El Novecentismo y las Vanguardias: Autores, Características y Obras

El Novecentismo

En torno a 1914, se dio a conocer en España un grupo de escritores que proponían nuevos enfoques estéticos y literarios, y desarrollaban nuevas actitudes ante la realidad española. Estos escritores formaron la Generación del 14 o Novecentismo. Considerados por los críticos como el grupo de intelectuales más importante de la España Moderna, constituyen un puente entre la generación finisecular (Modernismo y 98) y las vanguardias y el Grupo del 27. Forman parte de esta generación los ensayistas José Ortega y Gasset, Eugenio d’Ors, Manuel Azaña, Gregorio Marañón, Salvador de Madariaga, Claudio Sánchez Albornoz, Américo Castro… y los novelistas Gabriel Miró y Ramón Pérez de Ayala, entre otros. También se relaciona con ella el poeta Juan Ramón Jiménez, especialmente en su etapa intelectual.

Características del Novecentismo

  • Su sólida formación intelectual.
  • La preocupación por la situación de España: rechazan la postura sentimental del 98 y analizan los problemas del país de forma objetiva y racional, proponiendo la europeización frente al tradicionalismo.
  • Cosmopolitismo intelectual, preferencia por la cultura urbana y afán pedagógico.
  • Concepto elitista del arte: defensa de un arte deshumanizado y puro, cuya única finalidad es el goce estético.
  • Estilo depurado y preciso, que da gran importancia a la forma y produce como resultado una literatura intelectualizada.

El género más representativo es el ensayístico: los ensayos tratan de temas variados y se publican como colaboraciones periodísticas. Cabe destacar a D’Ors, creador de un ensayo denominado glosa, artículo breve e ingenioso sobre las novedades culturales y políticas de España y Europa.

José Ortega y Gasset es la figura cumbre del Novecentismo, por su labor como filósofo, periodista y ensayista, y también por su interés hacia las nuevas formas de arte europeo. Entre sus obras más importantes, destacan Meditaciones sobre el Quijote (1914), España invertebrada (1921), Ideas sobre la novela (1924), y La deshumanización del arte (1925).

La novela novecentista

Se abandona la novela realista y se experimentan nuevos caminos usando el humor y el intelectualismo. Los principales autores son Wenceslao Fernández Flórez, Gabriel Miró y Ramón Pérez de Ayala.

La poesía novecentista

El poeta más acorde con los ideales estéticos del Novecentismo fue Juan Ramón Jiménez, que, con su concepción de la «poesía pura», se acercó al intelectualismo renovador que preconizaban los ensayistas de dicho movimiento. Juan Ramón entiende la poesía como vía de conocimiento, como medio de expresión de la belleza total y como manifestación del anhelo de eternidad. Creía en la unidad de lo que llamaba su Obra.

Etapas de la obra de Juan Ramón Jiménez

  1. Etapa sensitiva: marcada por la influencia de Bécquer, el simbolismo y el Modernismo. Arias tristes, La soledad sonora, y el poema en prosa Platero y yo, entre otros.
  2. Etapa intelectual: Diario de un poeta recién casado. El mar descrito en el libro se convierte en el reflejo del poeta.
  3. Etapa suficiente o verdadera: alcanza su idea de poesía esencial en las obras escritas en el exilio, como Animal de fondo, El otro costado y Dios deseado y deseante. Se trata de una poesía construida con símbolos irracionales y que renuncia a la rima.

La poesía pura de Juan Ramón Jiménez preparó el camino en España para dar entrada a una nueva sensibilidad artística en los años veinte. Este arte intelectual que Ortega y Gasset llamó deshumanizado, se mantuvo en contacto con las vanguardias europeas gracias a la importante labor de Ramón Gómez de la Serna y Vicente Huidobro.

Las Vanguardias

No es posible marcar una clara diferencia entre Novecentismo y vanguardias. Las vanguardias o “ismos” se desarrollan en toda Europa durante la época de entreguerras como modo de protesta escandalosa y provocativa contra un mundo en decadencia, incapaz de evitar los desastres de la guerra. Los movimientos vanguardistas, a excepción del Surrealismo, desaparecen con la gran depresión de 1929. Las vanguardias aparecieron entre 1909 y 1930. El Surrealismo fue el movimiento vanguardista más influyente (sobre todo en la Generación del 27).

Características de las Vanguardias

Todas las vanguardias comparten una serie de características rigurosamente analizadas por Ortega y Gasset en su ensayo La deshumanización del arte. Son las siguientes:

  • Afán de originalidad.
  • Hermetismo.
  • Autosuficiencia.
  • Antisentimentalismo y antirromanticismo.
  • Creación de realidades nuevas.

Principales movimientos de Vanguardia

  • El Futurismo: apareció en 1909 promovido por Marinetti. Su postura rompedora hace que lleguen a sustituir los signos de puntuación por signos matemáticos.
  • El Cubismo: Apollinaire adaptó este movimiento pictórico a la literatura en los caligramas, poemas cuya disposición tipográfica también tiene valor expresivo.
  • El Dadaísmo: surgió en 1916 con Tristán Tzara. Incide en lo absurdo de la vida. El nombre proviene de dadá, balbuceo de un niño.
  • El Surrealismo: es el movimiento de vanguardia que más relevancia tuvo. Apareció en 1916 gracias a André Breton. Su objetivo fundamental era que el autor fuera capaz de liberar su expresión. Defienden la escritura automática.

La Vanguardia española: El Ultraísmo

El primer movimiento de la vanguardia española fue el Ultraísmo. Pretendía dar una mayor importancia a la imagen y a la metáfora. En la temática, se incorporaron aspectos del mundo moderno (el cine, el maquinismo, la técnica y la ciencia). Destacan dos libros: Imagen de Gerardo Diego y Hélices de Guillermo de la Torre.

Ramón Gómez de la Serna y las greguerías

Ramón Gómez de la Serna fue un gran difusor del arte nuevo con sus obras El concepto de la nueva literatura e Ismos. Creó la greguería, definida por él mismo como metáfora + humor. Tuvieron mucha importancia para la difusión de sus ideas las tertulias que él mismo organizaba en el café Pombo.

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