Explorando los Textos: Tipos, Características y Evolución Poética

El Texto: Unidad y Propósito Comunicativo

El texto es la unidad máxima de la lengua, que expresa un propósito determinado en una situación comunicativa concreta. Su rasgo fundamental es la capacidad para construir un producto lingüístico unitario. Podemos definir al texto como:

  • Una unidad lingüística oral o escrita.
  • De sentido completo, donde todas sus ideas están relacionadas semántica (coherencia) y sintácticamente (cohesión).
  • Responde a una intención comunicativa concreta (adecuación).

Características Esenciales del Texto

El texto debe ser coherente, cohesionado y adecuado al tipo de lector. La información debe avanzar de manera progresiva y aportar una conclusión final.

  • Coherencia: El texto debe centrarse en un mismo tema, y la información ha de guardar una relación lógica.
  • Cohesión: Las ideas deben conectarse entre sí, y articularse mediante procedimientos lingüísticos que garanticen su unidad.
  • Adecuación: El texto debe ser adecuado a la situación comunicativa, al receptor al que va dirigido y a su intención. Debe emplear un lenguaje comprensible para este lector, y ajustado al contexto en el que se emite.
  • Progresividad de la información: La información debe avanzar gradualmente, apoyada en la información conocida que ya se ha ofrecido. Los datos, las observaciones, etc., se sustentan los unos en los otros, de modo que el texto progresa sobre un discurso lógico.
  • Intención comunicativa: El objetivo del texto condiciona las estrategias y la forma que adopta este.

Tipos de Textos

Textos Expositivos

Tienen como finalidad transmitir información objetiva de forma clara y ordenada. La exposición puede ser divulgativa o especializada, según el público. Predomina la función representativa del lenguaje; por ello, se emplea un estilo preciso, claro y objetivo, y el texto se acompaña, generalmente, de imágenes, ilustraciones, gráficos…

Rasgos Lingüísticos Frecuentes:

  • Vocabulario preciso y específico que se adapta al tema tratado y al público al que va dirigido.
  • Verbos en 3ª persona del singular y el modo indicativo refleja una tendencia a la impersonalización e imprime al texto un carácter objetivo.
  • Las construcciones sintácticas son sencillas y, los períodos oracionales, breves, facilitando así la claridad del texto.
  • Uso de ejemplificaciones y las reformulaciones para facilitar la comprensión de las ideas.

Textos Dialogados

Consisten en el intercambio alternado de información entre dos o más interlocutores. Uno de los rasgos más habituales del diálogo es la espontaneidad y la improvisación. En forma oral, se caracteriza por un estilo ágil, estructuras sintácticas cortas y un léxico sencillo en el que abundan los dícticos, los vocativos, interrogaciones y exclamaciones.

Textos Argumentativos

Tienen como finalidad defender una opinión, hecho, idea o valor, y convencer al lector para que adopte un determinado punto de vista. Para ello, el autor aporta razones o pruebas que apoyan y defienden su postura, planteamiento o tesis.

Estructura del Texto Argumentativo:

La estructura de un texto argumentativo puede adoptar diversas formas, pero, habitualmente, consta de una tesis, un cuerpo argumentativo y una conclusión.

  • Tesis: Es la idea que se pretende demostrar o defender. Se suele presentar al comienzo de este tipo discursivo, pero también puede ir al final.
  • Argumentación o cuerpo argumentativo: Es el conjunto de datos, pruebas, ejemplos y razonamientos lógicos que el emisor emplea para la defensa de la tesis. Los argumentos pueden ser de distintos tipos: de autoridad, de analogía…
  • Conclusión: Es un resumen final que corrobora la idea defendida.

Rasgos Gramaticales:

  • Uso de conectores para la progresión lógica de los razonamientos.
  • Empleo de la modalidad enunciativa para la exposición de datos.
  • Tendencia al vocabulario técnico, referido al tema que se trata.

