Introducción
INTRODUCCIÓN
Crónica de una muerte anunciada es la séptima novela del escritor colombiano Gabriel García Márquez. Publicada en 1981, está basada en un hecho real ocurrido en 1951 del que el propio autor fue testigo. El narrador, quien se presenta como un trasunto de G. Márquez, realiza una crónica periodística, donde relata las investigaciones y entrevistas que ha llevado a cabo para aclarar el asesinato de Santiago Nasar, eje en torno al que gira toda la novela. En un pequeño pueblo cercano a la costa de Colombia, se celebra por todo lo alto la boda entre el adinerado Bayardo San Román y la joven Ángela Vicario. Esa misma noche el novio devuelve a la novia a sus padres al encontrar que esta no es virgen. Los hermanos de Ángela, Pedro y Pablo Vicario, irán en busca de Santiago para matarlo y así vengar su honor sin que nadie logre impedirlo.
La técnica del realismo mágico
El realismo mágico es una corriente literaria y artística que nace a mediados del siglo XX y que florece con esplendor en la literatura hispanoamericana de los años sesenta y setenta. Consiste en presentar lo irreal o extraño como algo cotidiano y común. Por consiguiente, representa la coexistencia de dos mundos: el real y el mágico. Crónica de una muerte anunciada es una novela fundamentalmente realista:
→ Por un lado, porque la crónica se inscribe en el género periodístico, en el que se presentan hechos reales, aunque en este caso tamizados por la visión subjetiva de un narrador.
→ Por otro lado, la historia que narra se basa en un hecho real. No obstante, se puede apreciar que la obra está salpicada de elementos fantásticos. Ese realismo mágico se puede observar, por tanto, en los siguientes elementos:
1. Lo extraordinario en la normalidad de lo cotidiano
Se aprecia en multitud de detalles en la obra: -la aparición de un “pájaro fluorescente”, una especie de ánima sobre la iglesia del pueblo. -la mención del alma de la viuda de Xius, que parece haciendo todo lo posible para recuperar sus cachivaches y su casa después de muerta, tal y como cree el viudo. -Divina Flor tiene una alucinación, “una visión nítida” y ve a Santiago Nasar subiendo las escaleras hacia su dormitorio con un ramo de rosas. -La madre del narrador, Luisa Santiaga, tiene artes de adivinación y no necesita salir de casa para saber lo que ocurre: “Parecía tener hilos de comunicación secreta con la otra gente del pueblo”. -Plácida Linero es intérprete de sueños y nunca superará el no haber interpretado bien el sueño aciago de los árboles que le cuenta Santiago Nasar la mañana de su muerte.
2. Las constantes premoniciones de la muerte de Santiago Nasar
Es otro de los elementos en los que lo fantástico se introduce en la realidad. Son muchos los ejemplos: -Divina Flor siente la mano helada y pétrea de Santiago, como la mano de un muerto. -Hortensia Baute es la primera que llora la muerte de Santiago porque ve ensangrentados los cuchillos a la luz de la farola y todavía no lo habían matado. -Clotilde Armenta tiene la impresión de que va vestido de aluminio. “Ya parecía un fantasma”.
3. Cómo afecta la muerte de Santiago Nasar a todos los habitantes del pueblo
La muerte de Santiago dejará una huella imborrable a: -Plácida Linero, quien se quedará con un “dolor de cabeza eterno” -Pedro Vicario está once meses sin dormir. -Don Rogelio de la Flor, el marido de Clotilde Armenta, no sobrevive a la conmoción de la muerte de Santiago. -El coronel Lázaro Aponte que desayuna el hígado encebollado que le trae el policía Leandro Pornoy se hace vegetariano. -Hortensia Baute se echa desnuda a las calles. -Flora Miguel se fuga despechada con un teniente que la prostituye. 4.
La desmesura y lo hiperbólico es uno de los vehículos de lo fantástico
Hay muchos elementos de desmesura en la historia narrada: el persistente olor a Santiago, las proporciones de la boda de Ángela y Bayardo, la brutalidad en la descripción del asesinato (“Desesperado, Pablo Vicario le dio un tajo horizontal en el vientre, y los intestinos completos afloraron con una explosión”), la trayectoria de la bala que alcanza una estatua de la iglesia…).
Temas: El honor, el amor y el fatum
TEMAS EL HONOR, EL AMOR Y EL FATUM
A) HONOR Uno de los temas fundamentales de la novela es el honor, relacionado directamente con la violencia como única forma de restaurarlo. El rígido código del honor impuesto en la sociedad descrita en la novela determina los hechos ocurridos. Así, de acuerdo con las exigencias del código del honor la mujer debe llegar virgen al matrimonio como símbolo de pureza. Ángela Vicario contradice tal obligación, lo que supone una ofensa para ella y su familia, que solo es enmendada mediante la violencia. Así, como la defensa del honor familiar recae en los hombres, los hermanos Vicario, víctimas igualmente de la sociedad patriarcal impuesta, se ven obligados a matar al hombre que deshonró a su hermana. Es importante señalar que todo el pueblo acepta ese código sin cuestionarlo. Es más, la propia justicia y el abogado de los hermanos justifica el asesinato de Santiago Nasar y su absolución por ser un asunto de “defensa del honor”. En definitiva, Márquez realiza una crítica hacia el persistente machismo en la sociedad y en la educación. El pueblo juzga que Ángela Vicario profane los símbolos de pureza al casarse de blanco sin ser virgen y, sin embargo, no se cuestiona la existencia de un prostíbulo en el pueblo, regentado por María Alejandrina Cervantes que arrasó con la virginidad de toda la generación del narrador.
