Literatura española: Autores y obras clave del Siglo de Oro

Félix Lope de Vega y Carpio

Félix Lope de Vega y Carpio fue un hombre muy vitalista y de grandes pasiones que condensó en su persona las inquietudes y contradicciones de su época. Su obra fue reflejo de su vida azarosa. Sus facetas más características fueron su enorme facilidad para escribir versos y su temperamento enamoradizo. Lope mencionó sus amores en sus versos, con nombres literarios.

La extensísima obra de Lope abarca todos los géneros, mostrando su gran capacidad creadora. Su lírica establece una estrecha relación entre su vida y su obra. Su estilo recorre las formas poéticas más populares a las más cultas, en forma de romances, letrillas, sonetos, odas, elegías, etc. Manifiesta una sensibilidad muy próxima al cancionero tradicional, bebió de las fuentes petrarquistas y participó de los juegos de artificio de la estética barroca.

Bajo el título de Rimas se agrupa gran parte de la producción poética de Lope. Contiene composiciones de métrica variada, en la línea de la poesía petrarquista y garcilasiana. Destacan los sonetos amorosos y los religiosos. El romance es una pieza fundamental en su lírica. Villancicos, redondillas y seguidillas completan su obra poética.

La novela picaresca: Mateo Alemán

Mateo Alemán ofrece una visión desilusionada de la vida. Publicó Guzmán de Alfarache en dos partes: la primera, en 1599; y la segunda, en 1604. Consiste en un extenso relato en forma autobiográfica, donde el pícaro Guzmán da cuenta de sus orígenes. Para salir del hambre y la miseria, se dedicaba al robo. Alterna la narración de sus desdichas con reflexiones de índole moral que se convierten en los blancos contra los que apunta la sátira amarga de este autor. La sobriedad, la atención al detalle, el realismo y la fuerza expresiva, fijan el modelo definitivo de la novela picaresca.

Características de la obra de Lope de Vega

  • El popularismo se advierte en la elección y el tratamiento de los temas en los que se inspira, el vitalismo de los personajes y en la concepción apasionada de la vida.
  • El lirismo se manifiesta en el ritmo y la musicalidad del verso, en la expresividad poética de la palabra, rica en emoción e imágenes. Pretendió usar un lenguaje apropiado a la situación y al personaje.
  • El dinamismo se percibe en la rapidez con que se desarrolla la acción.

Tirso de Molina

Tirso de Molina cultivó la prosa y el teatro. Destaca en el acertado retrato psicológico de los personajes, la calculada dosificación de la intriga, la comicidad de las situaciones, el tono burlesco, la riqueza expresiva del lenguaje y el gusto por la ironía y los juegos de palabras.

Sus obras se dividen en:

  • Dramas religiosos: La Santa Juana.
  • Dramas históricos: La prudencia en la mujer.
  • Comedias de carácter: Marta la piadosa.
  • Comedias de enredo: La villana de Vallecas.
  • Comedias mitológicas y autos sacramentales.

Su obra más famosa y universal es El burlador de Sevilla y convidado de piedra.

El mito de don Juan

Don Juan funde dos leyendas de origen popular: la del galán libertino, presente ya en el Romancero tradicional, y la del individuo que invita a cenar a un difunto. Don Juan simboliza la sexualidad desenfrenada, la llamada de la carne, el engaño y el sacrilegio.

Calderón de la Barca

Calderón de la Barca supo desarrollar al máximo las posibilidades contenidas en la comedia de Lope de Vega, hasta conducirlas a su plenitud. El lenguaje dramático de Lope resulta natural y espontáneo, mientras que el de Calderón es más elaborado y artístico. Calderón tiene una proyección mayor: es más aristocrático y más universal por los temas que trata.

En su obra se observa el sentido del orden, la estilización y la intensificación. El orden da claridad a la estructura de planteamiento, nudo y desenlace de los conflictos dramáticos, así como en la disposición piramidal y emparejamiento antitético de los personajes secundarios. También se aprecia la simplificación de la trama y la reducción del número de personajes. En el lenguaje y el estilo de Calderón, destacan la densidad de significados y el lujo ornamental característicos del conceptismo y del culteranismo.

Obras de Calderón de la Barca

  • Dramas de honor y celos: tratan sobre la tiranía de la opinión pública (de la que depende la honra).
  • Dramas de historia y leyendas españolas: escenifican un conflicto entre la sociedad civil y el estamento militar.
  • Dramas teológicos: La devoción de la Cruz.
  • Dramas filosóficos: tratan sobre las experiencias más radicales de la condición humana.
  • Comedias de costumbres: Casa con dos puertas.
  • Comedias mitológicas: La hija del aire.
  • Autos sacramentales: con mayor densidad teológica, un lenguaje alegórico de gran riqueza poética y una fastuosa escenografía. La cena del rey Baltasar.

Miguel de Cervantes (1547-1616)

Miguel de Cervantes renueva el arte de contar historias, creando un tipo de novela que tiende su mirada crítica sobre el complejo entramado de la realidad con el propósito de reflejarla y cambiarla. Critica el libro de caballerías en beneficio de un nuevo arte literario realista, cuya meta es narrar el vivir contemporáneo. Defiende la novela por una exigencia artística y moral, ingeniosa, verosímil e imitativa de la vida. La literatura de Cervantes es realista porque aparecen las claves del funcionamiento del mundo real.

Pensamiento de Cervantes

Tres son los factores clave en el pensamiento de Cervantes: el momento histórico del Imperio Español, la cultura de transición del Renacimiento al Barroco y la experiencia de vida del escritor. Ofrece una pluralidad de visiones, el problema de distinguir entre realidad y apariencia, cordura y locura. Los diálogos se convierten en el instrumento ideal para canalizar los discursos, y encierran un mensaje de matizado optimismo basado en la confianza en el ser humano.

La Galatea

La Galatea (1585) es una novela pastoril, representada por la serie de las Dianas de Montemayor y de Gil Polo. Se divide en seis libros y narra los amores de Elicio y Galatea. Trata sobre la naturaleza del amor y la poesía, puestos en boca de los pastores, de forma deslavazada e interrumpida de manera constante.

El Quijote

El Quijote es una parodia o imitación burlesca de los libros de caballerías. Desde el punto de vista del argumento, se divide en dos partes: la primera con 52 capítulos; la segunda con 74. Narra los últimos años de vida de Alonso Quijano, un hidalgo manchego que pierde el juicio de tanto leer libros de caballerías. Se convierte en caballero andante, se reviste de una vieja armadura, monta su caballo Rocinante y le propone a Sancho Panza ser su escudero. Él acepta. Aldonza Lorenzo, de la que había estado enamorado, es transformada en Dulcinea del Toboso.

Don Quijote y Sancho Panza

Don Quijote es una creación de otro personaje, Alonso Quijano. Vive retirado y aburrido entre las cuatro paredes de su casa, y se inventa que es un caballero andante para realizar su ideal de vida de acción. Don Quijote es un loco dentro del universo de la literatura caballeresca, pero manifiesta una gran lucidez mental, reflejo del pensamiento cervantino. Experimenta una evolución a lo largo de la novela: primero trata de acomodar la realidad a su imaginación, después cree que son sus propios sentidos los que le engañan e inducen a error.

Sancho Panza surge como el escudero, y les brinda la oportunidad de hablar, razonar, discutir y exteriorizar sus pensamientos. Le mueve la posibilidad de hacer fortuna, pero su noble corazón le va ligando al caballero cada vez más estrechamente. Deja de admirar su buen sentido, la paciencia infinita y la calidad de sus sentimientos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *