La Casa de los Espíritus: Un Viaje a Través del Posboom Literario

A mediados de 1970, la novela hispanoamericana experimentó cambios significativos, desplazándose del auge del boom de los 60, marcado por expectativas revolucionarias, hacia el posboom, una época de desilusión y reflexión sobre dictaduras, violencia y exilio. En este contexto, autores del boom como Vargas Llosa y García Márquez adoptaron un estilo más accesible, con tramas más sencillas, como en La tía Julia y el escribidor y Crónica de una muerte anunciada, respectivamente. Estas obras, aunque recurren a modelos de literatura y cultura popular, los transgreden mediante el humor (ironía, parodia, distorsión grotesca), marcando una transición hacia la «novísima novela».

Muchas de las características de la narrativa latinoamericana posterior a 1975 se encuentran en La casa de los espíritus (LCDLE) de Isabel Allende. Aunque la narración tiene una estructura circular con retrospectivas y anticipaciones, LCDLE sigue un esquema cronológico lineal, centrado en la historia de la familia Trueba del Valle a lo largo de cuatro generaciones. Se distancia de la literatura innovadora del boom y se acerca al melodrama, con el amor clandestino de Blanca y Pedro Tercero, el matrimonio de conveniencia de Blanca y el conde Jean Santigny, y las violaciones de Pancha García por Esteban Trueba.

La acción se desarrolla en la hacienda «Las Tres Marías» y en «La casa de la esquina», que representa la libertad y la modernidad frente al mundo rural, donde prevalecen las tradiciones y las diferencias de clase. El amor es un tema central, presentado como motor de cambio. A diferencia de los escritores del boom, donde el lenguaje es protagonista, en La casa de los espíritus la prosa es fluida y natural, con un lenguaje más coloquial y sencillo, lo que la hace más accesible al lector. La crítica literaria la considera la novela más popular del posboom, una novela social con fuerte presencia femenina, donde la trama, narrada con sencillez, juega un papel importante, justificando su gran aceptación.

Análisis de los Protagonistas

La casa de los espíritus es la primera novela de Isabel Allende, escrita tras su exilio en 1973, después del golpe militar contra su tío, Salvador Allende. La novela narra la saga de una poderosa familia de terratenientes latinoamericanos. El patriarca, Esteban Trueba, construye un imperio que se tambalea con el tiempo y un entorno social explosivo. La decadencia del patriarca arrastra a los Trueba a una dolorosa desintegración. Los personajes encarnan las tensiones sociales y espirituales de una época, reflejando el destino colectivo de América Latina, marcado por el mestizaje, las injusticias sociales y la búsqueda de identidad.

Algunos nombres de los personajes tienen significados simbólicos, como Clara, que significa clarividente. Los nombres femeninos indican algo sobre el personaje, mientras que los masculinos sirven para enumerar el linaje. Los personajes principales son:

• Clara Trueba del Valle: Personaje principal, clarividente, practica la telequinesis y mantiene unida a la familia.
• Esteban Trueba: Personaje masculino principal, que sobrevive desde el inicio hasta el epílogo. Su vida cambia tras la muerte de Rosa, y se convierte en un hombre autoritario y violento.

Al final de su vida, Esteban Trueba desarrolla una relación cercana con su nieta Alba, y su cólera disminuye. Muere en sus brazos.

Aspectos Sociales y Políticos en la Obra de Allende

La casa de los espíritus se sitúa en el contexto de la literatura hispanoamericana, influenciada por la época en que fue escrita. La novela refleja una Latinoamérica sacudida por un pasado confuso y un presente de cambios políticos y económicos: guerrillas, enfrentamientos de clases, dictaduras y lucha por las libertades. Los abusos de poder de Esteban Trueba y la violación de Pancha García desencadenan una serie de circunstancias trágicas que marcan el destino de los personajes.

El universo femenino de la novela es notable. Las mujeres de Allende, aunque educadas y soñadoras, están entregadas a las tareas del hogar. La sociedad machista de la época conlleva una falta de compromiso ideológico en las mujeres, quienes se entregan a la ideología de sus amantes por motivos amorosos.

Durante las décadas de 1960 y 1970, las revueltas estudiantiles de París (1968) y los asesinatos del Che Guevara (1967) y Salvador Allende (1973), junto con el golpe de Pinochet, tuvieron profundos efectos sociales, políticos y culturales en Latinoamérica. La casa de los espíritus muestra diferentes generaciones con sus cambios políticos, sociales e ideológicos, ya que la historia se desarrolla a lo largo de casi un siglo (siglo XX). La novela es considerada la más popular del posboom, una novela social con fuerte presencia femenina, donde la trama, narrada con sencillez, juega un papel importante.

El Realismo Mágico en La Casa de los Espíritus

La crítica discrepa sobre si La casa de los espíritus es una novela característica del realismo mágico, comparándola con Cien años de soledad de García Márquez. Sin embargo, la obra contiene rasgos propios de esta corriente:

• Combinación de lo natural y lo sobrenatural: Predicciones de Clara, prácticas espiritistas, desplazamientos de objetos y apariciones fantasmales.
• Aspectos misteriosos e irracionales en la vida cotidiana: Costumbres, premoniciones, supersticiones y elementos mitológicos.
• Presencia de elementos fantásticos e insólitos: Los personajes perciben lo extraño con normalidad.
• Pluralidad de narradores: Narraciones en tercera y primera persona, y estilo directo libre.
• Distorsión del tiempo: Percepción cíclica del tiempo, con anticipaciones y retrospectivas.

A diferencia del intelectualismo del boom, en LCDLE se apela a las emociones del lector. La muerte es una prolongación de la vida, y los muertos y los vivos conviven. Los escenarios son más realistas que en la novela del boom. Los aspectos mágicos se circunscriben a personajes femeninos y al ámbito familiar. La casa de los espíritus es considerada la novela más popular del posboom, una novela social con fuerte presencia femenina, donde la trama, narrada con sencillez, desempeña un papel importante, justificando su gran aceptación.