Características de Lope de Vega

IDEOLOGÍA DEL TEATRO Barroco

En la comedia barroca predomina la acción sobre los distintos personajes que nos presentan, y la acción ha de desarrollarse siempre a buen ritmo , desde el principio hasta el final, sin dejar nunca de avanzar o de complicarse con nuevas intrigas. Es un teatro que tendrá que captar siempre la atención del espectador para que no sea lento y aburrida.

La ficción dramática está bien ordenada y cohesionada desde el principio entorno a la acción.

El tema de las comedias representa muchas veces verdades de la existencia humana (celos y amor, honra de los campesinos ricos, soberbia de los caballeros, el valor de la palabra, etc)

La norma fundamental es la justicia poética, es decir, todo el sistema de valores y castigos aplicados sistemáticamente a los personajes.. En la comedia a cada uno se acaba premiando o castigando según su comportamiento, porque el hombre es libre y puede decidir su destino.

La ideología que resulta triunfante es la que emana del poder establecido  es decir, de la monarquía absoluta y de la iglesia. En efecto la comedia refleja el sistema de la sociedad barroca, en donde el poder se sustenta en la alianza entre monarquía y nobleza.

El rey se sitúa siempre por encima del sistema, es una dignidad que emana directamente de Dios y es intocable. En las comedias no es posible rebelarse contra el rey, hay que acatar siempre sus ordenes. Son siempre condenadas en la ficción dramática cualquier situación que quiera romper con el poder establecido.

Otro conflicto que se da con frecuencia en las comedias es el que enfrenta  a un noble soberbio e injusto con un honrado labrador que sufre la afrenta del primero (Peribañez y el comendador de Ocaña)
O con el mismo pueblo entero (Fuenteovejuna)
. Pero siempre es el mismo rey quien valore la acción y ponga orden.

En Fuenteovejuna la trama se organiza en torno a 2 acciones: una principal, que se desarrolla en el pueblo y que protagonizan los labradores en su lucha con el comendador, y una secundaria , de carácter político, que narra la guerra entre los Reyes Católicos y la Orden de Calatrava que se puso al servicio de Juana la Beltraneja. En la guerra el comendador pierde y cuando vuelve al pueblo rompe la vara del alcalde Esteban y fuerza a Laurencia. El pueblo se subleva y mata al comendador. Finalmente llegan los reyes católicos a implantar justicia, el maestre de Calatrava se reconcilia con ellos y el pueblo queda sin castigo por falta de pruebas, mostrando su sumisión a los reyes, se manda a un nuevo comendador y sobre todo se respeta el orden social.

Si la monarquía es el pilar fundamental de la ideología en las comedias, la religión católica no lo es menos (ejemplos claros de esto último son “el burlador de Sevilla” de Tirso de Molina y “el caballero de Olmedo” de Lope de Vega)
. La figura de Don Juan, creada por Tirso de Molina y recreada en el XIX por Zorrilla (en Don Juan Tenorio) fue una de las importantes aportaciones de la literatura española a Europa (la ópera de Mozart, el Don Juan de Moliere o el de Lord Byron).

El Don Juan debía de existir ya en la imaginación popular antes de ser escrita. Lo que representa Don Juan es la ruptura de todas las normas y reglas preestablecidas, posiblemente uno de los sueños más antiguos del ser humano, una vida vivida en absoluta libertad. Curiosamente el desenlace de este personaje en las comedias se ha olvidado en el paso del mito a la realidad. Hoy ser un Don Juan es un halago. Es cierto que es una de las obras literarias que cualquier español conoce, independientemente de su nivel cultural o social, y aunque no la haya leído nunca.

En el mundo católico del Siglo XVI el libre albedrío del hombre era un dogma de fe, al contrario que para los protestantes. Sin embargo en el caballero de Olmedo, hay una contradicción con esto, en el sentido de que triunfa el destino sobre la libertad del individuo (como ocurría en el teatro griego)

CONCLUSIÓN


El teatro Barroco representa una autoafirmación ideológica de la clase dominante, hasta el punto de condicionar los textos que se escribían en aquella época.

EL TEATRO UN INSTRUMENTO PARA ADOCTRINAR Y EDUCAR

En el Siglo XVII hay un abandono del campo a las ciudades, de tal manera que éstas cada vez van creciendo más. Ahora es más fácil llegar a la gente con el teatro y en este sentido el teatro se va a utilizar para adoctrinar a la gente y para que defiendan el orden establecido.

Es un siglo de muchos cambios, en el que el poder no desaprovechó el potencial que tenía el teatro como medio propagandístico de su ideología. Escritores muy importantes como Lope de Vega o Calderón colaboraron en ese sentido con las pretensiones del poder (la monarquía y la iglesia). Ni siquiera tuvo una función educadora, si entendemos ésta como enseñar a pensar y a ser libres, pues su función prácticamente fue manipuladora. La gente se divertía, es verdad, pero no se instruía.

Esta función de adoctrinamiento no sólo era para el pueblo, también para los nobles y los ricos, pues el mensaje para ellos era que había que respetar también el orden establecido (monarquía e iglesia). El teatro era un gran aliado de la monarquía y del régimen del absolutismo de aquella época.

El teatro era dirigista, con el objetivo de contener cualquier innovación que pudiera poner en peligro el orden existente.

El teatro del Siglo XVIII también era dirigista, pero con un carácter más educativo, era un dirigismo reformador para preparar a la gente para nuevos modos de vida que iban a venir.

De todas las artes escénicas, el teatro era la que tenía mayor fuerza. La escena se utilizaba con un propósito adoctrinante,  para mostrar la grandeza del rey la legitimidad de la sociedad jerárquica.

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