Orígenes y Formación del Gallego
El gallego, originado del gallegoportugués, se desarrolló al norte y sur del río Miño, en territorios de la corona del Reino de León. Constituye el extremo occidental del continuum lingüístico románico del antiguo Imperio Romano occidental.
En su vertiente oriental, las hablas gallegas se extienden por Asturias, León y Zamora, integrándose con las variedades asturleonesas (variedades gallegas con rasgos asturianos).
Límites Meridionales y Relación con el Portugués
La frontera política con Portugal, marcada por el río Miño desde la separación de Portugal del reino de León en el siglo XII, ha dificultado la comunicación entre las variantes portuguesas del norte y las gallegas del sur. Sin embargo, existe un continuum lingüístico norte-sur. Las variedades a ambos lados del Miño muestran un alto grado de relación, compartiendo una etapa medieval de formación. La unidad lingüística entre el sur de Galicia y el norte de Portugal persiste hasta hoy.
Época Prerromana y la Influencia Celta
En la época de la conquista romana, la Gallaecia estaba poblada por diversas tribus, destacando los gallaeci, de origen céltico indoeuropeo. Estos pueblos se mantuvieron al margen de las principales culturas mediterráneas.
La región presentaba una cierta unidad cultural, conocida como la “cultura de los castros” (del latín CASTRUM, ‘campamento’). Esta cultura se caracterizaba por un hábitat específico: concentraciones de cabañas circulares en lugares altos y estratégicos, rodeados de murallas.
Alrededor del 800 a. C. (y posteriormente en el 400 a. C.) se produjo una colonización céltica, estableciéndose junto al mar, entre Finisterre y La Coruña.
Se han atribuido al sustrato celta algunas evoluciones lingüísticas, como:
- La evolución del grupo latino /kt/ a /it/ o /ʧ/ (NOCTE > noite, FACTU > feito).
Otras influencias del sustrato, compartidas con otros romances septentrionales, incluyen:
- La palatalización de los grupos latinos iniciales PL-, CL- y FL- (resultando en /ʧ/ en gallegoportugués): CLAVE > chave, FLAMA > chama.
Características del Latín en la Zona y la Romanización
La Gallaecia fue la última región hispánica conquistada por Roma. El latín que se extendió por Galicia fue latín hispánico y, además, dialectalizado. Su situación geográfica lateral intensificó su conservadurismo.
- La romanización fue lenta y difícil.
- El bilingüismo perduró más tiempo en esta zona.
- El dominio romano se basó más en pactos y alianzas que en la destrucción de las tribus.
Los romanos llegaron a Ampurias en el 218 a. C., y a finales del siglo II a. C., toda la Península, excepto el Norte, estaba sometida. Augusto sometió a las tribus del Noroeste (gallaeci y lucenses), junto con astures y cántabros, en las guerras del 29 al 19 a. C.
El latín en Galicia ya era latín hispánico y dialectalizado. Según Harri Meier, el latín hispánico se fragmentó en dos zonas:
- Una corriente de latinización desde la Tarraconense, más abierta a la innovación, que dio origen a los romances orientales (catalán, aragonés, y en parte, navarro, riojano y castellano).
- Otra corriente desde la Bética, más conservadora, que se expandió por el oeste peninsular, dando lugar a los romances occidentales (gallego, portugués). Estos romances conservan el grupo -MB- (lombo, frente al cast. lomo y cat. llom) y los diptongos decrecientes (FACTU > feito, frente al cast. hecho y cat. fet; AURU > ouro, frente al cast. oro y cat. or).
El conservadurismo del gallego se debe a:
- La influencia del latín bético.
- Su situación geográfica periférica y aislada.
La organización administrativa de Augusto (Bética, Lusitania y Tarraconense) y la posterior cohesión lingüística y cultural de la Gallaecica y la Asturica en el 216 d.C. contribuyeron a la particularidad del gallego.
Edad Media: Influencias Germánicas y la Invasión Musulmana
A principios del siglo V, los pueblos germánicos (vándalos y suevos) llegaron al noroeste peninsular. Los suevos formaron un reino hasta el 585, cuando fueron conquistados por los visigodos. Las influencias lingüísticas germánicas fueron limitadas, pero contribuyeron al aislamiento del latín hispánico.
La invasión musulmana rompió la historia lingüística peninsular. Galicia, sin embargo, se liberó pronto de los musulmanes (siglo VIII). El árabe fue una lengua de adstrato, no de superestrato. Arabismos comunes en gallego y otros romances incluyen: aceite, arroz, alfombra, mandil, alcalde.
En el siglo XI, Galicia y Portugal pertenecían a la Corona de León. La Reconquista propició el encuentro entre las variedades galaicoportuguesas del norte y el romance del sur.
El descubrimiento de la tumba de Santiago (791-842) atrajo peregrinos, generando una importante influencia cultural y lingüística.
