Literatura Renacentista Española: Autores y Obras Clave del Siglo de Oro

La Celestina: Una Obra de Transición

Contexto y Autoría

La obra conocida como La Celestina pasó por dos ediciones principales:

  • 1499: Compuesta por 16 actos, titulada Comedia de Calisto y Melibea. En esta versión no se menciona al autor.
  • 1502: Ampliada a 21 actos, titulada Tragicomedia de Calisto y Melibea. Fernando de Rojas se declara autor de la obra mediante unos versos acrósticos. Afirma haberse encontrado el primer acto ya escrito y haber continuado la obra, finalizándola en 15 días de vacaciones. Además, menciona haber añadido cinco actos en la segunda edición a petición del público, que deseaba más escenas amorosas (Prólogo).

Durante mucho tiempo se dudó de la veracidad de las afirmaciones de Rojas. Sin embargo, tras un profundo análisis estilístico, se considera cierta su versión. El primer acto presenta un estilo breve, conciso y directo, mientras que los veinte restantes son más retóricos y cultos, lo que concuerda con el perfil de Fernando de Rojas.

Género Literario

La Celestina se inspira en la comedia humanista italiana, una obra dialogada escrita para ser leída, no representada. No obstante, en La Celestina también abunda el análisis psicológico de los personajes y lo sentimental, acercándola a la novela. Por lo tanto, se considera un género híbrido, que mezcla rasgos teatrales (diálogo) con novelísticos (sentimientos, psicología, cambios de espacio).

Intención Moral y Didactismo

En el prólogo, Fernando de Rojas afirma que su intención es prevenir a los «locos enamorados» que, vencidos por su apetito desordenado, adoran a su amada como a un dios. También pretende advertir contra los engaños de las alcahuetas y los malos sirvientes.

Sin embargo, la obra presenta rasgos que no son moralmente adecuados para la época:

  • Individualismo de los personajes: egoísmo y búsqueda del beneficio propio.
  • Visión pagana del mundo: hedonismo y ausencia de valores cristianos.
  • Visión trágica de la vida: relacionada con el azar y la fortuna.
  • Suicidio no condenado (Melibea).
  • Escenas amorosas y sensuales.

Estos rasgos reflejan la influencia renacentista y el pesimismo del siglo XV. El monólogo final de Pleberio, padre de Melibea, resume esta visión. La Celestina combina los tres grandes temas del momento: fortuna, amor y muerte. La fortuna mueve a los personajes a través de las pasiones y los conduce a la muerte.

Estilo

El lenguaje varía según los personajes:

  • Calisto, Melibea y sus padres: habla culta.
  • Criados y prostitutas: habla coloquial.
  • Celestina: adapta su lenguaje según el interlocutor.

Garcilaso de la Vega: Poesía Renacentista y Petrarquismo

Garcilaso de la Vega es el poeta más representativo del Renacimiento español e introductor del petrarquismo. Encarna el ideal del hombre renacentista: cortesano culto y sensible, y a la vez un valiente guerrero. Su obra, breve pero influyente, inicia una nueva sensibilidad intimista centrada en el análisis de los sentimientos del poeta.

Obra

La obra de Garcilaso, tan breve como su vida, se compone principalmente de sonetos (unos cuarenta) y tres églogas:

  • Égloga I: Considerada la más lograda. Los pastores Salicio y Nemoroso expresan sus quejas en una naturaleza bucólica. Salicio lamenta los desdenes de Galatea, mientras que Nemoroso llora la muerte de Elisa. Ambos pastores representan a Garcilaso, que canta a su amada en vida y tras su muerte. La composición refleja el tono emotivo, contenido y melancólico del Renacimiento.
  • Égloga II: Narra los amores desgraciados de Albanio y la pastora Camila. Es la más extensa, la primera que escribió y la menos brillante.
  • Égloga III: Cuatro ninfas tejen historias amorosas trágicas en un entorno natural idílico. Las tres primeras historias son mitológicas, y la cuarta trata de los amores entre Nemoroso y Elisa. La égloga termina con el canto de dos pastores.

El Amor y la Naturaleza

La poesía de Garcilaso gira en torno al amor y la naturaleza. El sentimiento amoroso, dichoso o desgraciado, es el centro de su lírica. Su poesía es intimista, y la naturaleza siempre acompaña a los personajes. Combina la moda petrarquista del tema amoroso con el sentimiento real del poeta, expresado de forma contenida y grave, «el dolor de sentir».

Garcilaso inaugura una nueva poesía castellana, especialmente en las églogas, donde la naturaleza adquiere tanta importancia como el diálogo entre los pastores. La extensión de la égloga permite al poeta describir los sentimientos y la naturaleza con detalle.

