Literatura Medieval (Siglos V – XV)
La Edad Media, que abarca desde el siglo V hasta el siglo XV, se caracteriza por una sociedad estructurada en nobleza, clero y pueblo llano. La cultura es predominantemente religiosa y teocéntrica, donde Dios dirige el universo y el mundo es visto como un lugar de paso. Los monasterios juegan un papel crucial como depositarios de la herencia grecolatina y el pensamiento cristiano. A partir del siglo XV, surge una nueva alegría por vivir, dando paso al pensamiento renacentista.
Primeros Manifiestos Literarios
Las Glosas son anotaciones en los márgenes de libros cristianos, cuya función era aclarar el significado del texto. Las Jarchas y Cantigas son breves canciones de tema amoroso, donde una mujer expresa su lamento por la ausencia del amado, utilizando como confidentes a su madre, hermana o la naturaleza.
Mester de Juglaría (Siglos XI – XII)
Constituye la épica medieval, buscando ser una continuación de las grandes epopeyas grecolatinas. Se centra en las hazañas de héroes y es el origen de la novela. Sus características incluyen el anonimato, la transmisión oral por juglares, la métrica irregular y los temas épicos que ensalzan la figura del héroe.
Cantares de Gesta y Romances
Los Cantares de Gesta dan origen a los Romances, poemas formados por una serie indefinida de versos octosílabos con rima asonante en los versos pares. Se caracterizan por su concentración expresiva y emotividad. La obra más importante es el Poema de Mio Cid, que narra las peripecias de Rodrigo Díaz de Vivar. Es de carácter anónimo, métrica irregular, con versos de arte mayor agrupados en tiradas de distinta extensión y rima asonante. Se compone de tres cantares: Cantar del Destierro, Cantar de Bodas y Cantar de la Afrenta de Corpes. Los temas principales son la honra perdida y la lucha de la religiosidad en la Reconquista.
Mester de Clerecía
Se inicia en el siglo XIII. Sus características son: métrica regular, estrofas de cuatro versos alejandrinos que riman en consonante (cuaderna vía), y temática religiosa con intención didáctica y moralizadora, transmitiendo valores cristianos.
La Prosa Didáctica
- Alfonso X el Sabio (Siglo XIII): Gracias a su labor y la de la Escuela de Traductores de Toledo, se tradujeron al castellano obras científicas, filosóficas y literarias grecolatinas, árabes y judías.
- Don Juan Manuel (Siglo XIV): Cultivó la prosa docente y moralizadora. Su obra más conocida es El Conde Lucanor, un conjunto de cuentos de tradición oriental.
Prosa Novelesca
Durante el siglo XV, se popularizó la lectura de libros de caballería, narraciones fantásticas sobre caballeros impulsados por su afán de notoriedad y el amor a una dama. Las más importantes son Amadís de Gaula y Tirant lo Blanc.
El Teatro Medieval
Durante la Edad Media, el teatro estaba vinculado a las ceremonias litúrgicas y apenas se conservan textos (Auto de los Reyes Magos). Las representaciones teatrales tenían lugar en claustros o pórticos de iglesias. Poco a poco, se introdujeron elementos cómicos y profanos, trasladándose luego a plazas públicas. A finales del siglo XV, apareció La Celestina, obra literaria de difícil clasificación, escrita en forma dialogada pero no representada debido a su extensión. Sus características incluyen la intención moralizante (advertir sobre los peligros del amor loco, los vicios y la ambición del amor carnal) y la mezcla de lenguaje culto y popular, reflejando la convivencia de dos mundos distintos (noble y plebeyo).
Renacimiento (Finales del Siglo XV – 1598)
El Renacimiento comienza a finales del siglo XV (1492) con el descubrimiento de América y finaliza con la muerte de Felipe II (1598). Se caracteriza por la riqueza artística y el valor inestimable de obras y autores como Fray Luis de León, Garcilaso de la Vega y Miguel de Cervantes.
Sociedad y Cultura del Renacimiento
Movimiento artístico que nace en Italia y se extiende por Europa. El hombre ideal del Renacimiento es culto, refinado y diestro en el uso de armas, preocupado por la mejora social y económica del pueblo. La cultura evoluciona hacia el antropocentrismo, exaltando el poder de la naturaleza humana y rechazando normas no provenientes del hombre. Surge el Carpe Diem, el deseo de disfrutar la vida terrenal. El Humanismo refleja el interés por el estudio de escritores latinos y griegos, cuya imitación otorga prestigio a las obras. La naturaleza se convierte en fuente de inspiración.
Lírica Renacentista
Renovación Métrica: Las estrofas preferidas son tercetos, lira, octava real, estancia y soneto. El verso más empleado es el endecasílabo con el heptasílabo. Renovación Temática: Amor, mitología, naturaleza y sentimiento patriótico. Menos frecuentes son los temas religiosos, presentes en la poesía mística.
Narración Renacentista
Junto a los libros de caballería, surgen nuevos géneros narrativos:
- Novela Pastoril: Relatos donde pastores expresan sus sentimientos amorosos. La Galatea de Miguel de Cervantes.
- Novela Sentimental: Narra historias de amor contradictorias.
- Novela Picaresca: Narración de un personaje marginal que sirve a distintos amos, intentando ascender en una sociedad hostil. El protagonista es un antihéroe. Ejemplos: El Lazarillo de Tormes, El Buscón de Quevedo y Guzmán de Alfarache de Mateo Alemán.
El Quijote
Obra publicada en dos partes (1605 y 1615), inicialmente pensada como parodia de los libros de caballería, pero que se convirtió en una obra maestra reflejando el pensamiento, la cultura, las costumbres y el mundo artístico y social de los siglos XVI y XVII. Argumento: Hidalgo Alonso Quijano enloquece por leer libros de caballería y decide ser caballero andante, acompañado por Sancho Panza. Tras muchas desventuras, Don Quijote es llevado a casa, donde recupera la cordura y muere en paz. Características: Novelas cortas o intercaladas (El curioso impertinente, La historia del cautivo), crítica literaria (escrutinio de libros, análisis del teatro de la época), pequeños ensayos (discurso sobre las armas y las letras). La profundidad psicológica y la humanidad de los personajes dan a la novela su aspecto moderno.
El Teatro Renacentista
En el siglo XVI, aparecen nuevas formas teatrales que combinan temas religiosos medievales con ideas renacentistas.