Textos Descriptivos

Presentan los rasgos más característicos de una persona, objeto, paisaje… Técnicas descriptivas que pueden organizarse en dos grupos:

  • Adjetivación: Ausencia de acción, en contraposición a la narración, hace de la descripción una secuencia nominal que tienen una gran relevancia los sustantivos y, sobre todo, los adjetivos. Podemos encontrarla en enumeraciones.
  • Recursos literarios: La descripción también puede conseguirse mediante el lenguaje figurado. El uso de determinadas figuras, como la metáfora, hipérbole, es una herramienta muy eficaz para resaltar las cualidades de una persona o un objeto.

Tipos de Descripción y sus Rasgos:

  • Científica: Predomina la objetividad; sigue un orden lógico; emplea un vocabulario específico; se usan adjetivos descriptivos y denotativos; es poco propensa al uso del lenguaje figurado.
  • Literaria: Predomina la subjetividad; no se sigue un orden lógico porque depende del estilo de cada autor; predomina la función estética y se emplea un lenguaje literario; se utilizan adjetivos connotativos cargados de significación; se emplean recursos como la comparación.

Textos Narrativos

Se caracterizan por la sucesión de acontecimientos. Relatan unos hechos, reales o ficticios, que les ocurren a unos personajes en un tiempo y lugar determinados. El elemento más importante es la acción, y todos los aspectos que tengan que ver con ella: personajes, estructura… La acción se relaciona con las coordenadas espacio-temporales. Adquiere un gran valor el uso de los verbos.

Los personajes se dividen en protagonistas y secundarios, y en planos o redondos. El relato de la acción condiciona un tipo de estructura narrativa que suele dividirse en tres partes:

  • Introducción: Se presenta un conflicto que afecta a unos personajes.
  • Nudo: Se desarrollan los acontecimientos.
  • Desenlace: Se resuelve el conflicto de la fase inicial.

El punto de vista desde el que se cuenta el relato determina el tipo de narrador. Puede contar los hechos desde fuera, en posesión de toda la información: narrador omnisciente. Si el narrador participa en los acontecimientos puede ser protagonista o testigo.

Textos Periodísticos

Tienen como objetivo primordial ofrecer información objetiva u opiniones sobre temas de actualidad, acompañados de imágenes y fotos. Su difusión natural son los medios de comunicación, prensa, radio, etc. Poseen características propias que los distinguen de otras tipologías. Debemos diferenciar dos subgrupos que presentan entre sí importantes diferencias: los textos informativos y los textos de opinión.

Textos Informativos

La finalidad de estos textos es informar, de manera clara, sobre un hecho de actualidad. La objetividad y la claridad son los rasgos más característicos de los textos informativos, y condicionan a los demás:

  • Léxico de nivel medio: El vocabulario se ajusta al público amplio al que se dirige, aunque abundan los términos técnicos. Los textos informativos son una fuente de neologismos y barbarismos.
  • Sintaxis sencilla: Los textos informativos se decantan por una sintaxis sencilla, en la que prevalecen las oraciones cortas y enunciativas y se evita la subordinación.
  • Estilo impersonal: Prevalece la exposición y en el que se eliminan los marcadores personales. Se emplean verbos en 3ra persona, se evitan adjetivos y expresiones valorativas, etc.
  • Estructura piramidal invertida: La información aparece por orden de mayor a menor importancia.

Los subgéneros informativos más importantes son la noticia y la entrevista, que reproduce una conversación entre un periodista y un personaje de interés. La crónica es un género mixto, que añade valoraciones personales a una información.

La estructura de una noticia suele constar de un título, que resume el contenido del texto, un subtítulo que resalta algún aspecto destacable, el lead o entradilla en el que se sintetiza la información esencial y un cuerpo de noticia para desarrollar el relato de los hechos.

Textos de Opinión

Además de informar, los medios de comunicación tienen como objetivo estimular el debate. Los textos informativos y los de opinión tratan temas similares y se difunden en los mismos medios. Sin embargo, la opinión se caracteriza por la subjetividad y el cuidado formal.

