Claves de la Generación del 27 y la Novela Española de Posguerra

La Generación del 27

Características Principales

  • Es una generación que no se alza contra nada.
  • Este grupo aúna tradición y vanguardia.
  • Rescatan autores y temas clásicos al mismo tiempo que abren las puertas a las vanguardias.
  • Su gran referente cultural y literario, aparte de otros muchos, fue Góngora, del que les apasiona la poesía pura.
  • Los principales temas serán el amor, el destino y la muerte. Aunque el tema que más tratarán en sus diferentes vertientes es la libertad. Así:
    • Destacan la ciudad como símbolo de libertad, impregnada de optimismo y modernidad.
    • El amor es la plenitud del individuo.
    • Las artes conllevan la libertad creadora.
    • La naturaleza es parte de la libertad del individuo.
  • Utilizan la imagen y la imagen visionaria, a través de la cual relacionan objetos por las emociones que despiertan.
  • Combinan la métrica tradicional (romance) con la más innovadora (verso libre).

Evolución Poética

Primera Etapa (Hasta 1929): Poesía Pura y Vanguardia

Etapa de juventud, coincidió con el esplendor de las vanguardias, aunque ellos no rechazaron nunca la tradición. Aúnan vanguardia y tradición. Cultivan la poesía pura.

Segunda Etapa (Hasta 1936): Surrealismo y Crisis

Autores que sufren crisis, como Lorca, se refugian en el surrealismo para plasmar los conflictos. Esto coincide con la situación crítica de la política española. Los autores permanecen callados.

Tercera Etapa (Desde 1936): Dispersión y Compromiso

La generación se desintegró como grupo. Uno fue asesinado (Lorca), otros se exiliaron (Salinas, Alberti…) y otros tomaron caminos diversos. El tema del compromiso estará presente.

Tendencias Poéticas

Tendencia a la Deshumanización: Poesía Pura y Vanguardista

En la primera etapa, debido a la influencia de los vanguardistas y Juan Ramón Jiménez, tienen un proceso de deshumanización poética, con una poesía sin adornos, usando solo la palabra para expresar belleza.

Poesía Pura

Elimina lo accesorio y lo superfluo, se queda con la expresión exacta de las cosas. Destacan en esta poesía Pedro Salinas en su primera etapa. Aunque el poeta magistral de esta poesía es Jorge Guillén. Emplea un lenguaje condensado y preciso. Sus temas más utilizados son: la afirmación del ser, la plenitud humana o el tiempo. Su obra Cántico es una obra que fue ampliando y en la que reflexiona sobre la realidad y su relación con el hombre.

Poesía Vanguardista

La explosión de las vanguardias en el siglo XX es determinante. De ellas incorporan diferentes temas y recursos, aunque no se decantaron por unos en particular. En España valoraron mucho la obra de Gómez de la Serna y sus greguerías.

  • Pedro Salinas cultivó el creacionismo y el futurismo.
  • Rafael Alberti, en Cal y canto, muestra la influencia gongorina.

Poesía Neopopular

Esta poesía vuelve claramente la vista a la poesía tradicional, tanto en la forma como en el contenido. Los componentes del grupo son instruidos y esto hace que conozcan y trabajen formas del pasado. Por ejemplo: canciones, villancicos y romances. De esta tendencia podemos destacar los títulos de la trilogía amorosa de Pedro Salinas: La voz a ti debida, Razón de amor y Largo lamento. En el Romancero gitano de Lorca se refleja una Andalucía gitana y donde toca temas como el amor y la muerte, teñidos de un sentimiento trágico. La métrica y los elementos tradicionales que utilizan se combinan con los recursos vanguardistas de carácter simbólico y metafórico.

  • Rafael Alberti y su Marinero en tierra. En el libro aparece la nostalgia por el mar de Cádiz y el paraíso perdido de la infancia. El ritmo lo logra con los recursos y formas de la poesía tradicional.

Poesía Clasicista

Rescata a los clásicos tales como Góngora, Garcilaso de la Vega, San Juan de la Cruz y Quevedo.

  • Gerardo Diego rescata el soneto.
  • Rafael Alberti publica Cal y canto, libro con influencia barroca.

Poesía Surrealista

El surrealismo fue el movimiento que más caló en los autores del 27. Utilizan la introspección y el onirismo para dar salida a los momentos que provocan dolor. El surrealismo se convierte en una forma de expresar: temores, preocupaciones, miedos y dolores. Los autores destacados de esta tendencia son:

  • Federico García Lorca: Escribió Poeta en Nueva York, obra surrealista realizada tras su viaje a esa ciudad. Los temas más frecuentes son la muerte, el hambre y la guerra. El estilo utilizado es distinto al de sus otros libros: hay mayor presencia de lo lírico y de motivos surrealistas, como las imágenes visionarias, el carácter irracional y los símbolos. Predomina el verso libre.
  • Rafael Alberti: Toda su obra se caracteriza por las tonalidades cromáticas y por el perfecto manejo del ritmo y la musicalidad. Escribió Sobre los ángeles (1929) en su etapa surrealista, motivado por una crisis espiritual y religiosa. Es una obra difícil, cercana al hermetismo. Las oposiciones y dicotomías caracterizan la obra (lo positivo frente a lo negativo).
  • Luis Cernuda: También despliega su etapa surrealista en su obra Un río, un amor, en él abundan las imágenes visionarias. O en Los placeres prohibidos, donde usa imágenes oníricas e incorpora poemas en prosa, creando un libro hermético.
  • Vicente Aleixandre: Se acerca al surrealismo con Espadas como labios y La destrucción o el amor. En ambos libros, el amor aparece como tema principal.

