El Romanticismo en España: Contexto Histórico, Características y Autores Clave

El Romanticismo: Contexto Histórico y Características

Situación de Europa en el Siglo XIX

  • Fin del Antiguo Régimen. Siglo de la burguesía.
  • Revolución Industrial y desarrollo del capitalismo moderno.
  • De la sociedad estamental a la clasista. Perdura el enfrentamiento nobleza-burguesía. Toma de conciencia por parte del proletariado: tensiones sociales.
  • Política: A partir de la Revolución Francesa, la burguesía busca el poder político: liberalismo. Continuos movimientos revolucionarios.
  • Desarrollo del nacionalismo: primero, frente a Napoleón; luego, por motivos económicos y políticos (Guerra de la Independencia de Grecia frente al Imperio turco, unificaciones de Alemania e Italia, y, en España, despertar de los nacionalismos).
  • Colonialismo: pugna por los mercados internacionales y territorios productores de materias primas.

En España

  • Retraso respecto a Europa, sobre todo en la primera mitad de siglo.
  • Burguesía débil: menor desarrollo industrial, el cual se concentró en Cataluña y País Vasco.
  • Pugnas entre progresistas y reaccionarios (apoyados éstos por la Iglesia).
  • Tensiones sociales, consecuencias del desarrollo del movimiento obrero.
  • Enfrentamiento entre librepensadores (seguidores de Krause) y el pensamiento católico tradicional.
  • Conflictos: Guerra de la Independencia (1808-14), derogación de la Constitución de Cádiz y mandato de Fernando VII, Guerras carlistas, Revolución de la Gloriosa (1868), pérdida de las colonias (Cuba y Filipinas) en 1898.

Características del Romanticismo

  • Movimiento cultural marcado por la libertad vital, el conflicto con los límites y exaltación del yo.
    • Sentimiento frente a razón. Actitud vital de desengaño, desazón, melancolía.
    • Rebeldía contra las normas de un mundo. Por ello, preferencia por personajes marginados, piratas, mendigos…
    • Lucha contra el destino: intentar cambiar el mundo, o evadirse hacia otros lugares (orientalismo, lugares exóticos o ideales), otros tiempos (preferentemente hacia el Medievo o el Siglo de Oro), o viajes sin retorno (ultratumba o suicidio literario) misticismo religioso.
  • Libertad estética y creativa.
    • Rechazo de las reglas: los géneros se diluyen (destruye límites entre poesía, épica y dramática); mezcla prosa y verso, serio y grotesco, belleza canónica y feísmo, grandilocuencia e intimismo, épico y vulgar…
    • Búsqueda de la originalidad: niega la imitatio. Obras fragmentadas, inacabadas.
    • Desmesura expresiva y dramatismo: vocabulario expresivo, connotativo, recargado, efectista y exagerado. Frecuentes exclamaciones e interrogaciones, antítesis violentas, comparaciones y metáforas. Uso de arcaísmos, pero también términos castizos y populistas. Empleo de vocabulario simbólico.
  • Escenografía: importancia de la naturaleza.
    • Se adapta al estado de ánimo del autor, y es empleada como un símbolo: preferencia por lugares salvajes, recónditos, misteriosos, tormentosos y solitarios. Gusto por lo nocturno, sobrenatural y macabro.
  • Héroe romántico: amoral, ingenuo, misterioso, rebelde, envuelto en tramas imposibles, muertes y venganzas.
  • Importancia de lo genuino y nacional.
    • Defensa de la lengua, la historia, el folclore, las tradiciones.

La Prosa Romántica

  • Novela histórica y legendaria: destaca El señor de Bembibre de Gil y Carrasco.
  • Cuadro de costumbres: Escenas matritenses de Mesonero Romanos.
  • Mariano José de Larra (1809- 1837): perfil de hombre romántico, publicó más de doscientos artículos, políticos, literarios o de costumbres. De estos últimos, destacan “El castellano viejo”, “Vuelva usted mañana”, “El Día de los Difuntos de 1836”, “El café”, con estilo sencillo, llano, claro, directo pero elaborado y con tono mordaz e irónico, lleno de dobles sentidos, juegos de palabras y paradoja.

Los románticos vieron en la prosa y en el teatro los géneros que mejor podían transmitir los sentimientos.

El Teatro Romántico

Los gustos neoclásicos no calaron en los espectadores. Por ello, se representan dramas de acción protagonizados por héroes rebeldes, con una puesta en escena llamativa, temas históricos o legendarios y ruptura de las tres unidades.

  • Duque de Rivas, Don Álvaro o la fuerza del sino.
  • José Zorrilla, Don Juan Tenorio.

