Explorando el Romanticismo: Literatura, Poesía y Teatro

El Romanticismo: Un Movimiento Cultural Transformador

El Romanticismo fue un amplio movimiento cultural desarrollado en Europa durante la primera mitad del siglo XIX. Se caracterizó por:

  • Individualismo: Tendencia a expresar lo subjetivo, el «yo» del artista, su personalidad y su forma de ser.
  • Exaltación de la libertad: Un espíritu rebelde frente a las leyes y costumbres establecidas.
  • Idealismo: Predominio de los instintos, las pasiones y los sentimientos sobre la razón y la inteligencia.
  • Exotismo y evasión: Tendencia a situar las obras en mundos exóticos y alejados de la realidad.
  • Lenguaje retórico y exaltado: Expresión de un espíritu apasionado o melancólico.
  • Originalidad: El arte concebido como fruto de la inspiración de un genio.

La Poesía Romántica

La poesía romántica fue ampliamente cultivada por su capacidad de expresar sentimientos. Sus características principales son:

  • Uso de lenguaje grandilocuente y retórico, lleno de interrogaciones y exclamaciones.
  • Presentación de todas las combinaciones métricas clásicas y algunas nuevas creadas en la época.
  • Los poetas románticos son polimétricos, alternando estrofas diferentes y versos de distinto tipo.
  • Los temas más repetidos son la libertad, el amor y el desengaño. También se cultivó la poesía narrativa con composiciones en verso de temas históricos y legendarios.

José de Esponceda

Extremeño, llevó una vida agitada y rebelde a favor de la ideología liberal y republicana. Estuvo exiliado en Portugal, Inglaterra y Francia, donde se enamoró de Teresa, quien más tarde lo abandonó. Tras ver el cadáver de su amada, compuso el Canto a Teresa. Sus poemas más conocidos son El Himno al Sol, Al Dos de Mayo, La Canción del Pirata, El Mendigo, El Verdugo y El Reo de Muerte. También compuso poemas narrativos extensos como El Estudiante de Salamanca y El Diablo Mundo. Su estilo es muy musical, con frecuentes cambios de estrofa.

La Prosa Romántica

En el Romanticismo se cultivó la prosa literaria, sobre todo la novela histórica y los textos costumbristas. La novela histórica gozó de gran desarrollo en Europa, con autores como Walter Scott y Alejandro Dumas. En España, destaca la novela El Señor de Bembibre de Enrique Gil y Carrasco. El costumbrismo, género cultivado sobre todo en artículos periodísticos, trataba asuntos de la sociedad contemporánea. Escritores destacados fueron Serafín Estébanez Calderón y Ramón Mesonero Romanos.

Mariano José de Larra

Autor en prosa más importante del Romanticismo español. Pasó su niñez exiliado en Francia y, a su vuelta, ejerció el periodismo e intervino en política. Abandonado por su mujer y tras relaciones amorosas fallidas, Larra se suicidó de un disparo de pistola. También compuso una novela histórica y un drama.

El Teatro Romántico

Rasgos característicos del teatro romántico:

  • Aparición de conflictos entre ideales y realidad, rebeldía frente a las normas.
  • Lenguaje grandilocuente y lleno de exclamaciones y preguntas retóricas.
  • Uso de prosa y verso, combinando diferentes estrofas.
  • Gran importancia a la escenografía.
  • No respeto de la regla neoclásica de las tres unidades (acción, tiempo y espacio).
  • Afianzamiento de los teatros modernos, sustituyendo a los antiguos corrales de comedias con mejoras técnicas.

Duque de Rivas

Participó en la Guerra de la Independencia y se exilió durante el reinado de Fernando VII. En 1834 volvió a España. Compuso poemas narrativos como El Moro Expósito y varios romances históricos, además de obras de teatro. Su obra teatral más importante y conocida es Don Álvaro o la fuerza del sino, cuyo estreno en 1835 supuso el triunfo definitivo del Romanticismo en España.

José Zorrilla

De Valladolid, viajó por Francia y México. Se instaló en España y gozó de gran popularidad hasta su muerte. Compuso unas treinta obras de teatro, entre las que destacan las de temas históricos: El Puñal del Godo, El Zapatero y el Rey, Don Juan Tenorio, etc.

Postromanticismo

Periodo que va aproximadamente de 1845 a 1879, en el que coexisten varias tendencias literarias. En estos años surgen dos de los más grandes poetas del siglo: Bécquer y Rosalía de Castro.

Bécquer

Nació en Sevilla, fue escritor y pintor. Se trasladó a Madrid, donde ejerció distintos trabajos y sufrió problemas económicos y familiares. La poesía de Bécquer es subjetiva, sencilla, concentrada e intensa. Suele presentar rima asonante y ha ejercido una enorme influencia en los poetas posteriores durante el siglo XX. Bécquer escribió en prosa Las Leyendas.

Rosalía de Castro

Nació en Santiago de Compostela y llevó también una vida desgraciada. Escribió en castellano y en gallego, siendo una de las figuras principales del Rexurdimiento o renacimiento de la literatura gallega del siglo XIX.

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