La Novela Española de Posguerra

La Novela en los Años 40

Novela Nacionalista y Realismo Tradicional

La novela plasmó la visión ideológica de los falangistas. En este tipo de novelas, el mundo se divide entre vencedores y vencidos. La familia era el soporte de esa sociedad, junto a la religión. Destacamos: La fiel infantería de Rafael García Serrano. Dentro de esta corriente hay una tendencia novelista que plasma la vida de la burguesía con sus valores y comportamientos, conocido como realismo tradicional: El argumento es extenso y las técnicas son tradicionales. Destacan: Juan Antonio de Zunzunegui con su obra Esa oscura desbandada e Ignacio Agustí con Ceniza fue árbol.

Novela Existencial

Son varios los críticos que consideran que no hay separación entre la novela existencial y la tremendista. Destacamos: Carmen Laforet con su novela Nada (1944). La protagonista (Andrea) se marcha con sus familiares a Barcelona para hacer estudios universitarios. Podemos ver personajes frustrados con situaciones personales catastróficas, con ambiente opresivo y con una visión pesimista de la realidad. Se considera una obra anticipadora del neorrealismo europeo de posguerra.

Novela Tremendista

Con La familia de Pascual Duarte (1942), Cela incorporó todo lo que hay en ello de terrible y sórdido. Con esta obra inauguró la corriente del tremendismo. La miseria, el hambre… es lo que convierte al protagonista en víctima en lugar de verdugo. El protagonista, un condenado a muerte, relata su vida llena de episodios terribles. La forma de memorias implica una visión temporal selectiva sobre los hechos vividos. Lo que cuenta es negativo; pretende demostrar que él no es malo, sino que sus circunstancias lo han llevado a cometer todo.

Novela del Exilio

Esta novela evoluciona de manera natural, continuando la más inmediata tradición de nuestras letras. Destacan:

  • Réquiem por un campesino español (Ramón J. Sender)
  • Memorias de Leticia Valle (Rosa Chacel)
  • Campos (Max Aub)

La Novela en los Años 50: Realismo Social y Objetivismo

Esta novela continuó la tradición del realismo de los 40. La novela debía informar al lector de lo que no aparecía en los medios de comunicación. Las novelas reflejan: la pobreza, el hambre, la injusticia, la alienación de los trabajadores, la frivolidad de las clases altas.

  • Se reduce el argumento y se limitan el tiempo y el espacio.
  • Los diálogos se aproximan al habla común.

La primera obra fue La colmena de Cela. El tema principal es la incertidumbre de los destinos humanos. La novela refleja el Madrid de 1942 con todas las miserias económicas y morales. El argumento se reduce al mínimo y los personajes giran en torno al sexo y el hambre. Además, hay varios temas como la humillación, la pobreza, el aburrimiento y la hipocresía. Dentro de esta tendencia hay un grupo de obras que se limitan a contar hechos, sin juzgarlos; esta tendencia se denomina objetivismo. El autor destacado es Rafael Sánchez Ferlosio con su obra El Jarama (1955). El relato nos ofrece una visión fatalista de la vida. Los personajes aceptan lo que ocurre sin rebelarse contra un futuro que parece estar predeterminado.

La Novela en los Años 60: Renovación Experimental

Esta década trae cambios fundamentales en la novela española.

Tiempo de silencio de Luis Martín-Santos

Supone un cambio renovador de la novela. El argumento sirve para realizar una radiografía de los diferentes grupos sociales del Madrid de los 40. El planteamiento crítico es social e individual. Cada personaje pertenece a un grupo social, pero tiene sus propios problemas.

  • Se abandona la técnica objetivista anterior y se utilizan recursos como el monólogo interior.
  • El lenguaje es culto y de elaboración literaria, con palabras creadas por adición (neologismos).
  • Usa metáforas llenas de ironía (por ejemplo, «soberbios alcázares de la miseria», refiriéndose a las chabolas).
  • Se ve en la obra el fatum de melodrama que encadena todos los acontecimientos hacia el dolor y el fracaso.

Señas de identidad de Juan Goytisolo

Introduce cambios fundamentales. La realidad se aborda desde distintos puntos de vista; transmite las vivencias individuales de los acontecimientos sociales. Cuenta la historia de un exiliado español que regresa para buscar sus raíces, pero descubre que está totalmente desarraigado.

Cinco horas con Mario de Miguel Delibes

Delibes realizó novelas en la línea renovadora. Su novela trata de una larga conversación (un monólogo interior) que mantiene Carmen toda la noche mientras vela a su marido.

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