Gustavo Adolfo Bécquer: Vida, Obra Poética y Legado Romántico

Primeros años e influencias

Orígenes familiares y orfandad

Gustavo Adolfo Domínguez Bécquer nació en Sevilla el 17 de febrero de 1836. Era hijo del pintor José María Domínguez Bécquer, conocido en el mundo del arte como José María Bécquer. Bécquer quedó huérfano, pero se vio compensado con el cariño que recibió por parte del resto de su familia, especialmente por el de su madrina Manuela Monnehay Moreno, con la cual se marchó a vivir al cerrar el centro donde estudiaba (San Telmo). Bécquer también se vio consolado por la constante actividad, ya fuera en la pintura, la escritura o la música.

Influencias artísticas: Pintura y Música

Ya se ha comentado cómo Gustavo Adolfo estuvo en contacto permanente con el mundo de la pintura, gracias al número de pintores que había en su familia (su tío, su padre y su hermano). Esta cualidad innata para el mundo de la ilustración tendría su repercusión en el lenguaje becqueriano de las leyendas y algunos artículos periodísticos dedicados a la crítica de arte.

Otra de las destrezas becquerianas fue la música. Como muchos otros escritores, Bécquer reveló un profundo conocimiento de las producciones musicales burguesas por excelencia, como son la ópera y la zarzuela. La música estaría presente una y otra vez en las leyendas y en las Rimas.

Formación literaria

A la pintura y a la música habrá que añadirle la huella indeleble que le dejaría la literatura durante su juventud. El acceso que tuvo a la biblioteca de su madrina Manuela le proporcionó un conocimiento detallado de los artistas más relevantes del siglo anterior y del Romanticismo europeo.

Por otro lado, una de las figuras claves en el proceso de aprendizaje literario del joven poeta fue Alberto Lista, prestigioso representante de las letras sevillanas. Bécquer entró en contacto con el maestro a través de su obra Ensayos literarios y críticos y de su discípulo, Francisco Rodríguez Zapata. Con solo doce años de edad, Bécquer compuso la Oda dedicada a la muerte de Alberto Lista, en la cual siguió los preceptos clasicistas que este le enseñó.

Traslado a Madrid y carrera literaria

Primeros años en Madrid

En 1854 se instaló en Madrid. Los primeros tiempos fueron difíciles, ya que era una época de revueltas políticas donde las letras y el arte no eran una gran fuente de ingresos, por lo cual los poemas del sevillano no despertaban mucho interés para los editores. La llegada de su hermano un año más tarde alivió su penuria económica y su soledad.

Colaboraciones periodísticas y dificultades

Intentó ganar dinero con obras de teatro, pero los resultados no fueron los más felices. De esa época es también el proyecto del periódico El Mundo, que fracasó. Después ingresó en El Porvenir, pero este nunca le dio lo acordado y Bécquer y sus amigos lo abandonaron.

Vida personal y últimos años

Salud y estancia en Veruela

En 1861 acudió al monasterio de Veruela (Zaragoza) para reponerse física y moralmente, ya que había roto con su pareja y padecía una enfermedad que parece ser la sífilis.

Matrimonio y vida familiar

Más tarde se casaría con Casta Esteban; aunque su círculo más cercano sostuvo que fue un gran error. Durante los últimos 10 años de su vida, el periodismo se convirtió en su actividad fundamental. Colaboró con El Contemporáneo (de 1860 a 1868), donde publicó Cartas desde mi celda (originalmente publicado como serie, incluyendo las *Cartas literarias a una mujer*).

Últimos trabajos y El libro de los gorriones

En 1865 ocupó el cargo de fiscal de novelas; en cuanto a sus empleos, este fue el mejor pagado. Lo desempeñó hasta 1868, año en que la revolución de Septiembre desterró a Luis González Bravo, el ministro protector del poeta. Ese mismo año rompió con Casta, su mujer.

Retirado en Toledo tras la ruptura y perder el empleo como censor, el poeta escribió en un libro rayado para el comercio los poemas que pudo reconstruir de memoria. El título que le puso Bécquer fue: El libro de los gorriones: colección de argumentos, ideas y planes de cosas diferentes que se concluirán o no según sople el viento.

Muerte

Su hermano Valeriano, con quien vivía desde la ruptura con su mujer, murió en 1870. Casta volvió al hogar, pero Gustavo Adolfo no sobreviviría a la muerte de su hermano más de tres meses. Murió el 22 de diciembre de 1870.

Las Rimas: Publicación y legado

Publicación póstuma

Una vez muerto Bécquer, sus amigos reprodujeron las Rimas partiendo de otros manuscritos y no incluyeron, por error o voluntariamente, 3 poemas: el 44, el 48 y el 55.

Recepción y valoración

Rimas de Bécquer es el conjunto de poemas de este escritor sevillano del Romanticismo tardío español que, reunido con este título, fue publicado después de su muerte. Fue elogiada por Antonio Machado, admirada por Alberti y Lorca, y homenajeada por Rubén Darío y Juan Ramón Jiménez. Manuel Altolaguirre consideró la poesía de Bécquer como la más humana del Romanticismo español.

Estructura y temas de las Rimas

Diego y Díaz dividen las Rimas en 4 series que tienen los temas siguientes:

  • La poesía (rimas I a XI)
  • El amor (rimas XII a XXIX)
  • El desengaño (rimas XXX a LI)
  • El dolor y la angustia (rimas LII a LXXVI)

Las Rimas se perciben como el relato lírico de una vivencia amorosa, precedido de una poética no formalizada y en verso.

Estilo y trascendencia de Bécquer

Características de su poesía

Estamos ante un poeta sencillo. Bécquer no hace un gran uso de la poesía popular; como ya dijo Cossío, hay mucho dramatismo, mucho ardor meridional, mucho cante jondo en las Rimas.

Relación con Rosalía de Castro y precursores del siglo XX

Es interesante relacionar los paralelismos de Bécquer con la poesía de Rosalía de Castro; la poesía de ambos coincide en ser intimista y en intentar nuevas formas de expresión poética, orientándose además hacia innovaciones métricas. Por este motivo se ha considerado a ambos como precursores de los poetas del siglo XX.

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