Explorando la Literatura Catalana: Verdaguer, Guimerà y el Teatro del Siglo XIX

El Canigó y la Cristianización de Cataluña

La temática principal de El Canigó es la cristianización de Cataluña. En aquella época, los monasterios corrían peligro de ser destruidos. Gentil, encargado de vigilar a los musulmanes, se enamora de Flordeneu y la lleva al Canigó, un lugar habitado por hadas. Gifré, tío de Gentil, enfurecido, lo mata. Para reconciliar a Gentil con Talio Laferro, el abad Oliva interviene y establece la paz. En memoria de Gentil, se levanta el monasterio de Sant Martí del Canigó (junto con Sant Miquel de Cuixà). El poema concluye con un diálogo entre los campanarios de ambos monasterios, quienes rememoran eventos pasados y lamentan la inminente desaparición de símbolos que recuerden a Gentil y Flordeneu. La montaña del Canigó perdurará como monumento divino. El poema es una epopeya que narra el nacimiento de la Cataluña cristiana, simbolizada por la cruz y el monasterio.

El poema fue muy bien recibido, lo que impulsó la reconstrucción de varios monasterios que habían sido derribados, atrayendo a numerosos visitantes.

Interpretación y Temas

  • Cristianización de Cataluña: Tema central de la obra.
  • Rebeldía y Seducción: Gentil desobedece y se deja seducir por el mundo de las hadas, representando la imaginación y la figura del poeta romántico.

Verdaguer se sitúa en un punto intermedio, siendo religioso pero mostrando afinidad por elementos románticos. Aborda la rebeldía y la ruptura de moldes, incursionando en la poesía civil, religiosa y la prosa.

Poesía Civil: Oda a Barcelona

En su poesía civil, destaca la Oda a Barcelona:

Cuando en la falda te miro de Montjuic sentada
m’aper verte en brazos de Alcides gigantesco
que para guardar su hija de su lado nacida
en sierra transformándose hubiera quedado aquí.

La Oda a Barcelona celebra el crecimiento de Barcelona como capital de Cataluña, añadiendo una advertencia sobre el poder divino en el ascenso y caída de los pueblos.

Poesía Religiosa: Idilios y Cantos Místicos

En la poesía religiosa, sobresalen los Idilios y cantos místicos, que, según Molas, muestran influencias de los Cantares de Salomón, Llull y San Juan de la Cruz. También destaca Montserrat, un extenso poema que incluye himnos populares como «El Virolai». La obra contiene una sección titulada «La leyenda de Montserrat», que aborda el tema de la cristianización de Cataluña.

Prosa de Verdaguer

En cuanto a la prosa, encontramos obras como:

  • «Discurso en la Fuente del Desmayo»
  • Excursiones y viajes
  • Dietario de un peregrino a Tierra Santa
  • En defensa propia
  • Rondallas
  • Folklore

El Teatro en el Siglo XIX

En el siglo XIX, en Barcelona, Valencia y Palma, el teatro se representaba en español. Existía un público espectador, pero no un público lector, lo que limitaba la impresión de las obras. Se introdujo la práctica de cerrar las luces en el teatro y se creó la «cuarta pared», una barrera imaginaria entre los actores y el público.

Evolución del Teatro

  • Sainete
  • Comedia
  • Drama
  • Teatro realista

El Teatrillo

Antes de Frederic Soler «Pitarra», el teatro consistía en sainetes y piezas cortas de carácter cómico que caricaturizaban la vida cotidiana. Autores destacados de este período son Robrenyo, Renart, Bernat i Baldoví, Alcántara Peña y Eduard Escalante.

Comedia Urbana Costumbrista

Entre 1864 y 1879, la escena catalana se caracterizó por sainetes y comedias. Tal farás, tal encontrarás, de Vidal y Valenciano, se considera un hito del género. Pitarra comenzó parodiando el drama romántico, como Don Juan Tenorio. En 1864, con Don Jaime el Conquistador (drama romántico), desafió la manipulación histórica común en los autores románticos. Pitarra escribía en catalán coloquial, lo que generó oposición por parte de los normativistas conservadores de los Juegos Florales. Verdaguer superó este problema utilizando una lengua viva con pocos castellanismos. El modelo de Pitarra evolucionó hacia el drama romántico, culminando en un teatro medievalizante y fantástico, como en Las joyas de la Roser y El monje negro.

Consolidación del Teatro Catalán

En 1879, Josep Yxart publicó Teatro catalán, sentando las bases del realismo. Víctor Balaguer publicó Nuevas Tragedias y Guimerà, Gala Placidia. El teatro catalán había avanzado hacia un enfoque realista. En la década de 1890, Guimerà adoptó la prosa, marcando el inicio del teatro catalán moderno.

Àngel Guimerà: Ficción y Realidad

Àngel Guimerà nació en Santa Cruz de Tenerife en 1845, hijo de madre canaria y padre del Vendrell. A los 8 años se trasladó a Barcelona. En 1859 ingresó en los escolapios. En 1871, fundó la revista La Renaixença con un grupo de amigos, y en 1879 inició su carrera teatral. En 1895 fue presidente del Ateneo Barcelonés. En 1906 fue propuesto para el Premio Nobel y murió en 1924, tras un homenaje en la Plaza Cataluña.

