Características del Lenguaje Poético de Antonio Machado: Tradición y Simbolismo

El Lenguaje Poético de Antonio Machado: Entre la Tradición y la Innovación

En el «Retrato» de Campos de Castilla, Machado se declaraba enemigo de la nueva poesía: «mas no amo los afeites / de la actual cosmética», expresando su preferencia por una poesía de fuerza, no de exquisiteces. Machado fue un innovador libre, no adscrito a ninguna escuela. Innovó en lo formal, como en la métrica. Sin embargo, en lo espiritual fue tradicionalista, manteniendo su preocupación por el ser, el tiempo y la muerte, temas que abordó con resignación y una sinceridad conmovedora.

Machado publicaba su obra añadiendo a las ediciones anteriores las nuevas poesías, de manera que el lector tuviera siempre presente la totalidad de su creación. Así, la poesía se comporta como un ser vivo.

En todas sus composiciones se perciben las tres condiciones que, según Machado, debe reunir el poeta: ser cantor herido por la fatalidad, ser hombre de reflexión y, por último, cantar la canción del alma. Por ello, el poeta debe buscar una expresión justa, sencilla y natural de las ideas y los sentimientos, donde la inspiración poética brote del contacto con la naturaleza, y no del artificio del arte.

Su poética rechaza tanto el romanticismo sentimental como la estética barroca y conceptista, por considerar que conceden demasiado valor a la belleza formal. Sintió una profunda admiración por Rubén Darío, aunque se mostraba reticente frente a la estética modernista.

Para Machado, la poesía debe ser la expresión del sentimiento de todos los hombres, del pueblo, del corazón humano. Siente un gran amor por el pueblo, que es, según él, la verdadera fuente de la poesía; el folclore, a sus ojos, es la expresión misma del alma popular. Rechaza la retórica, como se puede observar en sus obras: «la palabra escrita me fatiga cuando no me recuerda la espontaneidad de la palabra hablada«.

Rasgos Esenciales del Lenguaje Poético de Machado

El Léxico

Su vocabulario predilecto se orienta hacia temas y sentimientos como:

  • a) El sentimiento de la vejez, melancolía y muerte: está obsesionado con la palabra viejo y con expresiones que aluden a la decadencia: parque mustio y viejo; viejas cadencias; la vieja angustia; la amapola marchita; una tarde cenicienta y mustia…
  • b) El sentimiento de la angustia y el hastío del poeta: hastío, melancolía, monotonía…
  • c) Los tonos sombríos: la plaza en sombra; viejo paredón sombrío; cerros cenicientos; cerros de plomo y de ceniza…
  • d) La luz del día en sus distintas tonalidades y momentos: una tarde clara; un alba pura; un huerto claro; al claro sol de estío; la tarde arrebolada; el iris en la luz…, lo cual convierte a Machado en un poeta de la sombra y de la luz, con un estilo que recuerda al modernismo.
  • e) El tiempo: los adverbios de tiempo contribuyen a dar temporalidad al verso, al situar las cosas en el tiempo: «Poeta ayer, hoy triste y pobre…». El contraste de ayer-hoy se asocia con mañana: «Hoy que será mañana, / del ayer que es / Todavía…». También emplea arcaísmos.
  • f) La alternancia entre el ensueño y la realidad: Las campanas sueñan; el soñoliento llano; el campo en sueños; y lo sobrenatural, con tres palabras reveladoras: mágico, hada, fantasma.
  • g) La humanización de las cosas y elementos que le rodean: el agua clara que reía. El empleo de diminutivos, exclamaciones e interrogaciones, que otorgan a sus versos un tono personal.

Los Procedimientos Estilísticos

Buscan sorprender, intrigar o fascinar al lector:

  • a) Repetición de palabras o expresiones: «Se vio a la lechuza / volar y volar».
  • b) Giros populares pertenecientes a la lengua familiar: «y lo mismo que nosotros / otros se jorobarán»; «Y van / las habas que es un primor».
  • c) Símbolos que forman el universo imaginario de Machado: el agua, el fuego, el aire, la tierra, la fuente, la galería, el camino, el espejo, el mar.
  • d) Metáforas como «liras de la primavera» o «verde humareda».
  • e) Personificaciones.

La Métrica

Estrofas con rimas internas y mezcla de ecos clásicos y populares.

  • a) Utiliza nueve variedades de versos: el octosílabo y el endecasílabo son los dos preferidos.
  • b) En cuanto a las estrofas, emplea el soneto, el cuarteto y la redondilla; pero también los pareados, las silvas o el romance. Asimismo, numerosas modalidades de cantares populares como coplas, cuartetas, soleares, seguidillas.

El poema típico del poeta es una combinación caprichosa de versos de siete y once sílabas, con una asonancia en los versos pares. No tiene estrofas, pero los versos aparecen en grupos para indicar las pausas. Suelen ser asonantes. Pero también empleó las rimas consonantes, sobre todo, en Campos de Castilla.

Machado es siempre el mismo, un poeta hondamente preocupado por reforzar la temporalidad de los elementos del verso.

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