Características:
  • Subjetividad: En los textos de opinión prevalecen las valoraciones personales. Encontramos las marcas gramaticales de esta subjetividad en los verbos de primera y 2º persona, la adjetivación, etc.
  • Argumentación: Los textos de opinión recurren a secuencias argumentativas para defender ideas.
  • Cuidado formal: En los textos de opinión es tan importante expresar una idea como hacerlo de forma atractiva para el lector u oyente.

Existen distintos niveles de la lengua:

  • Vocabulario culto: Emplean un léxico elevado y culto ajustado al tema que tratan. Responde a un estilo personal y un interés estético.
  • Sintaxis compleja: La sintaxis tiende a ser más compleja que en los textos de información. Predomina la subordinación que facilita la relación entre las ideas.
  • Recursos literarios: El embellecimiento del texto y la expresión de ideas complejas hacen que el texto de opinión recurra con frecuencia al uso de figuras literarias: metáforas, hipérboles, ironía…

Los subgéneros de opinión más importantes son el editorial, que recoge la opinión de una empresa sobre un tema; el artículo de opinión, que reproduce una valoración personal de un autor; la columna, similar al artículo, pero de un colaborador; la crítica, las cartas al director en las que los lectores expresan su opinión.

Textos orales

Textos escritos

Se apoyan en recursos de la comunicación no verbal, como son los rasgos prosódicos (pausas, entonación, tono de voz..) y extralingüísticas (posturas, gestos …)

Apenas utilizan la comunicación no verbal, aunque cuenta con el apoyo de los signos de puntuación. Estos reproducen en la escritura los rasgos prosódicos (entonación…)

Establecen una comunicación inmediata en el espacio y en el tiempo, ya que se cuenta con la presencia física de los interlocutores.

Emisor y receptor (lector) no comparten el mismo espacio y tiempo

La inmediatez posibilita la intención entre los interlocutores de la comunicación, y permite al emisor observar la reacción del receptor y corregir el mensaje, pero no borrarlo

La interacción entre emisor y lector es más difícil, al no compartir el mismo contexto. Sin embargo, es un texto más planificado ya que el emisor puede corregir, borrar y reelaborar el mensaje

Presentan una sintaxis menos estructurada y poco compleja con incoherencias sintácticas, muletillas, palabras comodín …

La sintaxis es más compleja y suele carecer de muletillas e incorrecciones sintácticas


La situación en que se produce la comunicación es muy importante para interpretar el mensaje

La situación en que se producen los textos no es tan importante como en los textos orales

Se emplean deícticos (yo, tu, aquí … ) al compartir espacio y tiempo los interlocutores.

Al no compartir el mismo espacio y tiempo, el uso de deícticos no es tan frecuente.

Se repiten estructuras para ayudar a centrar el mensaje que se quiere transmitir

No suele darse la repetición de estructuras ya que el lector puede releer el mensaje

La Poesía Contemporánea

Desde la Guerra Civil hasta nuestros días, la poesía ha experimentado importantes cambios. En este tiempo es preciso distinguir dos periodos:

  • La lírica de postguerra → décadas de los cuarenta, cincuenta y sesenta
  • La poesía actual → desde la década de los setenta hasta la actualidad

La Poesía de Postguerra

La Guerra Civil sume a España en un período de profunda crisis económica y cultural. La penuria que vive el país crea un vacío literario al que contribuyen varios hechos decisivos:

  • Las muertes de poetas representativos de generaciones anteriores: Antonio Machado, Federico García Lorca y Miguel Unamuno.
  • La censura y la represión del régimen, que cercenan la libertad creadora y persiguen a los disidentes.
  • El exilio de poetas como Juan Ramón Jiménez y gran parte de los miembros del Grupo poético del 27.

Uno de los poetas que ejerce una mayor influencia en la lírica de posguerra es Miguel Hernández. Para muchos críticos este autor pertenece a la Generación del 27, puesto que sus primeras composiciones comparten características afines a las obras de estos autores, pero no pertenece a esta generación, sino que por su edad y su trayectoria poética pertenece a la generación de posguerra, por esto es considerado un “eslabón” entre estos dos momentos de la poesía española.

