Funciones del Lenguaje
El lenguaje, como herramienta fundamental de la comunicación humana, cumple diversas funciones según la intención del emisor y el contexto en el que se produce el acto comunicativo. A continuación, se describen las principales funciones del lenguaje:
- Función expresiva (o emotiva): Se centra en el emisor y su mundo interno. Predomina cuando la situación comunicativa se enfoca en la expresión de sentimientos, emociones, opiniones o estados de ánimo del emisor.
- Función referencial (o informativa): Se centra en el contenido del mensaje. Predomina cuando la situación comunicativa se enfoca en transmitir información objetiva sobre la realidad, hechos, ideas o conceptos.
- Función apelativa (o conativa): Se centra en el receptor. Predomina cuando la situación comunicativa busca influir en el receptor, captar su atención, obtener una respuesta o modificar su conducta.
Conversación y Discusión: Modalidades del Diálogo
El diálogo, como intercambio comunicativo entre dos o más personas, puede adoptar diferentes formas. Dos de las más comunes son la conversación y la discusión, cada una con características y propósitos distintos.
Elemento | Conversación | Discusión |
---|---|---|
Intención comunicativa | Intercambiar ideas, opiniones, experiencias. | Persuadir al otro de las ideas propias, debatir, argumentar. |
Convocatoria | Espontánea e informal. Surge de las necesidades comunicativas del momento. | Preparada y formal. Se invita a los participantes con una intención específica: debatir en torno a un tema determinado. |
Tema | Variedad ilimitada. Surge sin preparación ni acuerdo previo. | Se restringe a lo que se plantea en el programa o convocatoria. |
Tiempo | Se regula internamente a través de las intervenciones de los hablantes. | Se prepara y determina con anticipación. |
Intervenciones/Turnos de habla | Se producen espontáneamente. | Regulado externamente. Un moderador dirige y administra los turnos. |
Participantes | Hablantes. | Hablantes y moderador. |
Contexto Situacional: El Entorno de la Comunicación
Se denomina contexto situacional o contexto de situación al conjunto de datos y circunstancias que rodean el acto comunicativo y que son compartidos por el emisor y el receptor. Estos datos incluyen:
- Situación cultural y psicológica de los interlocutores.
- Experiencias y conocimientos previos de ambos.
- El entorno físico y temporal en el que se produce la comunicación.
Registros de Habla: Formalidad e Informalidad
El registro de habla se refiere a la variedad lingüística que utilizamos según el contexto y la relación con nuestro interlocutor. Se distinguen principalmente dos registros:
Registro Culto
- Formal: Vocabulario amplio, variado y preciso. Uso de términos abstractos. Formulación precisa de los enunciados. Oraciones completas y bien estructuradas. Se evita acortar palabras.
- Informal: Aunque mantiene un vocabulario relativamente amplio, puede ser menos preciso que el formal. Se permiten expresiones coloquiales y un tono más relajado.
Registro Inculto
- Formal: Aunque intenta apegarse a las normas, presenta un vocabulario limitado y poco variado. Puede haber errores gramaticales y de pronunciación.
- Informal: Vocabulario limitado y poco variado. Uso frecuente de muletillas y términos «comodín» (palabras con significado amplio que se usan para diversos conceptos, como «cosa» o «lata»). Formulación ambigua de los enunciados. Tendencia a acortar palabras (ley del mínimo esfuerzo). Uso abundante de gestos y recursos paraverbales.
Actos de Habla: La Acción en las Palabras
Al emitir un enunciado, realizamos un acto de habla, que implica no solo decir algo, sino también hacer algo con las palabras. En cada acto de habla podemos distinguir tres niveles:
- Acto locutivo: El contenido literal del mensaje, la información que se transmite.
- Acto ilocutivo: La intención del emisor al hablar, lo que quiere lograr en el receptor (preguntar, prometer, ordenar, etc.).
- Acto perlocutivo: Los efectos que provoca el mensaje en el receptor, las consecuencias de lo dicho (convencer, asustar, alegrar, etc.).
Intencionalidad en el Acto de Habla
Es fundamental ser conscientes de la intencionalidad de nuestros actos de habla y de los efectos que pueden generar en el receptor. Como hablantes, podemos dirigir nuestro discurso para lograr diferentes propósitos.
Tipos de Actos de Habla
- Acto de habla directo: La intención del emisor coincide con el contenido literal del enunciado. Es claro y preciso.
- Acto de habla indirecto: La intención del emisor no coincide con el contenido literal del enunciado. Es ambiguo y permite múltiples interpretaciones.
Condiciones para el Diálogo Auténtico
Para que el diálogo sea una herramienta de transformación y entendimiento, debe cumplir ciertas condiciones:
- Fe en el ser humano: Creer en su capacidad de crecer, crear y recrear.
- Amor, humildad y confianza: El diálogo es una relación horizontal basada en el respeto mutuo.
- Pensamiento crítico: Capacidad de percibir la realidad como un proceso en constante cambio, con el fin de humanizar a hombres y mujeres.
- Esperanza: Confianza en la capacidad de superación y perfeccionamiento del ser humano.
- Amor al mundo y al ser humano: El diálogo no admite arrogancia ni prepotencia.
La existencia humana, al ser comunicativa, se nutre del diálogo y la palabra. Existir humanamente es transformar el mundo a través del diálogo.
Discurso Oral: Componentes Verbales, Paraverbales y No Verbales
El discurso oral, como forma de comunicación hablada, se compone de tres tipos de elementos:
- Elementos verbales: Las palabras que utiliza el hablante y la sintaxis (estructura de las oraciones) que emplea para comunicar significados. Ejemplo: Martín dice: «Hoy es un día caluroso».
- Elementos paraverbales: Características de la voz que acompañan a los elementos verbales y aportan significado. Incluyen el volumen, la entonación, el ritmo, las pausas y los silencios.
- Elementos no verbales: Aspectos visuales y conductuales que acompañan al mensaje verbal y proporcionan información sobre el emisor y el contexto. Incluyen la postura, los gestos, la expresión facial, la mirada, la vestimenta y la distancia interpersonal.