La Poesía Romántica

  • La libertad se manifiesta en la versificación: mezcla de estrofas, recuperación de formas métricas como el romance, la octava real y la silva. Utilizan rimas agudas y esdrújulas, así como nuevos ritmos acentuales, buscando la musicalidad.
  • Temas: la libertad, los sentimientos, la muerte, lo exótico y legendario.
  • Lenguaje connotativo y simbólico, culto y retórico.

Modalidades

  • Poesía épica o narrativa: cultiva los temas histórico-legendarios o exóticos. Se distinguen grandes poemas narrativos, como El estudiante de Salamanca o El diablo mundo de Espronceda, poemas narrativos breves, como Romances históricos del Duque de Rivas, o leyendas populares o históricas, como A buen juez, mejor testigo de José Zorrilla.
  • Poesía lírica: subjetiva y sentimental. Temas: el amor, la naturaleza, la soledad, la desazón vital, la religiosidad, el amor a la patria, la libertad.

Etapas

  • Primera generación romántica (de 1770 a 1840): conviven con los autores de tendencia neoclásica. Destaca Martínez de la Rosa.
  • Románticos: de poesía exaltada y exceso de retoricismo. Autores destacados: Gil y Carrasco y Espronceda (“La canción del pirata”…).
  • Posrománticos: influenciados por Heine, la poesía se vuelve intimista y esencial. Autores destacados: Bécquer y Rosalía de Castro.

Autores Clave del Romanticismo

José de Espronceda (1808-1842)

  • Exiliado por sus ideas liberales en tiempos de Fernando VII, conoció el Romanticismo inglés, francés y holandés. Se le ha llamado “el Lord Byron español”.
  • “Canto a Teresa”, posiblemente uno de sus poemas más hermosos, escrito tras la prematura muerte de Teresa Mancha, su amante.
  • “Canción del pirata”, su composición más popular.
  • El estudiante de Salamanca, incluido en Poesías, precursor de Don Juan Tenorio de Zorrilla, muestra una romántica concepción del amor.
  • El diablo mundo, cuyo protagonista es testigo de todas los destinos y tragedias humanas.

Gustavo Adolfo Bécquer (Sevilla, 1836- Madrid, 1879)

  • Huérfano a temprana edad. Se educó con su madrina, que tenía una impresionante biblioteca.
  • Enamorado de Julia Espín, amor no correspondido, se casó con Casta Esteban.
  • Problemas de salud; muerte prematura.
  • Representa la culminación del Romanticismo intimista español. Considerado el primer poeta moderno y el poeta más influyente del siglo XX.
  • Cartas desde mi celda, escrita en el monasterio de Veruela.
  • Leyendas, de ambientación misteriosa y claros rasgos románticos (la noche, fantasía, naturaleza en movimiento…). Destaca, en cuanto a la técnica narrativa, la perspectiva del narrador.

Rimas

Desaparecido el manuscrito original, lo reescribe de memoria en Libro de los gorriones. Muerto el poeta, sus amigos lo publican, con una ordenación distinta, con el nombre de Rimas con una estructura temática:

  • Rimas I-XI: sobre poesía, la inspiración, el genio lírico.
  • Rimas XII-XXIX: el amor esperanzado, ilusionado y gozoso.
  • Rimas XXX-LI: tema el desengaño y fracaso amoroso.
  • Rimas LII-LXXVI: dolor, angustia, soledad, vacío sin amor, desazón, pesimismo existencial, enfrentamiento con el mundo y la muerte.

De gran perfección formal, son poemas breves escritos preferentemente en heptasílabos y endecasílabos o estrofas tradicionales, como seguidillas o coplas. Además de la función poética, domina la función expresiva: el yo lírico que expresa sentimientos de amor, desengaño o angustia. Con versos de arte mayor y menor y rima asonante. Marcados por su musicalidad e intimismo, de estilo sencillo, natural, no recargado, sin retoricismos y eliminación de epítetos innecesarios. Dotados de un gran lirismo, con referencias al amor, la música y la naturaleza, la cual, alegóricamente, expresa los sentimientos del autor: páramos sombríos, valles nevados, tumbas olvidadas… Predomina el estilo nominal y los verbos en presente. Utiliza paralelismos, anáforas, hipérbatos, interrogativas retóricas, encabalgamientos, asíndeton y aliteraciones. Es frecuente la forma dialogada.

Romanticismo: Prosa de Ficción

Dos tendencias:

  • La novela, de gran auge. Preferencia por la novela histórica y legendaria. Destacan El señor de Bembibre de Gil y Carrasco y El doncel de don Enrique el Doliente de Larra. Surge la novela social, en la que sobresale María o la hija de un jornalero de Wenceslao Ayguals de Izco.
  • El cuadro de costumbres: con tono satírico que reflejan la vida cotidiana, destacando. Son el anticipo de la novela realista. Sobresalen Escenas matritenses de Mesonero Romanos y Escenas andaluzas de Estébanez Calderón.

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