España a Finales del Siglo XIX: Contexto, Regeneracionismo y Generación del 98

1. Circunstancias Sociales y Políticas: La Crisis de Fin de Siglo

A finales del siglo XIX, la afirmación de Nietzsche «Dios ha muerto» y el auge de teorías vitalistas e irracionales provocaron un pesimismo debido al desencanto con la realidad. Los valores tradicionales, especialmente los religiosos, fueron cuestionados. Esto generó una sociedad marcada por el hedonismo, la impulsividad y el misticismo. La élite intelectual se distanció de las masas populares, mientras que las doctrinas revolucionarias comenzaron a calar en los sectores más pobres. En el ámbito político, España vivió tensiones sobre la regeneración, la reforma agraria y la «cuestión social».

1.1 El Desastre de 1898

La derrota de España frente a Estados Unidos en 1898 y la pérdida de las últimas colonias fue un acontecimiento crucial. Este «desastre» no solo significó una derrota militar, sino también un fracaso moral que reveló la debilidad del país. La sociedad española se enfrentó a la necesidad de una profunda regeneración.

El Regeneracionismo: Autor y Obras

Tras el desastre, los intelectuales, incluidos los regeneracionistas como Joaquín Costa, abogaron por reformas en la educación y la economía, buscando modernizar el país. Costa, por ejemplo, proponía un enfoque de «despensa y escuela», defendiendo la reforma agraria y denunciando el caciquismo. La influencia de estos movimientos fue significativa, pero los resultados fueron limitados.

Obras destacadas de Joaquín Costa:

  • Colectivismo agrario en España (1898)
  • Oligarquía y caciquismo (1901)

La Generación Literaria del 98

Pedro Salinas, en un ensayo de 1935, aplica al 98 el concepto de “Generación literaria” que establece unos requisitos generacionales:

  • Nacimiento en años cercanos: Los autores de esta generación nacieron en un lapso de tiempo de aproximadamente once años.
  • Formación intelectual semejante: Salinas destaca el autodidactismo como un elemento común.
  • Relaciones personales: Los autores de la Generación del 98 mantenían una estrecha relación entre ellos, especialmente Baroja, Azorín y Maeztu.
  • Participación en actos colectivos: Algunos eventos importantes que unieron a la generación fueron el viaje a Toledo en 1901 en homenaje a Larra.
  • El acontecimiento generacional: El principal evento que unió a la Generación del 98 fue el «Desastre del 98».
  • Presencia de un guía: Aunque se menciona a Nietzsche y Schopenhauer, ninguno asumió un liderazgo.
  • Lenguaje generacional: Los autores del 98 se distinguieron por innovar en su estilo literario.
  • Anquilosamiento de la generación anterior: La generación anterior, representada por autores como Campoamor, Clarín, Pereda, Valera o Galdós.

La Generación del 98: Características y Miembros

La Generación del 98, conformada por escritores como Baroja, Azorín y Unamuno, se caracteriza por una profunda preocupación por la situación de España tras el desastre de 1898. A pesar de sus diferencias ideológicas, todos compartían un sentimiento de rebeldía y protesta. Inicialmente, muchos se inclinaban por ideas revolucionarias, pero con el tiempo adoptaron posturas más conservadoras o idealistas.

El Grupo de los Tres

El Grupo de los Tres estaba compuesto por Baroja, Azorín y Maeztu. En 1901, publicaron su «Manifiesto» para denunciar la «descomposición de los valores morales» y la desorientación de la juventud.

Temas y Estilo de la Generación del 98

El tema central de esta generación fue España, abordado con un enfoque subjetivo. También destacaron el interés por el paisaje, especialmente el de Castilla, y la historia, a través de la «intrahistoria» de Unamuno. Otros temas importantes fueron las preocupaciones existenciales y el problema religioso.

Los autores del 98 renovaron la lengua literaria. Su estilo se caracterizó por la sobriedad, el antirretoricismo y un gran cuidado por la forma. El subjetivismo fue fundamental. La generación se destacó en el ensayo y enriqueció la novela, aunque el teatro no tuvo tanto éxito. Su trabajo marcó el inicio de la Edad de Plata de la literatura española.

Pío Baroja

Obra: Pío Baroja fue un hombre del 98, preocupado por los problemas de España. Sus novelas tienen una estructura libre. Su estilo es directo y sin adornos.

Obras destacadas:

  • La lucha por la vida
  • Tierra vasca
  • La raza

Azorín

Obra: La obra de Azorín está marcada por una profunda nostalgia y evocación del pasado. Se enfoca en los paisajes, las personas y las ciudades de España.

Obras destacadas:

  • Los pueblos (1905)
  • Castilla (1912)
  • La ruta de Don Quijote (1914)
  • La voluntad (1902)
  • Antonio Azorín (1903)
  • Confesiones de un pequeño filósofo (1904)
  • Lo invisible (1928)

Unamuno

Obra: El estilo de Unamuno es vehemente y directo. Su pensamiento se centró en el problema de España y el sentido de la vida humana.

Preocupación por España: Unamuno reflexionó profundamente sobre la realidad española.

Narrativa y otras obras:

  • Paz en la guerra (1897)
  • La tía Tula (1931)
  • San Manuel Bueno, mártir (1931)
  • Cancionero póstumo (1916)
  • El Cristo de Velázquez (1920)

Antonio Machado

Vida: Antonio Machado nació en Sevilla en 1875. Estudió en la Institución Libre de Enseñanza. En 1899, en París, se relaciona con simbolistas. En 1907 se trasladó a Soria, donde conoció a Leonor. Murió en 1939 en Collioure.

Obra: La obra de Machado muestra una evolución desde el intimismo romántico hacia el objetivismo crítico, pasando por el modernismo y el conceptismo formal.

Principales obras:

  • Soledades (1903)
  • Campos de Castilla (1912)
  • Nuevas canciones (1924)
  • Juan de Mairena (1934-1939)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *