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La década de los 40 comienza con la publicación de La Familia de Pascual Duarte, de Cela, Nada, de Carmen Laforet y La Sombra del ciprés es alargada, de Miguel Delibes. Durante esta década las Obras se caracterizan por el tremendismo, ya que mostraban una visión Extremadamente sórdida de la realidad. Los protagonistas eran personajes Marginados que hacían uso de violencia y de un lenguaje duro y expresivo. Se Considera que los antecedentes de esta novela se encuentran en la picaresca. Uno De los autores más destacados es Camilo José Cela, autor de La familia de Pascual Duarte. El protagonista de Esta obra es Pascual Duarte, un campesino condenado a muerte por haber Asesinado a su madre, que escribe su historia para justificar su conducta. Este Personaje es el reflejo del hombre influido por el ambiente que lo rodea (el hombre es malo, el mundo es malo). Otra de sus novelas es La colmena, publicada en 1951 en Buenos Aires Tras ser censurada en España. Esta obra transcurre en torno al café de doña Rosa y en ella ofrece una visión panorámica y desoladora de las víctimas de la Guerra que intentan subsistir en la posguerra. El protagonista es colectivo: Unos 300 personajes pueblan la novela. Predominan los de clase media baja y una Burguésía venida a menos, con un futuro incierto en la miseria de la época. Además de ofrecer una visión crítica de la sociedad incluye novedades formales Como una ruptura cronológica narración objetiva, lenguaje espontáneo, uso de Ironía y la ausencia de un único argumento. Dentro de su obra destacan también Los libros de viajes como Viaje a la Alcarria o Del Miño al Bidasoa Y entre sus últimas novelas Mazurca para dos muertos o Madera de Boj.
Carmen Laforet es la autora más Destacada de esta década gracias a su obra Nada. Este relato en primera Persona de la protagonista, la joven Andrea, comienza con su llegada a Barcelona para estudiar filosofía. Allí se alojará en casa de unos familiares En la calle Aribau y encontrará dos mundos opuestos: el cerrado y lúgubre de Aquella casa y sus habitantes; y el de la universidad, exterior, abierto, Liberador y juvenil. La obra tiene un tinte existencialista y cierto carácter Autobiográfico. Es sin duda una novela pesimista.
Miguel Delibes destaca por el tratamiento de los ambientes rurales Y las pequeñas ciudades en sus obras. En ellas defiende que el hombre del campo Mantiene mejor los valores (el hombre es Bueno el mundo es bueno). Su primera obra es La sombra del ciprés es Alargada, cuyo tema principal es la muerte. El protagonista, Pedro, Experimenta la temprana muerte de un compañero y esto le hace refugiarse en la Soledad. Cinco horas con Mario es una novela experimental. En ella Carmen, viuda de Mario, vela el cadáver de su marido durante cinco horas en las Que los recuerdos llegan a su mente mientras establece un desordenado monólogo Del que se deducen las posturas opuestas de este matrimonio. Es una crítica a La sociedad del momento. Otras de sus obras son El camino (Realismo Social), Mi idolatrado hijo Sisí (crítica a la vida urbana), Las Ratas (estilo sobrio y dureza de la vida en el rural), Señora de rojo Sobre fondo gris (homenaje a su mujer) y El hereje (ambientada en el siglo XVI).

La década de los 50 Se caracteriza por el Realismo social en sus dos vertientes: el Realismo Objetivista y el Realismo crítico. En el Realismo objetivista el narrador se Limita a plasmar escenas, personajes y sucesos sin dar opinión. Algunas de sus Carácterísticas son la narración de tiempos simultáneos y el predominio del Diálogo. El Jarama, de Sánchez Ferlosio es un ejemplo de esta tendencia. Esta obra relata lo que ocurre a unos jóvenes de clase modesta en una excursión Al río Jarama. Por otro lado, en el Realismo crítico el narrador muestra su Opinión sobre las injusticias sociales, hay una intención de crítica social más Explícita. Los temas tratados son la vida en el campo, en el mar, la ciudad o La Guerra Civil. Los autores más destacados de esta década son Ana María Matute Con Los Abel o Olvidado rey Gudú, Ignacio Aldecoa con El Fulgor y la sangre y Carmen Martín Gaite con Entre visillos, Retahílas O Caperucita en Manhattan.

 En la década de los sesenta se desarrolla por Completo la novela experimental, una novela rompedora y uso del “tú” reflexivo Y monólogo interior. Algunos autores de esta década son Torrente Ballester con La Saga/fuga de J.B, Juan Benet con Volverás a Regíón, Juan Marsé con Últimas Tardes con Teresa y Canciones en el Lolita’s Club y Goytisolo con Señas De identidad y Duelo en el paraíso.

El autor más destacado de esta década es Martín Santos con su obra Tiempos de silencio. La trama es El fracaso de un joven investigador, Pedro, que se ve envuelto en un aborto Ilegal que causa la muerte de la hija del hombre que le suministraba ratas para Sus experimentos de laboratorio. Tras salir bien parado de la investigación Policial decide abandonar su trabajo y retirarse a la práctica de la medicina Rural. Entre las técnicas que emplea el autor en esta obra se encuentran la Ironía, los desajustes entre realidad y ficción, abundancia de elementos Metafóricos, diálogos, monólogos y riqueza del lenguaje.