B) AMOR El amor, al igual que el honor, es el causante y desencadenante de los hechos narrados. De todas formas, los personajes de Crónica… tienen un concepto “utilitario” del amor. Todos los matrimonios son de conveniencia. Así, Santiago Nasar tiene concertado su matrimonio con Flora Miguel desde niño y las cartas que le escribe son cartas sin amor. También de conveniencia ha sido el matrimonio de sus padres. Ángela Vicario no quiere casarse con Bayardo San Román y argumenta que no lo quiere. Su madre zanjará el asunto con una frase rotunda: “También el amor se aprende”. De hecho, Bayardo no intenta enamorar a Ángela, sino que conquista a toda su familia a la que deja fascinada con su poder y su dinero. De todas formas, también observamos en la obra un amor irracional, obsesivo e incluso prohibido, como el de Santiago cuando se enamora perdidamente de María Alejandrina Cervantes, la prostituta del pueblo, cuando la conoce a los 15 años, o el amor secreto entre Ibrahim Nasar y Victoria Guzmán, la cocinera.
También es irracional la pasión que crecerá en Ángela hacia Bayardo una vez que este la rechaza.Es un amor que ocupará toda su vida recluida y que se manifiesta en las cartas que le escribe por las noches de las que no obtiene respuesta.
C) FATUM El tercer tema clave de Crónica de una muerte anunciada es el fatalismo, la imposibilidad de escapar de su propio destino o fatum. Santiago Nasar muere porque está destinado a morir y en ese destino hay una serie de circunstancias y casualidades que se conjugan para que el homicidio se lleve a cabo: -Ese día venía el obispo, por lo que Santiago Nasar sale vestido de blanco y no va armado. -Su madre cerrará la puerta en el último momento creyendo que Santiago está en casa. -Los personajes que le tienen que avisar no lo avisan, bien porque no lo encuentran, bien porque no se atreven. -Cristo Bedoya no sabe utilizar un arma cuando se enfrenta a los hermanos Vicario. -Santiago Nasar entra en casa de Flora Miguel, por lo que Cristo Bedoya no lo encuentra para avisarle.
El perspectivismo como técnica narrativa
EL PERSPECTIVISMO COMO TÉCNICA NARRATIVA
García Márquez se sirve de la técnica narrativa del perspectivismo para la construcción de Crónica de una muerte anunciada. La historia se presenta como un mosaico de voces y visiones diferentes que el lector debe relacionar e interpretar. Crónica… es relatada por un narrador amigo del protagonista quien, veintisiete años después del crimen, decide reconstruir los hechos. Es un narrador interno (homodiegético) y aporta el punto de vista de un personaje secundario, cuyo nombre no se menciona, aunque es evidente que es la contrafigura o trasunto de Márquez. Por otro lado, él mismo es testigo y, en parte, partícipe de la acción, aunque no recuerda nítidamente lo sucedido. Así, para esclarecer los hechos se sirve de: 1. sus propios recuerdos 2. la correspondencia que mantuvo con su madre 3. el informe de la autopsia 4. el sumario del caso 5. los testimonios de los testigos, a los que entrevista en distintos momentos. En este sentido, es un narrador complejo: -Cuando él se sirve de lo que recuerda, lo hace como un narrador omnisciente en tercera persona, lo que le permite distanciarse de los hechos.
-Cuando narra como un personaje-testigo y narrador a la vez, lo hace en 1ª persona, subjetivamente, sobre todo en las descripciones del carácter o de las acciones de los personajes. -Cuando plasma las conversaciones que él mantiene con los testigos se sirve del estilo directo, entre comillas. -En otras ocasiones cede directamente la palabra a los personajes reproduciendo sus diálogos. En cuanto al perspectivismo en sí, es tanta la polifonía que a veces los personajes coinciden en sus interpretaciones o recuerdos, pero en otras ocasiones se contradicen; la historia se presenta, entonces, como ambigua, llena de dudas, sobre todo en lo que se refiere a quién fue el que deshonró a Ángela o, por ejemplo, el clima del día, que varía de ser fúnebre a ser radiante, según los testimonios. En definitiva, es una obra compleja desde un punto de vista técnico, un rompecabezas que requiere de un lector activo que sea capaz de recomponer los hechos de acuerdo con las múltiples fuentes de información.