El Surgimiento del Romance: El Gallegoportugués
El gallegoportugués es la fase medieval del romance del noroeste peninsular, derivado del latín vulgar de la zona. Fue llevado al sur con la Reconquista portuguesa. De este romance derivan el gallego y el portugués modernos. Galicia y Portugal mantuvieron una unidad lingüística durante la Edad Media, con rasgos arcaizantes.
Los Siglos Oscuros (Siglos XV-XVIII)
Este período se caracteriza por la decadencia y el desprestigio del gallego, relegado por el castellano debido a factores políticos, sociales y culturales.
Hechos importantes:
- Galicia pasa a formar parte del reino de Castilla en el siglo XIII, quedando aislada de los centros de poder.
- Portugal se fortalece.
Situación Lingüística
Se establece una situación de diglosia:
- Diglosia (Charles Ferguson): dos lenguas con diferente estatus en la misma comunidad.
- Introducción temprana del castellano (siglo XIV), impulsado por Alfonso X.
- El parentesco entre gallego y castellano facilitó la castellanización del gallego.
El gallego:
- Competía en desventaja con el castellano.
- Se fue castellanizando.
- Se alejó del portugués.
- Esto condicionó la creación del estándar gallego posterior.
La introducción del castellano fue gradual, afianzándose primero en las clases altas y luego en las medias y urbanas. El gallego quedó reducido a variedades orales rurales y de clases bajas urbanas.
El Siglo XVI y la Consolidación del Castellano
La documentación escrita en gallego es casi inexistente. El retroceso también se produce en el ámbito oral. Mientras, el portugués se consolida como lengua de cultura y se expande.
El gallego se considera una variedad vulgar. Hay ejemplos de descalificación en la literatura del Siglo de Oro. Los portugueses lo consideran arcaico y provinciano. Esto genera un sentimiento de inferioridad en los hablantes de gallego.
El Siglo XVIII y las Primeras Defensas del Gallego
La imprenta difunde el estándar castellano. La escolarización es exclusivamente en castellano. La emigración gallega despuebla zonas rurales, reductos del gallego.
A pesar de la situación crítica, surgen las primeras voces en defensa de la lengua:
- Fray Martín Sarmiento, benedictino del Bierzo, cultivó la poesía y escribió obras en defensa del gallego.
El Rexurdimento (El Resurgimiento)
Este movimiento de despertar nacional se enmarca en el romanticismo y postromanticismo, que revalorizaron lo vernáculo y la cultura popular. Movimientos similares ocurrieron en Cataluña, País Vasco, etc.
La burguesía gallega y la pequeña nobleza buscan una identidad propia, reflexionando sobre la cultura y la lengua gallegas como entidades diferenciadas.
El Rexurdimento se desarrolló en dos líneas:
- Actividad literaria: convertir el gallego en lengua culta.
- Actividad filológica y lingüística: codificar la lengua y rescatar la tradición medieval gallegoportuguesa.
Frente Literario
Escritores intentan elevar el gallego a lengua literaria:
- Primera generación (precursores): Francisco Añón, Manuel Murguía, Xoan Manuel Pintos (A gaita gallega).
- Segunda generación: Rosalía de Castro (Cantares gallegos, Follas novas), Eduardo Pondal, Curros Enríquez.
El redescubrimiento de la literatura medieval gallegoportuguesa (publicación de los cancioneiros entre 1875 y 1904) reveló una rica tradición ignorada.
A finales del siglo XIX, el uso literario del gallego era limitado. El castellano seguía siendo la única lengua de enseñanza y el prestigio social del gallego no había aumentado significativamente.
El Siglo XX y la Normalización del Gallego
En 1905 se funda la Real Academia Gallega, con el objetivo de redactar un diccionario y una gramática normativa, y crear un estándar lingüístico.
Los movimientos nacionalistas gallegos cobran fuerza:
- Manifiesto de Antonio Villar Ponte: Nacionalismo gallego. Nuestra afirmación regional.
- Hirmandá de Amigos da Cruña en La Coruña.
- Revista A nosa terra.
- Revista Nos (1920-1936).
Con la Segunda República, el Estatuto de Autonomía (artículo cuarto) establece la oficialidad del gallego y el castellano. Por primera vez, el gallego tiene reconocimiento legal.
La Dictadura y la Recuperación Posterior
La dictadura anuló los avances, desapareciendo editoriales, revistas e instituciones. El español se convirtió en lengua exclusiva.
Sin embargo, lo conseguido permaneció latente. El galleguismo se exilió, principalmente a Argentina, donde se avanzó en la normalización. La editorial Galaxia se creó en 1950. En 1971 se crea una sección de estudios filológicos en la Universidad de Santiago, vinculada al Instituto da Lengua Galega. La revista Verba se publica desde 1974. Se realiza el Atlas lingüístico de Galicia.