1. Verbos irregulares y verbos defectivos

Se llaman verbos irregulares a los que tienen alguna variación en su forma con relación a los modelos regulares. Hay muchos verbos irregulares y algunos se encuentran entre los de más uso, por lo que es imprescindible conocer su conjugación. Las principales irregularidades que suelen presentarse son las siguientes:

• En el lexema:
  • Diptongación vocálica.
  • Alternancia de vocales.
  • Combinación de las dos anteriores.
• Desinencias:
  • Eliminación de la vocal final.
  • Eliminación de la vocal inicial.
  • Adición de una vocal.

Verbos defectivos

Son los verbos cuyo uso se limita a algunas formas de su conjugación. Se encuentran entre ellos:

• Los verbos que no se emplean en primera y segunda persona.
• Los verbos que designan fenómenos naturales que se usan en la tercera persona del singular.
• Los verbos que se emplean sólo en las formas cuya terminación empieza por -i.
• El verbo soler se usa en el presente y en el pretérito imperfecto.

2. Formas no personales

El infinitivo

Es la forma que el verbo adopta para funcionar como sustantivo. Tiene dos variantes: la simple y la compuesta. Usado como sustantivo puede desempeñar las mismas funciones que éste, ya que forma su propio sintagma nominal (SN). Incluso puede llevar sus propios determinantes y adjetivos. Como verbo, el infinitivo puede formar parte de fórmulas imperativas y también puede usarse para dar instrucciones. El infinitivo compuesto expresa aspecto perfecto o acabado.

El gerundio

Con esta forma el verbo puede funcionar como adverbio o como adjetivo. Presenta dos variantes: simple y compuesta. Como verbo aporta un significado de duración de la acción expresada por el verbo al que acompaña y su valor temporal es de simultaneidad o de anterioridad inmediata a esa acción. Con sus propios complementos puede formar oraciones compuestas adverbiales. El gerundio compuesto indica en oraciones subordinadas que la acción ya acabada es anterior a la del verbo principal.

El participio

Es la forma verbal que funciona como adjetivo. Sus terminaciones reciben morfemas de género y número. Como verbo sirve para crear formas compuestas, pero sin variación de género y número. Puede formar estructuras absolutas que funcionan como subordinadas adverbiales de tiempo. En los participios también se puede dar la irregularidad verbal.

3. Las perífrasis verbales

Consisten en una combinación de formas verbales que funcionan en conjunto como un solo verbo. Constan de un verbo conjugado, llamado auxiliar, que ha perdido parte de su significación, y de un segundo componente que es una forma no personal. En algunas perífrasis de infinitivo aparecen también una preposición o una conjugación. Tienen un significado unitario y sirven para expresar matices de modo o de aspecto. En el análisis se tienen que considerar como núcleo del predicado.

Hay tres clases de perífrasis según las formas no personales que las componen:

• A) Perífrasis con infinitivo: Dan a la acción un carácter orientado hacia el futuro. Pueden ser:
  • De obligación:
  • Incoativas: Señalan que la acción está a punto de producirse, que se inicia en un momento determinado o que se produce repentinamente.
  • De duda
  • De reiteración
  • Perfectivas: Señalan una acción acabada recientemente o una acción acabada que pudo alcanzar un límite culto.
• B) Perífrasis con gerundio: Tienden a indicar una acción en curso. Se forman con verbos como estar, andar, ir, venir o seguir.
• C) Perífrasis con participio: Señalan el resultado de la acción y se forman con verbos como tener, llevar o dejar.

La oración gramatical: Concepto y clases

Las oraciones son las unidades mínimas con significado completo. La oración presenta una estructura unitaria desde el punto de vista fónico, gramatical y de significado:

• Presenta una unidad de entonación: La oración está delimitada por dos pausas y acompañada por una curva de entonación. El tono final determina el modo de la oración enunciativa. Si preguntamos, el tonema final es ascendente y si exclamamos el final es un brusco descenso.
• Tiene una unidad estructural: La oración es autónoma e independiente, no depende de otros elementos.
• Transmite una comunicación de sentido completo en cada situación de habla concreta.

1. Clases de oraciones según la actitud del hablante

Cuando decimos una oración, además de transmitir su contenido con una determinada estructura, adoptamos una modalidad determinada al comunicarla. Según la actitud adoptada por el hablante, las oraciones pueden ser:

• Enunciativas: El contenido de la oración se presenta objetivamente. El modo verbal adecuado es el indicativo y se dividen en afirmativas y negativas.
• Exclamativas: El hablante participa de modo emocional en el contenido de la oración y eso se nota a través de la entonación, ya que cualquier oración se puede pronunciar como exclamativa. La variación de matices emocionales que transmite la expresión oral en la escritura sólo se indica mediante los signos de admiración, que indican una entonación diferente.
• Interrogativas: Se utilizan para hacer preguntas. Si el hablante pregunta sobre todo el contenido se llaman interrogativas totales y la respuesta que se espera obtener es sí o no. Cuando se pregunta sobre una parte del contenido se llaman interrogativas parciales.
• Imperativas o exhortativas: Indican un ruego o mandato.
• Optativas o desiderativas: Expresan el deseo de que lo que dice la oración ocurra o no.
• Dubitativas: El hablante siente como dudoso lo que dice la oración.

2. Sujeto de la oración

• Toda oración está formada por dos elementos constituyentes principales: el sujeto (sintagma nominal, SN) y el predicado (sintagma verbal, SV).
• Para que exista una oración necesitamos un verbo en forma personal: los morfemas incluidos en el verbo indican la persona y el número del sujeto.
• La presencia del sujeto en la oración tiene carácter opcional y se produce cuando se quiere precisar su referencia en la realidad y suele omitirse cuando está sobrentendido, es inequívoco o evidente.
• Lo mismo ocurre con los pronombres personales en función de sujeto. La primera y segunda persona pueden no aparecer, pues se identifican a través de los morfemas del verbo. Suelen aparecer cuando hay riesgo de confusión o por necesidades enfáticas o expresivas.
• Desde el punto de vista del significado, el sujeto suele definirse como aquello de lo que se predica algo.
• La distinción entre el sujeto agente de las oraciones activas y el sujeto paciente de las pasivas es de carácter semántico.
• El tercer tipo de sujeto es el causativo, que es la causa, pero no el agente real de la oración.