LOS PERSONAJES
No se puede decir que Crónica… sea una novela de personajes memorables, con un amplio desarrollo de caracteres. Así, la extensa cantidad de personajes contrasta con su condición de siluetas casi fantasmales. Lo que sabemos de ellas es, a veces, el recuerdo del narrador; en otros casos, lo que este les deja decir. En cuanto a la onomástica, parte de los nombres responde con precisión a la de familiares reales de García Márquez: sus hermanos (Margot, Jaime, etc.), su madre (Luisa Santiaga), su mujer (Mercedes Barcha). En otros casos, la mayoría, los nombres están alterados y los textos bíblicos parecen haber sido la fuente a la que el escritor ha acudido (Pedro, Pablo, Ángela, etc.) Entre los personajes distinguimos tres niveles:
1. LOS PROTAGONISTAS
Santiago Nasar: de origen árabe, hombre de 21 años que abandona los estudios de secundaria cuando su padre fallece y tiene que actuar como padre de familia y dirigir el Divino Rostro, una hacienda que su padre le dejó en herencia. Vive en su casa con su madre (Placida Linero), la sirvienta (Victoria Guzmán) y la hija de esta (Divina Flor).
Tenía pensado casarse con Flora Miguel. Es un personaje soñador, alegre, pacífico, formal. Aunque el narrador no cree que él haya sido el causante de la pérdida de la virginidad de Ángela Vicario, suscita opiniones encontradas de amor y de odio: machista y mujeriego, es también un joven religioso y buen hijo; su inocencia, su descuido y su debilidad le hacen perder la vida.
Bayardo San Román: ingeniero de trenes cuya edad ronda los treinta años. Bien vestido, galán con las mujeres, adinerado y orgulloso, causa admiración a su llegada al pueblo debido a su poder económico y a su extravagancia. No logrará vencer la vergüenza del ultraje y su gesto es la huida, la búsqueda de la soledad y el olvido. Al igual que Ángela, guarda en su interior esa desbordante pasión con la que G. Márquez suele dotar a algunos de sus personajes, lo que lo lleva a volver con ella muchos años después con sus cartas en la mano.
Ángela Vicario: es la menor en su familia, es figura clave en el conflicto que lleva a la muerte de Santiago Nasar. De humilde condición, Ángela se ve obligada a un matrimonio de conveniencia que favorecerá a su familia. A pesar de ser educada en la sumisión y en el recato, en su noche de bodas es devuelta por su reciente esposo al haber descubierto que no es virgen. Ante tal deshonra y tras la venganza de sus hermanos, se marchará del pueblo lejos y vivirá prácticamente “muerta en vida” dedicándose a la costura. Alejada del yugo familiar, experimenta una maduración y se vuelve una mujer ingeniosa, que acepta sin vergüenza lo ocurrido. Sin embargo, nunca llega a confesar con quién perdió la virginidad. Además, Ángela acaba por enamorarse de Bayardo San Román. A lo largo de más de dos décadas, le escribe cartas incansablemente rogándole su regreso, hasta que un día, ya vencido por el paso del tiempo, Bayardo vuelve para quedarse.
Pedro y Pablo Vicario: Los hermanos de Ángela son los encargados de devolver la honra perdida a la familia. En último término, son víctimas de la presión del código de honor del pueblo, puesto que sin llegar a desearlo del todo deben matar a Santiago. Así, parecen querer prolongar la ejecución del crimen y avisan a todo el pueblo de lo que van a hacer, tal vez que para que algo o alguien lo impida. Ambos conocen el oficio de matarife porque tienen un criadero de cerdos, son violentos, agresivos y machistas.
Después de su salida de la cárcel, sin muestras de arrepentimiento, Pedro, debido a su pasado militar, ingresará en las Fuerzas Armadas hasta que un día desaparece con su cu
adrilla. Pablo, el mayor, hereda el negocio familiar y se dedica a la orfebrería, además de casarse con su novia de toda la vida, Prudencia Cotes.
2. PERSONAJES TESTIGO
Función es ayudar y aportar información a la reconstrucción de los hechos como partícipes secundarios de lo ocurrido. Son muchos los personajes testigo y muy poca la información sobre ellos. De todas formas, en algunos con apenas unas pinceladas podemos intuir toda una vida, como es el caso de Victoria Guzmán. En ella podemos ver el rencor y odio hacia Santiago Nasar porque le recuerda a su padre Ibrahim Nasar, del que fue amante. El narrador-testigo se incluye en este grupo. Él se exculpa y se justifica, porque en el momento de los hechos está “en el regazo apostólico de María Alejandrina Cervantes”
3. EL PUEBLO COMO PERSONAJE COLECTIVO
Debemos destacar al pueblo en su conjunto como un personaje colectivo, representante de la ignorancia, de la pasividad y de la inacción, ya que es incapaz de impedir el crimen atroz. García Márquez, desde una perspectiva crítica, denuncia la moral enfermiza y el rígido código del honor del pueblo, que solo lleva la muerte y a la desgracia