Guimerà exploró la oposición entre el bien y el mal. Su devoción por su madre influyó en personajes como Ágata (La hija del mar) y Marta (Terra Baixa). Un tema recurrente es la posesión, manifestada en complejos triángulos amorosos:

  • Francesc – Morca – Foneta (En pólvora)
  • Marcolin – Andreu – Mª Rosa (Maria Rosa)
  • Jaume – Vicente – Orihuela (La fiesta del trigo)
  • Ágata – Mariona – Pedro Mártir (La hija del mar)

Sus personajes suelen ser desarraigados: Raimon es hijo de turco (El alma es mía); Roger de Flor nació en Italia (Camino de sol); Sait es morisco (Mar y cielo). El amor es siempre apasionado, en contraste con su vida personal.

Poesía de Guimerà

Antes de dedicarse al teatro, Guimerà escribió poesía. En 1875, recibió un accésit en los Juegos Florales por su poema Indíbil y Mandonio, y en 1877 fue proclamado Mestre en Gai Saber. Su poesía adopta la forma del poema narrativo, mostrando semejanzas con la obra de Victor Hugo, según Yxart. A través de la poesía, infunde fuerza lírica al teatro y teatralidad a la poesía. En el poema La estrujadora, se vislumbra el personaje de Mª Rosa.

Judith de Welp comparte el mismo nombre con una obra teatral. La Santa Espina, un himno popular catalán, proviene de una zarzuela del mismo título.

Bloques Temáticos de su Poesía

  • Culto: Influencias de Espronceda, Campoamor y Núñez de Arce.
  • Popular: La Santa Espina, Las hojas secas y La sardana de las monjas.

Características de su Poesía

  • Narratividad.
  • Fuerza plástica y dramática en las descripciones.

Temas Recurrentes

  • Recuerdos de infancia.
  • El amor de juventud por María Rubio.
  • La madre.
  • Temas historicistas o patriótico-civiles, como en Lo cabeza de Josep Moragues.

Teatro de Guimerà

El romanticismo revitalizó la tragedia en verso. Guimerà consolidó el teatro catalán romántico con Gala Placidia, seguida por Judith de Welp, El hijo del rey, Mar y cielo y La loca.

Progresivamente, las tragedias se ambientaron en la época contemporánea. Mar y cielo, ambientada en el siglo XVII, enfrenta el mundo árabe y el cristiano. Blanca, una novicia, se enamora de Saito. Al final, huyen hacia la muerte: el mar para el pirata y el cielo para ella, como sublimación de un amor imposible. Maragall elogió esta obra por su autenticidad y su capacidad para encontrar «lo más llano de la vida».

En La loca, el mundo minero se enfrenta a mediados del siglo XIX. El tema de la locura, ya tratado por Narcís Oller, es retomado por los modernistas en referencia al ser marginal. Guimerà analiza tensiones individuales y sociales, conectándose con el modernismo.

La segunda etapa se inicia con La sala de espera, la primera obra en prosa, y La Baldirona, ambas ambientadas en el mundo rural.

En 1892, aparece El alma muerta, un drama en verso, pero Guimerà se da cuenta de que este estilo está pasado de moda.

Inspirado en los sainetes, incorpora elementos realistas en su teatro: estructura simple, diálogos bien construidos, respuesta a los problemas sociales del momento, aparición del marco urbano e industrial, y conflictos pasionales. Un ejemplo es En Pólvora, de 1893: Marcó y Toni, dos obreros que luchan por sus derechos, se enfrentan por una pasión amorosa. Guimerà utiliza el sentimentalismo y el símbolo de la «Terra Alta», que también aparece en La fiesta del trigo y, sobre todo, en Terra Baixa.

El paso hacia un nuevo teatro ya estaba dado, con influencia de Ibsen, Maeterlinck, Strindberg y, en menor medida, Ghelderode.

El núcleo teatral más importante de Guimerà lo conforman Mª Rosa, Terra Baixa y La hija del mar, ambientadas respectivamente en el mundo obrero, el campesino y el de los pescadores, con un trasfondo de injusticia social. La trilogía fusiona de manera efectiva el realismo y el romanticismo.

Mª Rosa

El conflicto surge de un triángulo amoroso. Un grupo de obreros construye una carretera y Mª Rosa vive con el recuerdo de su marido (Andrés), fallecido en prisión por un crimen no cometido. Ella se enamora de Marçal, el verdadero asesino, y se casa con él. En la noche de bodas, sospecha su culpabilidad y le provoca la confesión bajo los efectos del vino. Entonces, ella le clava el cuchillo de pan (el cuchillo es un símbolo de Guimerà; en esta ocasión, es ella quien penetra al hombre y no al revés).

Terra Baixa

En Terra Baixa, Sebastián, un terrateniente/cacique, acuerda el matrimonio entre Marta y Manelic, un pastor de alta montaña, para poder casarse con una heredera rica que lo salvará de la ruina y seguir abusando de Marta. Inicialmente, Marta desprecia a Manelic, pero finalmente se enamora del pastor. Cuando Sebastián los sorprende en su huida, Manelic lo mata exclamando: «¡He matado al lobo!».

La Hija del Mar

Pedro Mártir corteja a Mariona, sobrina del Quintas, el patrón más rico de un pueblo de pescadores. Ágata, una joven huérfana rescatada del mar, crece con los padres de Mariona. Ágata también ama a Pedro y le advierte que lo matará si lo ve cortejar a Mariona. Él le promete fidelidad, pero debido a un malentendido, ella cree que él incumple su promesa y lo mata. Después, se lanza al mar, de donde había venido.

A partir de los años 50, Guimerà alternó el realismo con el monólogo patriótico, el drama religioso y la leyenda romántica.

  • Monólogo patriótico: Mestre Oleguer
  • Drama religioso: Jesús de Nazaret (una actualización de La Pasión medieval)
  • Leyenda romántica: Las monjas de San Ayman

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