Estilo

La obra de Garcilaso crea el lenguaje poético renacentista, elegante y natural a la vez. Su estilo se caracteriza por un léxico refinado pero sencillo, abundantes epítetos y la musicalidad del endecasílabo. A partir de Garcilaso, el soneto se convierte en la estrofa fundamental de la poesía culta castellana hasta el siglo XX.

Fray Luis de León: Poesía, Estoicismo y Platonismo

Fray Luis de León (1527-1591) sintetiza en su poesía la cultura renacentista y el pensamiento cristiano. Aborda temas morales desde una perspectiva estoica: el deseo de virtud, la búsqueda de la paz espiritual y la alabanza de la vida sencilla.

La Poesía de Fray Luis de León

La mayor parte de su obra poética se compone de odas, cantos de alabanza escritos en liras, estrofa introducida por Garcilaso. También escribió prosa moralista. Sus temas reflejan la influencia clásica, de la que toma el estoicismo, el anhelo de virtud mediante el dominio de las pasiones, la búsqueda de lo espiritual y el elogio de la vida retirada.

Obra

En la obra poética de Fray Luis de León se funden el platonismo (Oda a Salinas, Noche estrellada) y el cristianismo. Presenta el mundo como un destierro doloroso, del cual el ser humano puede elevarse a las verdades eternas a través de la contemplación de la naturaleza y el arte. Fray Luis también compuso algún poema de tono épico. La naturaleza y el arte se acercan a la perfección emulando ese mundo ideal (platónico) o celestial (cristiano).

Estilo

La lengua de Fray Luis es natural y elegante. Su estilo es muy cuidado, como demuestran el uso de encabalgamientos, que marcan el ritmo de los poemas, y las aliteraciones. Todos los recursos se subordinan al significado de sus poemas.

San Juan de la Cruz: Mística y Poesía

Obra

San Juan de la Cruz es el máximo representante de la poesía mística, que expresa la experiencia del éxtasis místico (unión del alma con Dios) mediante símbolos. Describe tres vías para alcanzar el éxtasis:

  • Vía purgativa: Relacionada con la ascética, implica la purificación del alma.
  • Vía iluminativa: El alma, ya purificada, empieza a vislumbrar el camino hacia la unión con Dios.
  • Vía unitiva: Mística, representa la unión con Dios.

Su obra se divide en dos etapas:

  • Poesía a lo divino: Poesía amorosa tradicional con sentido religioso.
  • Poesía mística: Describe su experiencia personal de la unión con Dios.

Obras importantes:

  • Noche oscura del alma: Describe cómo el alma se une a Dios.

Estilo

Su lenguaje es emocional, expresivo e intenso, con abundantes exclamaciones, aliteraciones y enumeraciones. Para expresar lo inefable, recurre a contrastes y antítesis. Su estilo asimila influencias de la lírica tradicional, Garcilaso, Fray Luis y la Biblia.

Poesía Italianizante y la Influencia de Petrarca

La poesía italianizante, que toma como modelo a Petrarca, es la más representativa de la lírica culta renacentista. Garcilaso de la Vega es el poeta más relevante de esta corriente, renovando la forma y los temas.

Forma

  • El endecasílabo sustituye al octosílabo.
  • Se cultivan estrofas como el soneto, los tercetos encadenados y el endecasílabo combinado con el heptasílabo (silva y lira).

Temas

Los temas más representativos son el amor, la naturaleza y la mitología.

  • El amor petrarquista es platónico y ennoblece al enamorado, que se acerca a la perfección a través de la amada. Generalmente, se trata de un amor no correspondido que produce insatisfacción y melancolía. La lírica expresa esta mezcla de exaltación y tristeza, analizando minuciosamente los sentimientos del enamorado.
  • La naturaleza simboliza la perfección y la vida sencilla. Se presenta idealizada, como un escenario amable o como reflejo del estado de ánimo del poeta (bucolismo). La naturaleza cobra gran importancia en composiciones como las églogas.
  • Los temas mitológicos reflejan la admiración por la cultura grecolatina y dan un tono pagano. Las personas cultas de la época estaban familiarizadas con los personajes, historias y símbolos mitológicos.

En la segunda mitad del siglo XVI, la lírica incorpora temas religiosos y morales, con autores como Fray Luis de León, Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz. Al mismo tiempo, Fernando de Herrera inicia un estilo cultista y continúa los temas renacentistas (amor, naturaleza, mitología). Con la Contrarreforma y el aislamiento, la lírica pierde los ideales de universalidad y el entusiasmo pagano, fundiéndose con el catolicismo.

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