La Novela Española de Posguerra (1939-1974): Evolución y Tendencias

La Novela Española de Posguerra (1939-1974)

La Narrativa de la Posguerra (1939-1975)

La narrativa de la posguerra abarca un período que se extiende desde 1939 hasta 1975, año en el que termina el régimen franquista y se instala la democracia. Entre los aspectos comunes a los escritores de esta época se encuentran:

  • El exilio de muchos novelistas pertenecientes a la generación de la posguerra.
  • La tremenda censura de algunas novelas.
  • La presencia del tema de la Guerra Civil y la posguerra.
  • La búsqueda de modelos en las literaturas americana, francesa o italiana, o en la tradición realista española.

Esta novela rompe con la tradición narrativa anterior, desapareciendo así la novela del período republicano y el experimentalismo de la novela deshumanizada, y quedando solo el realismo de Pío Baroja como modelo para algunos.

Evolución de la Novela Española de Posguerra

La Novela del Exilio

Los autores que abandonan España tras la Guerra Civil abandonan la novela intelectualizada y vuelven a los temas éticos y humanos. En sus obras hablaron de la experiencia de la guerra y la nostalgia de la patria.

Autores destacados:

  • Francisco Ayala con La cabeza del cordero y Muertes de perro.
  • Max Aub con El laberinto mágico y La calle Valverde.
  • Arturo Barea con su trilogía autobiográfica La forja de un rebelde.
  • Rosa Chacel que destaca por la profundidad psicológica de sus personajes en obras como Teresa.
  • Ramón J. Sender con Los cinco libros de Ariadna, Crónica de alba y Réquiem por un campesino español.

La Novela Inmediata de Posguerra (1940-1950)

Estéticamente, se volverá a un mediocre realismo y ciertas novelas adoptarán el tremendismo. En estos años existen tres tendencias:

  • La novela nacionalista: Dividía el mundo entre vencedores y vencidos, plasmando así la visión ideológica de los falangistas. Destaca La fiel infantería de Rafael García Serrano.
  • El realismo tradicional: Cuyo tema tradicional era la vida de la burguesía siguiendo el modelo de novela-río: Mariona Rebull de Ignacio Agustí.
  • La novela existencial: La tendencia más importante cuya técnica y temática vienen determinadas por las condiciones de la Guerra Civil y la posguerra. Sus autores son jóvenes escritores que intentan hacer algo distinto.

Características de la novela existencial:

  • Los temas son la incertidumbre de los distintos humanos y la dificultad de comunicación.
  • Los personajes suelen ser seres marginados, oprimidos o en situaciones límite.
  • Reducción espacial y temporal.
  • Predominio del narrador en primera persona, posibilitando el monólogo.
  • Un lenguaje duro y a veces coloquial.

Obras destacadas:

  • La familia de Pascual Duarte de Camilo José Cela.
  • Nada de Carmen Laforet.

El Realismo Social (1950-1960)

Fruto de los cambios de mentalidad con el comienzo de la industrialización, la novela va a reflejar la sociedad española de ese momento, con su falta de libertad, su desigualdad social y su miseria. Son escritores jóvenes, contrarios al régimen de Franco, que reconocen en La colmena de Camilo José Cela su origen.

Hay dos corrientes:

  • El objetivismo o neorrealismo: El escritor, con una clara influencia del cine, se limita a representar la realidad con obras como Los bravos de Jesús Fernández Santos y El Jarama de Rafael Sánchez Ferlosio.
  • El realismo crítico: Explica la realidad y denuncia las injusticias que marginan a grupos sociales: Central eléctrica de Jesús López Pacheco y La mina de Armando López Salinas.

Características del realismo social:

  • Temas: soledad del ser humano y repercusiones de la Guerra Civil.
  • Narrador testigo en tercera persona.
  • Linealidad narrativa.
  • Protagonistas individuales representantes de una clase social.
  • Condensación espacial y temporal.
  • Predominio del diálogo.
  • Empleo del lenguaje claro y sencillo con coloquialismos.

Otras obras destacadas:

  • El viento solano de Ignacio Aldecoa.
  • La piqueta de Antonio Ferres.
  • Nuevas amistades de Juan García Hortelano.

La Novela Experimental de los Sesenta (1960-1974)

El desgaste de la novela social dio paso a la novela experimental, volviendo de nuevo a la imaginación y al tema existencial. Este cambio se inicia con Tiempo de silencio de Luis Martín-Santos. En su desarrollo inciden:

  • La influencia directa de los renovadores extranjeros como Marcel Proust, que aceptan innovaciones temáticas y estilísticas.
  • El éxito de la novela hispanoamericana (Boom) con obras como La ciudad y los perros de Mario Vargas Llosa.
  • El poder de las editoriales.

Características de la novela experimental:

  • La trama narrativa pierde importancia.
  • Los personajes sufren profundas transformaciones.
  • El espacio tiende a reducirse.
  • Predomina el desorden cronológico.
  • Dificultad estructural con frecuencia sin desenlace.
  • Punto de vista múltiple.
  • Diálogo poco habitual.
  • Renovación del lenguaje literario (cultismos y extranjerismos).
  • Metaliteratura o metanovela.
  • Importancia de lo visual.

Obras destacadas:

  • Tiempo de silencio de Luis Martín-Santos.
  • Señas de identidad de Juan Goytisolo.
  • Cinco horas con Mario de Miguel Delibes.

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