La generación del 98: Baroja, Unamuno y Azorín
Los narradores de principios del s. XX siguen Caminos diferentes. Por una parte podemos encontrar a los que renovaron el Realismo escogiendo de él solo lo que les interesaba; a los que incluyeron en Sus obras innovaciones importantes; y a los conocidos como vanguardistas.
Dentro del primer grupo destaca Pío Baroja que, Aunque continua en cierta medida con los postulados del Realismo, crea una novela radicalmente diferente.
Sus novelas tienen un personaje activo que lucha Contra algo, aunque finalmente suele fracasar. Para Baroja, en la novela cabe Todo, es un género abierto a todo tipo de posibilidades (filosofía, aventura, Humor…). Las conversaciones (novela dialogal) cobran una importancia capital en Muchas de sus novelas y es un maestro en la descripción. Entre sus novelas Destacan Camino de perfección, El árbol de la ciencia, La Lucha por la vida (trilogía), Zalacaín el aventurero y Las Inquietudes de Santhi Andía. Estas pertenecen a una primera etapa Caracterizada por la variedad temática. En su segunda etapa, se observa el Predominio por el trasfondo histórico (Memorias de un hombre de acción, El Laberinto de las sirenas, Los amores tardíos y El cura de Monleón).
Otros autores que trabajan a esta renovación Realista son Wenceslao Fernández Flórez o Felipe Trigo.
Al segundo grupo pertenecen autores que intentaron Renovar el panorama literario a través de diferentes caminos. Las principales Carácterísticas de esta nueva narrativa son: la perdida de importancia de la Historia a favor del discurso; la novela se centra en la problemática del héroe (la acción se sustituye por el retrato interior del protagonista), la narración Se fragmenta en estampas, utilizan los saltos temporales, y vuelve la novela Dramatizada o dialogal en la que el narrador se diluye.
Entre estos escritores debemos destacar:
-Miguel de Unamuno para el que la Novela era el medio perfecto para interpretar la realidad. En ellas expresa los Temas que más le obsesionaron: la afirmación de la personalidad, la lucha Contra el instinto, el afán de dominio, y la muerte. Aunque inició su narrativa Con la novela histórica y realista (Paz en la guerra), pronto deja el Realismo puro por otra forma de componer que refleje la vida. Entre ellas Destaca Niebla en la que sale la cuestión de la metanovela (un personaje Habla directamente con su escritor), Abel Sánchez (la novela del Caínismo hispánico), La tía Tula (una verdadera protesta contra el Destino adjudicado a las mujeres) o San Manuel Bueno, mártir (de tema Religioso).
-Azorín es otro de los novelistas Que debemos destacar, aunque los textos que escribe difícilmente se pueden Tildar de novelas. Sus novelas anulan el movimiento y el tiempo, se trata de Fragmentaciones, instantáneas que intentan congelar el momento y captar la Impresión del instante. Sus novelas más importantes son La voluntad en La que aparecen un collage de diferentes documentos, Manuel Azorín, Don Juan y Doña Inés.
-Valle-Inclán también pertenece a Este grupo de autores que intentó renovar el panorama narrativo de final de Siglo. Toda la obra de Valle obedece al rechazo del Realismo tradicional Mediante diferentes formas de producción. En primer lugar escoge el Modernismo En sus Sonatas, una alegoría de la vida humana representada por un Conquistador ya caduco, el marqués de Bradomín. Su tema predominante es el amor Carnal, la muerte y la religión. La guerra carlista es una trilogía que Da una visión de la España tradicional, a la que defiende, frente al Liberalismo, origen de todos los males. Progresivamente Valle introdujo Innovaciones en su técnica novelística hasta culminar en su creación máxima: el Esperpento. Comenzó a gestarse en Tirano Banderas que ofrece ya ciertas Carácterísticas del Esperpento como la degradación de personajes. En El Ruedo Ibérico el estilo esperpéntico está plenamente logrado.
-Destacaremos también en este Grupo a Ramón Pérez de Ayala que creó una novela experimental preocupada por el Tema del cambio moral del individuo. Tiene su culminación en Belarmino y Apolonio.
-Y por último, Gabriel Miró que Creó una novela de profundo lirismo. En sus novelas prima la emoción, ante la Acción. Destacan Las cerezas del Cementerio (de corte modernista y decadentista) y Nuestro Padre San Daniel y El obispo leproso (cuyo tema principal es el paso del Tiempo)
Finalmente, aparecíó la novela de vanguardista representada Por Gómez de la Serna que trata temas prohibidos como el amor carnal o la Obsesión por la muerte (Viuda blanca y negra y Gran hotel) o Benjamín Jarnés Influenciado por el primero con Locura y muerte de Nadie y Paula y Paulita O Lo rojo y lo azul. También están en este grupo Rosa Chacel y Max Aub.
El Teatro anterior la Guerra Civil
En las primeras décadas del Siglo XX, se produjeron Diversos intentos de renovación en el panorama teatral de la época, que estaba Dominado por el drama realista y el ROMántico.
Gozaron del favor del público autores como Jacinto Benavente; el teatro cómico (que continuarán incluso después de la guerra) y el Teatro en verso al estilo francés de Eduardo Marquina, Francisco Villaespesa o Los hermanos Machado.
