Juan de Mena

Juan de Mena, nacido aproximadamente 12 o 13 años después que Íñigo López de Mendoza, provenía de una familia conversa de origen judío. Hombre de letras, se convirtió en secretario del rey y cronista, redactando cartas en latín. Vivió en la corte, dedicado a la escritura y alejado de las batallas. Falleció en Torrelaguna en 1456, posiblemente a causa de una coz de mula o por un dolor de costado.

Su obra más importante es Laberinto de Fortuna o Las Trescientas, llamada así por estar compuesta por 300 coplas de arte mayor. Su estilo culto, latinizante, con abundancia de hipérbaton y cultismos, la hacía una lectura compleja y carente de acción. Laberinto de Fortuna se centra en la diosa Fortuna, representada como una rueda dividida en tres partes: pasado, presente y futuro. Esta composición alegórica, de influencia italiana, convirtió a Juan de Mena en un gran autor. Posteriormente, también incursionó en la lírica y otros géneros.

Alfonso X El Sabio

Alfonso X reinó en Castilla entre 1252 y 1284, dejando una huella importante en la historia del reino. Nació en Toledo en 1221 y murió en Sevilla en 1284. También residió en Murcia, donde se dedicó a la escritura y gestó sus grandes obras. Su hijo Sancho IV se sublevó contra él, e incluso llegaron a luchar entre sí, hasta que Alfonso X lo maldijo.

Alfonso X fue un rey intelectual y promotor de la cultura. Buscaba universalizar el conocimiento, incluyendo a sus súbditos, y para ello empleó el romance en sus obras. Si bien las obras se publicaron bajo su nombre, él no las escribió directamente. Actuaba como director de equipos de sabios judíos, musulmanes y cristianos que se encargaban de la redacción.

Obras

Las obras atribuidas a Alfonso X, que no son estrictamente literarias y cuyos autores no se conocen con certeza, se clasifican en:

• Históricas: como la Estoria de España, escrita en romance, o la General Estoria, que, aunque incompleta, ha sido fundamental para reconstruir la época.
• Jurídicas: como el Setenario, una recopilación de leyes, o el Código de las Siete Partidas, que buscaba abarcar todos los ámbitos del derecho.
• Científicas: como el Libro del Saber de Astrología, que trataba sobre astronomía e incluía libros sobre el tiempo, los relojes y los astros, entre otros temas. También destaca el Lapidario, que abordaba las propiedades de las piedras, tanto científicas como mágicas.
• Entretenimiento: como el Libro de Ajedrez, Dados y Tablas o el Libro de los Juegos, que fue la última obra producida en el escritorio de Sevilla bajo la dirección de Alfonso X.

Juan Manuel

Juan Manuel, autor del siglo XIV, nació en Escalona en 1282 y murió en Córdoba en 1348, durante la época de la peste, aunque no a causa de ella. Dedicó su vida a la política y al gobierno, defendiendo su estado como su principal oficio. Después del rey, no había persona más noble que él. Estuvo involucrado en asuntos dinásticos y se casó tres veces. A los 12 años ya era capaz de comandar tropas, admirando en ese entonces a su tío, Alfonso X.

Juan Manuel fue el primer autor de la literatura española con consciencia de escritor y amor por la escritura. Depositó todas sus obras en el monasterio de Peñafiel para su conservación, pero un incendio las destruyó. Solo se conservan copias de algunas de ellas, como El Conde Lucanor, El Libro de los Estados, El Libro del Caballero y el Escudero, El Libro de las Armas, El Libro de la Caza o El Libro de los Castigos.

Su obra en prosa representa un avance en la narrativa, gracias a su estilo sencillo. Reflejaba sus sentimientos en sus escritos, como en el prólogo de El Conde Lucanor, donde expresa su preocupación por el estado y por los errores de sus copistas.

El Conde Lucanor

En el prólogo de El Conde Lucanor, Juan Manuel muestra su preocupación por la transmisión de sus obras, debido a los errores cometidos por los copistas.

Esta obra es un ejemplo de la prosa castellana y española. El Conde Lucanor es el libro más conocido de Juan Manuel y responde a su ideal de literatura como entretenimiento. Es un reflejo del autor, ya que la conducta del protagonista se relaciona con la época y el estado.

Está compuesto por 51 cuentos divididos en cinco partes. Las últimas cuatro partes tienen menor valor literario, ya que son colecciones de frases con un carácter didáctico. Estas partes fueron escritas por un colaborador llamado Jaime Xencar, con un estilo más oscuro y complejo.

Cada cuento tiene la misma estructura: el conde Lucanor plantea una pregunta a su consejero Patronio, quien responde con un cuento que ilustra la situación y ofrece una moraleja.

El Libro de la Caza trata sobre las aves de presa, su cuidado y alimentación, un tema común en la Edad Media. El Libro de las Armas recoge una especie de inventario de las armas de Juan Manuel, incluyendo un diálogo con su tío Sancho IV.