Federico García Lorca: Tradición y Vanguardia en su Obra Poética

Federico García Lorca: Fusión de Tradición y Vanguardia

La obra de Federico García Lorca se caracteriza por un radical compromiso entre la tradición y la vanguardia. Su poesía hunde sus raíces en la tradición, pero a la vez incorpora novedades técnicas y libertades formales. Lorca es uno de los poetas más representativos del Grupo del 27, y su obra presenta corrientes aparentemente opuestas: una vertiente culta y popular con influencias vanguardistas, y una vertiente más culta, influenciada por el modernismo de Rubén Darío y la visión poética de los poetas romántico-simbolistas. Además, asimila el simbolismo y la renovación métrica, así como la influencia de la poesía clásica culta española, con sus metáforas elaboradas, sonetos y la asimilación del nuevo romancero. En su obra, se observa una coherente fusión de la poesía popular y la innovación vanguardista, demostrando un profundo conocimiento de las fuentes tradicionales, la métrica de arte menor, rimas asonantes, estribillos, romances, villancicos y coplas.

En su vertiente vanguardista, Lorca adopta técnicas de Ramón Gómez de la Serna, el vértigo de la imagen moderna y la exigencia formal de la poesía pura. Su estilo varía con los diferentes momentos de su poesía, desde el neopopularismo hasta el surrealismo. Lorca maneja metáforas muy arriesgadas que relacionan elementos opuestos de la realidad y efectos sensoriales entremezclados. En cuanto a la métrica, combina la inspiración neopopularista, cultivando el verso de arte menor, con la tradición más culta, utilizando versos de arte mayor, alejandrinos o endecasílabos, en serventesios de inspiración modernista o sonetos.

Etapas de la Obra de Lorca

La obra de Lorca se puede dividir en dos etapas: una de juventud y otra de plenitud.

Primera Etapa: Juventud

En esta etapa, se observan rasgos modernistas y romántico-simbolistas, con influencias de Rubén Darío, Machado y Juan Ramón Jiménez, así como rasgos neogongorinos y vanguardistas. Destaca su fuerte sabor popular, su neotradicionalismo, el uso del romance, la estilización de las formas tradicionales y populares en cuanto al uso de estrofas y el tratamiento de los temas, inspirados en la canción popular y el flamenco.

  • Libro de poemas: Influencia de Bécquer y del modernismo. Evoca con nostalgia el paraíso perdido de la infancia y aparecen motivos lorquianos como la muerte, la frustración amorosa, la rebeldía y el simbolismo de la luna.
  • Primeras Canciones y Canciones: Combinan poesía pura y vanguardista con poesía popular. Son breves poemas asonantes, llenos de humor y ternura, donde persiste la nostalgia de la niñez y su pureza, junto al sentido trágico del destino.
  • Poema del Cante Jondo: Aborda la Andalucía del llanto, expresando su propio dolor de vivir a través de los cantes hondos de su tierra. Es una obra neopopularista, con una reelaboración culta o vanguardista de lo popular andaluz.
  • Romancero Gitano: Canta a la raza gitana, marginada y perseguida, elevándola a mito moderno, símbolo de la rebeldía frente a la opresiva sociedad burguesa. Los gitanos, abocados a la frustración o la muerte, encarnan el destino trágico. Según Lorca, hay un solo personaje real, que es «la pena que se filtra». El Romancero Gitano es un ejemplo de fusión de lo culto y lo vanguardista con lo popular, compuesto por 18 romances.

Segunda Etapa: Plenitud

En esta etapa, la poesía de Lorca se vuelve más universal, hermética y difícil. Deja paso a técnicas surrealistas y crea formas poéticas con versos libres, versículos y ritmos alejados de la regularidad métrica, sin estrofas, con estructuras anafóricas y paralelísticas.

  • Poeta en Nueva York: Obra de transición fruto de una crisis personal, escrita durante su estancia en EE. UU. en la época del crack del 29. La temática abarca el sufrimiento amoroso y la ciudad de Nueva York, que impactó violentamente a Lorca. Se encuentra el poder del dinero, la injusticia social, la deshumanización, la destrucción de la naturaleza, el sometimiento del humano a las máquinas, la soledad, la muerte y el amor homosexual. En los negros, Lorca ve lo más espiritual y delicado de aquel mundo, inocentes y rebeldes frente a la sociedad burguesa, como los gitanos en el Romancero Gitano. La temática social y el dolor del poeta sintonizan con el de las otras personas que sufren. Sus poemas son gritos de dolor y de protesta contra las injusticias, expresados mediante técnicas surrealistas.
  • Diván del Tamarit: El título hace referencia a un paraje de la vega granadina, la huerta de Tamarit. Es un libro de poemas íntimos y doloridos, con una atmósfera que recuerda a la antigua poesía arábigo-andaluza, pero con lenguaje surrealista. El tema central es el amor atormentado y la muerte, dos vivencias inseparables que se funden con las pulsiones carnales de carácter sexual.
  • Seis poemas galegos: Fruto de su amor por Galicia, la tradición, las cantigas medievales y Rosalía de Castro.
  • Llanto por Ignacio Sánchez Mejías: Elegía de incontenible dolor y emoción en homenaje al torero sevillano. Mezcla lo lírico con lo épico, con una meditación sobre la muerte. Se observa la influencia del planto medieval e imágenes surrealistas de vanguardia. La obra se divide en cuatro momentos, cada uno con esquemas rítmicos diferentes.
  • Sonetos del amor oscuro: El amor oscuro simboliza la parte más escondida del alma humana, como la pena negra, el amor negado y vedado por la sociedad. Son 11 sonetos con influencias de Shakespeare y de los poetas barrocos españoles.

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