Ensayo
En el ensayo predomina el carácter intelectual de los escritores novecentistas, pues su marcada tendencia a la reflexión y la abundancia
entre ellos de críticos, filósofos,…, hacen que el género del ensayo, por su carácter flexible y divulgativo, sea una de sus formas de expresión
favoritas. Destacan autores como Ortega y Gasset, Eugenio D’Ors y Manuel Azaña.
José Ortega y Gasset: Destaco enseguida en España de tal forma que se convirtió en la figura intelectual a seguir durante varios
lustros. Tiene como objetivo modernizar a España y escribíó numerosos ensayos entre los que destacan: La rebelión de las masas y La
deshumanización de las artes en el que da a entender que el nuevo arte se dirige hacia los que lo pueden entender aunque sean una minoría.
Eugenio D’Ors:
autor catalán que defiende la vuelta a un arte pleno de equilibrio, armónía y clasicismo, así como el rigor en la creación
autor catalán que defiende la vuelta a un arte pleno de equilibrio, armónía y clasicismo, así como el rigor en la creación
artística con un estilo elegante y una aptitud vital optimista (Glosari). Fue también crítico de arte (Lo Barroco).Manuel Azaña: fue un destacado intelectual y político (llegó a presidente del nuevo Gobierno republicano (1931-1933) y presidente de la
República entre 1936 y 1939). De complejo carácter, gran seguridad y profunda cultura escribíó ensayos sobre Juan Valera, Ángel Ganivet, El
Quijote…etc. Como novelista compuso dos narraciones y durante la Guerra Civil escribíó una obra dialogada La velada de Benicarló.
Novela
La diversidad novelística durante la época es notable. Escriben autores con tendencias estilísticas anteriores, escritores ya consagrados
como Baroja y Unamuno. Aun así, una intención renovadora en la órbita novecentista se da en novela lírica de Gabriel Miró, en la novela
intelectual de Ramón Pérez de Ayala y en la novela vanguardista de Ramón Gómez de la Serna.
Gabriel Miró: es un ejemplo de escritor puro y sensible con un lenguaje lleno de valores poéticos. Pueden distinguirse dos etapas en su
producción. En la primera esta todavía presente la influencia modernista y en su segunda etapa, Miró encuentra su estilo personal en una
prosa elaboradísima, con múltiples descripciones de ambientes y sensaciones como en El obispo leproso. Son también notables sus libros de
relatos breves: El humo dormido, El libro de Sigüenza y Años y lenguas.
Ramón Pérez de Ayala: además de numerosos artículos periodísticos, escribíó poesía, ensayo y novela, aunque destaca como novelista.
Sus primeras obras están próximas al Realismo galdosiano. Sin embargo, en sus obras siguientes (Belarmino y Apolonio) son novelas más
simbólicas, intelectuales en las que predomina el componente reflexivo, la ironía y el humor, todo con un lenguaje cuidado.
Ramón Gómez de La Serna: fue el pionero de la introducción de las vanguardias en España. Lo más carácterístico de este autor son las
llamadas greguerías, imágenes lírico-humorísticas que, de modo ingenioso, establecen relaciones insólitas entre dos objetos o conceptos. Las
greguerías son muy diversas y hay que vincularlas a la libertad imaginativa de las vanguardias. Como dramaturgo y ensayista su producción
es enorme pero, aun así, donde destaca es en la novela, con obras como Cinelandia. Estas novelas suelen desarrollarse en ambientes urbanos
con acción muy leve (sustituida por greguerías rasgos de humor e ingenio) y el erotismo es un tema muy frecuente.
Poesía
Los poetas novecentistas siguiendo unas u otras vías, tienen la tendencia general se la superación modernista y la búsqueda de nuevos
cauces expresivos en la poesía de la segunda década de Siglo XX. Es notable la reacción antimodernista del Vanguardismo y el intelectualismo
novecentista.
Juan Ramón Jiménez: es considerado guía y maestro de la mayoría de los jóvenes poetas de los años 20 y padre de la poesía
novecentista. Juan Ramón Jiménez escribirá también prosa aunque la frontera entre verso y prosa no son del todo nítidas, su obra se puede
dividir en tres subgéneros: poesía en verso, prosa lírica y la portica. En la poesía en verso tiene una primera etapa sensitiva (hasta 1915),
entre las que destaca Arias Tristes (1903), posteriormente presenta una etapa intelectual (1916-1936), de poesía pura, en la cual se despoja
de lo sensorial, de lo anecdótico. Así abre la poesía española a la tendencia vanguardista: verso libre, poemas en prosa, enumeraciones
caóticas, palabras y frases en inglés, uso del collage…etc. Supone una nueva concepción poética en un sentido más profundo, surge la poesía
pura o desnuda. De esta etapa son obras como el Diario de un poeta recién casado. Finalmente en su última etapa (de exilio) muestra un
anhelo de perfección, de belleza, de eternidad que le lleva a una poesía casi mística como en La estación total. En su prosa lírica hay que
destacar su o conocida obra Platero y yo (1914). En la que están presentes rasgos modernistas como el ansia de belleza, el medio rural y la
actitud afable. Por último en cuanto a la poética de Juan Ramón Jiménez son los múltiples textos que escribo sobre reflexión teórica, muy
valioso para comprender su concepción de la poesía y su evolución literaria e ideológica.
Teatro
Destaca principalmente en el teatro Ramón de Valle-Inclán. Es autor de una obra extensa y variada, y es famoso por su etapa de los
esperpentos. Se caracteriza por ofrecer una visión deformada y grotesca de la sociedad, con un tono de farsa y una intención satírica. Su
obra cumbre en esta etapa es Luces de Bohemia.