela, que consiste en incluir la narración misma como centro de atención del relato y reflexionar sobre la creación novelística.
B) Otra tendencia es la novela lírica, también llamada poemática por su parecido con el poema en prosa. Muy cercana a esta novela está el relato de aprendizaje. Son narraciones intimistas, neoexistenciales, que desarrollan el proceso de un individuo en formación, con su acceso a la experiencia. Destacan Julio Llamazares con La lluvia amarilla.
C) Se da el auge de la novela histórica con recreaciones verdaderas o invenciones fantásticas. Eduardo Mendoza recrea el primer tercio del siglo XX en Barcelona en La verdad sobre el caso Savolta.
D) La novela intimista vuelve a lo privado con el análisis psicológico de los personajes femeninos, como los de Rosa Montero en Te trataré como a una reina (1983), o propone historias amorosas como en El desorden de tu nombre, de Juan José Millas, o se puede recrear la infancia o juventud como en Malena es un nombre de tango (1994), de Almudena Grandes.
E) Se desarrolla también la novela policiaca, que potencia la intensificación de la intriga. Casi siempre está influida por la novela y el cine negro americano. Destacan Arturo Pérez Reverte con La tabla de Flandes.
F) Entre tanta libertad de formas y contenidos, el realismo ha contribuido notablemente a la recuperación del arte de contar. Las mejores manifestaciones del realismo son ahora más complejas y libres. Los autores más destacados de las distintas tendencias del realismo son:
- Las últimas obras de Miguel Delibes, Torrente Ballester, Fernández Santos, Martín Gaite…
- Luis Mateo Díez en La fuente de la edad (1986) trata el tema de la mediocridad de la vida provinciana durante la dictadura franquista.
- Aquí podemos incluir el grupo de escritores jóvenes conocidos a finales de los 90 como Generación X, que se caracteriza por ofrecer una visión desencantada de la vida, con protagonistas muy jóvenes y presencia de la violencia, como un modo de darle salsa a la vida, y jerga del mundo de la noche o las drogas. Los autores más conocidos son: Ray Loriga con Caídos del cielo (1995); Lucía Etxebarría con Amor, curiosidad, Prozac y dudas (1998); José Ángel Mañas con Historias del Kronen (1994)…
En la primera década del siglo XXI siguen las tendencias anteriores; si acaso se observa un auge del cuento, muy en consonancia con los nuevos y ajetreados tiempos. Uno de los mejores cultivadores del relato es Alberto Méndez, que en Los girasoles ciegos (2004) engarza cuatro historias de posguerra.
En los últimos años hay eclecticismo: se escriben memorias, autobiografías, cuentos, relatos, microrrelatos y, por supuesto, novelas de todas las tendencias. Si acaso, una tendencia destaca sobre todas: la histórica, tanto del pasado remoto como reciente. Destacan Arturo Pérez Reverte con Cabo Trafalgar (2004).
En resumen, la novela española actual se ha ocupado de los más diversos asuntos y ha cultivado todas las tendencias.
3. Novelistas
Eduardo Mendoza, Álvaro Pombo, Luis Mateo Díez, José María Merino (buscad información sobre ellos, corta y escueta), Javier Marías, Antonio Muñoz Molina, Almudena Grandes, Arturo Pérez Reverte… (ya han sido citados en otras tendencias narrativas).