Temas Predominantes:

Muestra una lírica llena de sentimientos humanos, su producción literaria se inserta en un tríptico temático: la vida, el amor y la muerte. Sus poemas de tono existencial y su compromiso con la situación de España hacen de Miguel Hernández un autor imprescindible para comprender la poesía de posguerra.

Poesía Existencial

La situación de España durante esta década es de extrema precariedad: hambre, aislamiento internacional y represión política y cultural. En medio de este panorama surge una poesía de tono existencial, caracterizada por la búsqueda de respuestas a los problemas del ser humano. Los poetas existenciales encaran la dura realidad del país desde dos perspectivas muy distintas:

Poesía Arraigada

Los poetas de esta tendencia se interrogan sobre el dolor de la existencia, pero encuentran consuelo en Dios, la familia, la tierra… Su visión del mundo es armónica y está marcada por una confianza en las capacidades del ser humano para superar las dificultades, con la ayuda de la fe y del amor. Estos poetas son conocidos con el nombre de Grupo Rosales, por ser éste su máximo representante. Algunos de estos autores son: Luis Rosales, Luis Felipe Vivanco, Leopoldo Panero. Todos ellos tienen tendencias y estilos muy personales; no obstante, comparten la misma actitud estética:

  • Estilo sencillo, lenguaje llano y coloquial, aunque con reminiscencias surrealistas.
  • Métrica clásica, estrofas tradicionales que alternan con estrofas de versos libres.
  • Temas de la vida cotidiana que reflejan la experiencia diaria y una constante búsqueda de Dios.

Dentro de esta poesía arraigada, cabe destacar el Grupo garcilasista, entre los que se incluyen los escritores Jesús Juan Garcés, Jesus Revuelta, Pedro Lorenzo y José García Nieto. Defienden la poesía formalista, de evasión, y de corte clásico, que tiene el propósito de entroncar con la Generación del 27.

Características:
  • Visión positiva: Transmiten una visión coherente y armoniosa de la realidad.
  • Escapismo: Se desentienden del momento histórico y se limitan a proclamar las excelencias pasadas de España.
  • Cuidado formal: Hay una inclinación hacía el arte por el arte, destaca la búsqueda de la musicalidad y el colorido.
  • Preferencia por estrofas tradicionales y autores clásicos: Garcilaso de la Vega, Lope de Vega y Quevedo.

Poesía Desarraigada

En 1944 se producen dos hechos literarios que abren una nueva tendencia dentro de la lírica de tema existencial:

  • La publicación de Hijos de la ira, de Dámaso Alonso, supone una ruptura con la lírica del momento, tanto en la forma como en la temática. Dámaso Alonso emplea el verso libre y un lenguaje sencillo, directo y a veces brutal; temáticamente, parte de la observación de la realidad y expresa su protesta ante la injusticia social. El poeta denomina a esta tendencia como “poesía desarraigada”.
  • La fundación de la revista Espadaña. Esta revista se convierte en vehículo de expresión de la poesía desarraigada. Nace con la voluntad de romper con la estética de los garcilasistas y rehumanizar la poesía.

Estos poetas no comparten la visión positiva de la poesía arraigada, sino que cultivan una lírica que se enfrenta con la realidad. Expresan, con tono violento, su malestar vital, la angustia del ser humano ante las consecuencias de la guerra civil y la pobreza. La poesía desarraigada es un existencialismo comprometido que, en la década siguiente, evoluciona hacía una poesía social.

