El Teatro Español Antes de 1936 y la Innovación de Lorca
En España, el teatro de finales del siglo XIX estaba dominado por la rutina, atrayendo a un público de clase media alta que buscaba distracción en obras intrascendentes. A principios del siglo XX, la necesidad de renovación se manifestó en distintas corrientes, todas dentro del teatro de entretenimiento, pero actualizando temas y fórmulas dramáticas:
- Teatro comercial, favorecido por el público, representado por Jacinto Benavente.
- Teatro cómico, con los hermanos Quintero como figuras destacadas.
- Teatro poético en verso, de influencia modernista, donde sobresalieron los hermanos Machado, entre otros.
Los intentos de renovación fueron liderados por Unamuno y Azorín, quienes propusieron un teatro desnudo, con una reducción de personajes, pasiones llevadas a su núcleo y un esquematismo de la acción; un teatro antirrealista que incluía el subconsciente y lo maravilloso.
Valle-Inclán y el Esperpento
Dentro de la Generación del 98, Valle-Inclán es un caso especial. Su teatro evolucionó hasta su creación máxima: el esperpento. En sus primeras obras, ofrece dramas decadentistas que aplican el modernismo al drama, con personajes tratados de forma irónica y caricaturesca. En una segunda etapa, escribe dramas de ambiente gallego, localizados en una Galicia intemporal y mítica, con una sociedad arcaica dominada por la soberbia, crueldad, despotismo y superstición. En este ciclo, se mezcla el mundo distorsionado de los esperpentos y la estilización decadentista. En su tercera etapa, escribe farsas, que presentan un contraste entre lo sentimental y lo grotesco, anunciando el esperpento. La creación dramática de Valle culmina con el esperpento, una nueva estética que deforma la realidad, produciendo una visión caricaturesca, cómica y macabra para incidir en la crítica.
La Evolución del Teatro de Lorca
La trayectoria de Lorca se puede dividir en varias etapas:
- Inicios: Comienza con El maleficio de la mariposa, obra de raíz simbolista. Compone varias piezas breves inspiradas en el teatro guiñol. Mariana Pineda es una obra distinta, inspirada en la heroína ajusticiada en Granada por bordar una bandera liberal. Finalmente, en La zapatera prodigiosa, trata el tema de la lucha entre la realidad y la fantasía.
- Experiencia vanguardista: Fruto de una crisis personal y estética, Lorca crea las llamadas Comedias imposibles, con influencia del surrealismo. El público es una especie de auto sacramental sin Dios, cuyos personajes representan las obsesiones y conflictos internos del poeta. Así que pasen cinco años desarrolla los sueños del protagonista e ilustra el tema de la frustración íntima.
- Etapa de plenitud: Lorca combina rigor estético y alcance popular. A esta etapa corresponden dos tragedias, dos dramas y una comedia inacabada. La mujer ocupa un lugar central en casi todas ellas. Bodas de sangre se basa en un hecho real; Yerma es el drama de la mujer estéril, con su alcance simbólico; y La casa de Bernarda Alba (LCBA) es la culminación del teatro de Lorca.
Clasificación del Teatro de Lorca por Géneros
- Farsas:
- Farsas para guiñol: Retablillo de don Cristóbal.
- Farsas: La zapatera prodigiosa. La comicidad y lo grotesco son rasgos de estas obras, aunque Lorca destaca la levedad tradicionalmente asignada a este tipo de obras.
- Comedias imposibles: El público. Planteamiento radicalmente nuevo, anulando las convenciones del teatro realista. Una lógica dramática enlaza las acciones y vertebra la estructura más allá de las apariencias.
- Tragedias: Bodas de sangre y Yerma. Formaban parte de una trilogía inacabada. Su escenario es una Andalucía mítica, con un número reducido de personajes, coros que comentan la acción y el verso en los momentos más solemnes.
- Drama: LCBA. Se acoge al patrón del drama burgués, dramatizando el mundo de la burguesía urbana y rural. Hay una preocupación social en la obra.
- Otras obras: Lola la comedianta, libreto de una ópera cómica cuya música iba a componer Manuel de Falla.
La casa de Bernarda Alba: Conflicto entre Autoridad y Libertad
LCBA plantea como tema central la oposición entre la moral autoritaria y el deseo de libertad. Bernarda intenta imponer sus normas opresivas basándose en la autoridad que se le concede tras la muerte de su marido, mientras María Josefa y Adela intentan rebelarse. Las otras hijas aceptan con resignación la situación. Las criadas también viven bajo el mando de Bernarda, a quien temen. El autoritarismo de Bernarda se manifiesta desde su primera aparición y es un rasgo constante en su actitud y carácter. Impone un luto de ocho años a sus hijas, durante el cual no se les permite asomarse al exterior. Marca de forma rígida el comportamiento que han de mantener sus hijas con los hombres, amenazándolas física y verbalmente para imponer su dominio. Bernarda restablece el orden cuando sus hijas discuten: “Mi vigilancia lo puede todo”.
El deseo de libertad y el impulso amoroso de Adela son más fuertes que su temor a la autoridad materna. Desde el principio manifiesta su rebeldía. María Josefa da cauce a su rebelión a través de la locura, la única vía de escape para un personaje maltratado y encerrado. Su locura le da fuerza para proclamar sus anhelos de libertad, enfrentarse a Bernarda y denunciar su tiranía y el sufrimiento de las otras mujeres.
La opresión y el autoritarismo de Bernarda provocan dos respuestas estériles en búsqueda de libertad: la locura de María Josefa y el suicidio de Adela. El suicidio de Adela se puede interpretar como un suicidio por amor: muerto Pepe, su vida no tiene sentido. Pero el destino es más trágico: Pepe no ha muerto, ha huido, y Adela cree que ha muerto. El juego de apariencias y el temor a la realidad la empujan al suicidio. Lorca, sumido en un profundo pesimismo vital, ofrece una reflexión sobre la frustración del ser humano: el hombre que aspira a ser libre y a gozar con plenitud de la vida y del amor se ve condenado por la sociedad y no le queda más salida que la muerte.