Los primeros intentos de renovación teatral fueron Llevados a cabo por Jacinto Grau, Unamuno y Azorín, pero las figuras que Destacaron en las primeras décadas del Siglo XX fueron, sin duda alguna, Valle-Inclán y Federico García Lorca.
Jacinto Benavente tuvo un gran éxito en taquilla. Sus obras componen una crónica amable de las preocupaciones y prejuicios Burgueses, por medio de una suave ironía. El teatro debía ser, según Benavente, Un instrumento de evasión e ilusión. El diálogo natural y fluido es una de las Carácterísticas más importantes de su teatro. Destacan entre sus obras Los Intereses creados que desarrolla el tema del poder del dinero por medio de Los personajes de la Commedia dell’ arte Italiana, y La malquerida que Trata del tema de la honra.
Dentro del teatro cómico debemos destacar a los Hermanos Álvarez Quintero con sus dramas de ambiente andaluz (El patio, El Traje de luces), Muñoz Seca y su nuevo atracán (La venganza de don Mendo Y los Extremeños se tocan) y a Carlos Arniches con su sainete extenso y Comedia grotesca de una fuerte voluntad de denuncia de la realidad nacional (¡Qué Viene mi marido¡, Los caciques, Es mi hombre).
Entre los primeros intentos de renovación destacan Las aportaciones de Unamuno y de Azorín.
Unamuno creó lo que él llama teatro desnudo Caracterizado por la supresión de aquellos efectos o elementos que no Dependieran directamente de la palabra (vestuario, decorados), una reducción de Los personajes y el esquematismo en la acción (Fedra, Soledad, Raquel Encadenada). Azorín aportó su grano de arena con el antirrealismo, un Teatro de experimentación, que incluía elementos surrealistas y maravillosos. Destacaron sus diálogos y el empleo de la iluminación (Lo invisible).
Luego llegará Valle-Inclán que muchos críticos Definieron como el creador del teatro español “de más absoluta y radical Originalidad”.
En la trayectoria dramática de Valle se observa una Constante voluntad de renovación formal y temática y una pretensión de romper Con el teatro de su época.
En sus primeras obras, aplicó el Modernismo al Drama. Son ejemplos El marqués de Bradomín y El yermo de las almas En los que trata del tema del adulterio con una protagonista típicamente Finisecular enferma y decadente.
Tradicionalmente, se han denominado ciclo mítico o Galaico, aquellos dramas de Valle que se relacionan por sus temas, personajes, Atmósferas y significado y que se localizan en una Galicia rural, mítica y Atemporal. En ellas se representa una sociedad arcaica cuyos conflictos se Centran en la lujuria, la soberbia, la crueldad, el despotismo, el pecado, la Superstición y la magia. Aquí incluimos Comedias bárbaras (Ágüila de Blasón, Romance de lobos y Cara de plata) cuyos protagonistas Se mueven por los impulsos elementales del ser humano y actúan por oscuras Razones, y Divinas palabras en la que confluye el esperpento y la Estilización decadentista
De entre las farsas de Valle destaca La reina Castiza (en la que realiza una sátira demoledora al reinado de Isabel II) Ya que junto con la obra anterior (DP) preparan el camino para el Esperpento.
El Esperpento es la producción de Valle que muchos Consideran un género en sí mismo. El Esperpento deforma la realidad como si se Tratase de una visión en “un espejo cóncavo” para producir una caricaturización Que sirve para el desenmascaramiento de la realidad. Gracias a esta nueva Estética, Valle pudo fijarse en su momento histórico. Son creadas plenamente Bajo esta estética Luces de bohemia, 1920, (a cuya crítica no escapa Nadie) y la trilogía Martes de carnaval: Los cuernos de don Friolera, Las galas del difunto y La hija del capitán (que se centra casi Exclusivamente en el ejército).
Lorca fue el Otro de los grandes renovadores teatrales del s. XX.
Lorca creó el verdadero teatro poético en el que Además cobran importancia el resto de componentes teatrales configurando así el Espectáculo total.
La producción dramática de Lorca expresa de manera Profunda los problemas de la vida y de la historia a través de un lenguaje Cargado de connotaciones y símbolos.
Sus primeros dramas, al igual que Valle-Inclán, Fueron de carácter modernista (El maleficio de la mariposa o María Pineda).
Lorca también se deja influenciar por el Surrealismo En el teatro bautizado como teatro imposible. En Así pasen 5 años, el Público (metateatro) y La comedia sin titulo rompe con la lógica Espacio-temporal y juega con el desdoblamiento de la realidad y la posibilidad De varias interpretaciones.
Pero lo que más se popularizó fueron sus tragedias,
Que muchos consideran formar una trilogía: Bodas de sangre (que
Dramatiza la fuerza de los instintos), Yerma (cuyo tema principal es la
Esterilidad)
La casa de Bernarda Alba (que representa la lucha del
Principio de autoridad y el de libertad, representados por madre e hija). Las
Tragedias lorquianas se desarrollan en un ambiente rural en el que las fuerzas
Naturales imponen un destino trágico. Los personajes son poco, pero muy
Trabajados e intervienen coros.