Características:
  • Temas: El sentimiento religioso, la expresión de su religiosidad es crítica, dominada por sentimientos como la soledad, el vacío, el miedo o la angustia de vivir y de morir. Estos poetas reprochan a Dios su silencio y su ausencia en un mundo de desolación y ruina.
  • Estilo: Poesía menos clasicista que la arraigada, en la que el contenido prima sobre la forma. El léxico resulta, en ocasiones, hosco y violento, para expresar la brutalidad y el sinsentido de la existencia humana. A veces, la sencillez formal es solo aparente.
  • Métrica: El soneto predomina en la mayoría de las composiciones, aunque también se emplean estrofas populares y el verso libre.

Principal autor, Blas de Otero con sus dos obras Ángel fieramente humano y Redoble de conciencia. Blas de Otero evolucionó hacía una poesía social, aunque sin abandonar nunca su principal tema: la angustia de la existencia.

Otros escritores representativos de esta poesía son Victoriano Crémer, Eugenio de Nora y José Luis Hidalgo.

Poesía Social

La poesía desarraigada evoluciona durante la década de los cincuenta hacía la poesía social. Esta nueva tendencia conlleva un retorno al realismo social, tradición literaria que se había truncado con la guerra civil. La poesía social alcanza la madurez en 1955, con la publicación de dos libros: Pido la paz y la palabra, de Blas de Otero y Cantos iberos, de Gabriel Celaya.

Los escritores de la poesía social consideran que el poeta debe reflejar la realidad del país, tomar partido por los más desatendidos de la sociedad y denunciar los males que afectan a la nación. Gabriel Celaya: “la poesía es un instrumento, entre nosotros, para transformar el mundo”. La poesía se convierte en vehículo de comunicación para llegar a la inmensa mayoría y despertar la conciencia de los individuos.

La mayoría de los poetas sociales evoluciona, hacia distintos estilos poéticos; sin embargo, todos ellos comparten una serie de características comunes:

  • Verso libre que confiere un tono narrativo en el poema.
  • Predominio del contenido sobre la forma. El carácter literario del poema queda supeditado a su contenido, pues lo importante es el mensaje. Frente a la denuncia, la forma es accesoria.
  • Lenguaje sencillo y coloquial para llegar a la inmensa mayoría; por ello, el léxico empleado adquiere un tono narrativo e incluso prosaico.
  • Las injusticias sociales, la solidaridad, el mundo del trabajo, la preocupación por la política del país y el deseo de libertad son, entre otros, los temas predominantes. El tema de España es el más presente. Los poetas expresan el dolor que sienten por el país y protestan ante la realidad española, la guerra civil y sus consecuencias. El problema de España había caracterizado a los autores de la Generación del 98, aunque el tema en esta época adquiere un tratamiento más político, crítico y obsesivo. En muchos casos, reflejan un sentimiento contradictorio hacia España: de dolor ante la situación dramática del país, y de amor incondicional hacia la patria y esperanza en el futuro.

La Promoción de los Años Sesenta

La poesía comprometida perdura hasta la mitad de los años sesenta, a finales de la década de los cincuenta puede hablarse ya de una superación del realismo social.

Muchos de los escritores que inician este cambio son poetas sociales que abandonan esta línea al entender que está agotada. Los renovadores reciben el nombre de Promoción de los años sesenta. Entre sus integrantes destacan: José Manuel Caballero, José Agustín Goytisolo y Gil de Biedma. Con ellos termina la poesía de posguerra y se inician nuevos caminos de expresión poética.

Para estos escritores la poesía se convierte en un vehículo de autoconocimiento, es decir, el poema debe expresar la realidad íntima del poeta. De ahí que predomine en sus obras un tono intimista y autobiográfico.

Estos poetas retornan al intimismo de épocas pasadas y sus obras comparten una serie de rasgos:

  • La preocupación por el ser humano, por el individuo en concreto, enlazado así con la poesía existencial.
  • La forma predomina sobre el contenido. Frente a la primacía del mensaje de la poesía social, los poetas de esta década valoran el lenguaje como medio para acceder a la realidad.
  • Temas: El paso del tiempo, la evocación nostálgica de la infancia y de la adolescencia, la familia, el amor, el erotismo y la vida cotidiana.
  • Estilo: Lenguaje sobrio, sencillo y preciso, pero lleno de expresividad poética.
  • Técnica conversacional: El poeta se dirige al interlocutor: Dios, la amada, el propio poeta… Este puede ser real o ficticio.
  • Técnicas vanguardistas, sobre todo del Surrealismo.

La Poesía Actual

A partir de los años setenta la sociedad española inicia un proceso de transformación que culmina con el regreso de la democracia en 1978.

La Década de los Años Setenta: Los Novísimos

Los poetas de esta década persiguen un ideal estético innovador y experimental que los sitúa como herederos lejanos de las Vanguardias. Estos escritores renuevan la concepción poética, la estética y los temas; por ello, se les conoce también con el nombre de novísimos. Esta denominación responde a la antología poética de José María Castellet, Manuel Vázquez Montalbán y Leopoldo María Panero.

Características Estéticas:
  • Métrica: Rechazo de las formas estróficas tradicionales y uso del verso libre.
  • Estilo: Elementos surrealistas como las imágenes visionarias y oníricas, la escritura automática, la ausencia de mayúsculas y de puntuación.
  • Ambientación: Huida de la realidad e introducción de elementos exóticos, procedentes de las más diversas raíces y culturas.
  • Técnicas: Utilización del collage (alusión a cómics, películas, textos de otros autores, frases publicitarias, recortes de prensa…). Esto conduce a una ruptura del discurso lógico.
  • Culturalismo: El texto se carga de alusiones culturales que provocan el hermetismo y la dificultad de comprensión.
  • Temas: La temática es muy diversa, aunque destaca el interés por reflejar la nueva cultura. Temas habituales: el erotismo; la crítica y la denuncia; los temas frívolos; el consumismo; reflexiones sobre la psique.

La Década de los Ochenta: La Poesía de la Experiencia

A partir de los años ochenta la lírica rechaza los aspectos más experimentales de los novísimos y regresa a la poética de los años cincuenta. La poesía vuelve de nuevo a ser un vehículo de comunicación que intenta llegar a un amplio abanico de lectores. Los poetas de esta década manifiestan un gusto por la poesía intimista, centrada en el yo poético, de ahí su denominación: poesía de la experiencia. También recibe otras denominaciones como “nueva sentimentalidad”, “poesía neorromántica”, “poesía figurativa”… Este regreso al subjetivismo revaloriza una poesía de la cotidianeidad. La lírica se humaniza y se desprende de la artificiosidad de la década anterior. El poeta se presenta como un ser corriente, que siente igual que sus semejantes.

Los Rasgos Más Característicos:
  • Métrica: Estrofa clásica, aunque en algunos poetas predomina el versículo y el verso libre.
  • Lenguaje y estilo: Los poetas tienden a la naturalidad, de ahí que adopten un lenguaje sencillo y coloquial; el léxico se nutre del habla cotidiana y facilita el acceso al lector común. Así, se incorpora el argot de grupos marginales, de los medios de comunicación, de la ciencia y de la vida diaria.
  • Técnicas: Rechazo hacia la estética vanguardista, se asimilan los componentes de la sociedad de consumo y se imitan las técnicas del mercado y publicidad. Los poetas se sienten integrados en la sociedad. Su poesía, pues, está arraigada a su momento.
  • Temas: Asuntos realistas y verosímiles que afectan al individuo moderno: el sentimiento del tiempo, lo íntimo, lo individual… Esta corriente se define por su diversidad de estilos, sus poetas asumen la cotidianeidad: tanto en el contenido (recuerdos, el amor sin grandilocuencias…), como en la forma (lenguaje coloquial).

Los poetas más representativos son Andrés Trapiello, Aurora Luque, Javier Salvago y Luís García Montero.

Las Últimas Tendencias Poéticas

La multiplicidad de corrientes poéticas es una constante en los últimos años. La década de los noventa y los primeros años del siglo XXI están marcados por la convivencia de diversas sensibilidades poéticas sin que ninguna prevalezca sobre las otras.

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