Orígenes del Movimiento Romántico
El Romanticismo tuvo su origen en Inglaterra y Alemania a finales del siglo XVIII. Supuso una reacción contra el pensamiento ilustrado. Los románticos no compartían la confianza en la razón de los ilustrados, lo que motivó la reivindicación de los sentimientos y la fantasía. El movimiento romántico se desarrolló en un contexto de grandes cambios sociales y políticos, como por ejemplo la Revolución Industrial. Los filósofos ponen en cuestión la razón, las reglas y el clasicismo.
En literatura, frente a las ideas neoclásicas basadas en reglas, surge una serie de autores que le dan la vuelta a las creaciones barrocas y ponen límites en sus teorías y en sus propias creaciones a los límites de la razón neoclásica.
La sensibilidad empieza a sentirse en Inglaterra, en el siglo XVIII. Su interés es por la mitología y por las tradiciones locales. Autores como Lord Byron o Mary Shelley, autora de Frankenstein, difundieron los temas de la soledad y la muerte.
En Alemania, cuna del Romanticismo, destaca Goethe, con Fausto.
En Francia destacó Alejandro Dumas con El Conde de Montecristo.
Características del Romanticismo
- Irracionalismo: Niega que la razón pueda explicar por completo la realidad. Este rechazo de la razón y de lo racional explica también la preferencia de los románticos por temas como lo sobrenatural, lo mágico o lo misterioso.
- Subjetivismo: Si la razón tiene sus límites, son necesarias otras formas de conocimiento que se basen en la intuición y la imaginación.
- Idealismo: El hombre romántico sentirá una especial predilección por lo absoluto, lo ideal. Ello explica, por una parte, la necesidad de acción o vitalismo, pero también genera insatisfacción, frustración e infelicidad.
- Evasión: Para escapar de ese mundo que no encuentra cabida a su idealismo extremo, el romántico opta por escapar de la realidad inmediata que no le gusta.
- Individualismo: El hombre romántico tiene conciencia de ser un ser individual, de ser distinto a los demás, por eso afirma constantemente ese YO frente a lo que le rodea. Conduce a la soledad.
- Naturaleza dinámica: Esta naturaleza se identifica con los estados de ánimo del creador.
- Nacionalismo: Comprende la revalorización de los antiguos poemas épicos, de las leyendas y tradiciones locales.
El Romanticismo en España
Muchos románticos europeos se implantaron antes en nuestro país. Habían descubierto que España era un país romántico por varios motivos:
- El Quijote propone para el escritor romántico un modelo de caballero que lucha por lo ideal y es también, por lo tanto, considerado como un héroe romántico en busca de sus ideales.
- Los paisajes agrestes de España, las ruinas de templos y los monasterios atraían a pintores, escritores…
Aunque España fuese considerada como un país romántico para Europa, sin embargo, las peculiares circunstancias históricas y políticas que atraviesa España durante el primer tercio del siglo XIX son las que explican el tardío y extraño desarrollo del Romanticismo en nuestro país. La falta de libertad de expresión explica el tardío desarrollo del Romanticismo en nuestro país.
Durante el Trienio Liberal llegan a España, huyendo de las persecuciones de Italia, diversos escritores italianos, que comunican las novedades románticas que se estaban produciendo en España. El Romanticismo español llegó en torno a los años 30. Don Álvaro o la fuerza del sino. El Romanticismo tuvo una vida breve en España.
Los Géneros Románticos
Durante la primera mitad del siglo XIX, la poesía refleja bien el proceso de transición desde la estética neoclásica hasta la romántica. Como en los demás géneros literarios, el triunfo de la poesía se produce en los años 30 tras la muerte de Fernando VII. Podemos distinguir las siguientes producciones poéticas:
- Poesía narrativa: Eran poemas narrativos, extensos y breves. Espronceda con El diablo Mundo y El estudiante de Salamanca. Narra la leyenda de Don Félix de Montemayor que, tras abandonar a su adorada Elvira y matar en duelo al hermano, contempla su propio entierro. Destaca también Don Álvaro o la fuerza del sino del Duque de Rivas.
- Poesía lírica: Expresa los temas característicos del Romanticismo: los sentimientos personales, la melancolía, el amor. Todo ambientado en lugares solitarios, cementerios, la noche, las ruinas, el mar… Otro de los rasgos más característicos de esta poesía es la polimetría, lo que manifiesta la libertad del poeta. También son muy características las exclamaciones retóricas.
Los autores de la poesía lírica son José Zorrilla y José de Espronceda.
Gustavo Adolfo Bécquer
Aunque Bécquer escribe en pleno auge del Romanticismo, nunca mostró un apego total al movimiento. La crítica considera sus Leyendas como la parte de su obra más propiamente romántica. Sus Leyendas son una colección de relatos ambientados en la Edad Media y narran un hecho fantástico o sobrenatural. Además, en ellas se recogen muchos temas simbólicos del Romanticismo, y sus Rimas son un conjunto de poemas breves en los que Bécquer expresa sus sentimientos con un lenguaje sencillo. Frente a los excesos románticos, prefiere formas escuetas, en las que emplea símbolos y recursos sencillos.
La Prosa Romántica
Lo más característico de la prosa romántica en España es la novela histórica. Tuvo mucho éxito en toda Europa, gracias al escocés Walter Scott. Está ambientada en el pasado, sobre todo en la Edad Media. Los temas suelen ser amorosos, cuyos personajes se ven envueltos en numerosas aventuras. Destaca Larra El Doncel de don Enrique el Doliente.
Es muy importante destacar también que en esta época surgirá la novela por entregas. Se trata de una publicación de textos de forma fragmentaria y no completa en formato de libro.
Mariano José de Larra
Es autor de numerosos artículos periodísticos en los que analiza en profundidad las costumbres españolas y la situación del país. Su intención no es solo mostrar la costumbre, sino además criticarla con la finalidad de eliminar todo lo que impide el progreso y la modernización. Él decía que se necesitaba una urgente europeización. Publicó un periódico: El Duende satírico del día.
El Teatro Romántico
En el siglo XIX, la situación del teatro español era precaria. Se presentan obras poco originales y de poca calidad. La escena está dominada, en general, por traducciones de autores franceses. Igual que ocurre con los demás géneros, el triunfo del teatro romántico se produce en la década de los treinta. El tema principal será el amor, el amor absoluto e ideal, que en un mundo hostil hace que frecuentemente los finales sean trágicos.
Personajes
Los héroes protagonistas suelen tener un origen misterioso y desconocido, o bien ocultan su identidad. Poseídos por una pasión absoluta y con un comportamiento que oscila bruscamente entre la felicidad y la desesperación. Tienen dos grandes aspiraciones: el amor a la libertad y el amor a la mujer. Las heroínas son siempre bellas física y espiritualmente, representan el amor.
Características
Los dramas románticos suelen desarrollar acciones amorosas en un marco histórico, normalmente de la historia nacional, pero sin reconstruirla fielmente, sino dándole un giro romántico. En sus obras se mezclan la tragedia y la comedia, y no se respetan las cuatro unidades clásicas:
- El número de actos varía de tres a cinco.
- La escenografía adquiere gran importancia. Sirve para dar al teatro carácter de espectáculo.
- Es fundamental la intriga, caracterizada por la inclusión de numerosos elementos melodramáticos.
- Se expresan anhelos de una sociedad más justa, defensa de la libertad y del derecho a la rebelión frente a los tiranos y los malos gobiernos.
Autores
- Larra, El Macías
- Duque de Rivas, Don Álvaro o la fuerza del sino
- José Zorrilla, Don Juan Tenorio