Análisis Temático y Simbólico de la Obra de Lorca

Ejes Temáticos: El tema central de la obra es el enfrentamiento entre una moral autoritaria y rígida (Bernarda) y el deseo de libertad (Adela y M. Josefa). Hay otros motivos y temas secundarios: apasionada historia amorosa, censura de hipocresía y falsedad. Predomina el enfrentamiento entre dos actitudes vitales y dos ideologías: la actitud que defiende una forma de vida dominada por las apariencias (moral tradicional basada en autoritarismo) y la actitud que proclama la libertad para actuar.

Tema Central: El enfrentamiento entre moral rígida y deseo de libertad. Motivos o temas secundarios: amor sensual, búsqueda del varón (Adela y hermanas), vivencias auténticas e historias amorosas contadas en la obra; la hipocresía (obsesión por limpieza, miedo a murmuración, aparentar: Bernarda, Martirio); odio y envidia (odio hacia Bernarda, odio entre Adela y Martirio, odio y envidia hacia Angustias); injusticia social (mezquindad, desigualdad social, crueldad y humillación social, sumisión: Bernarda, Poncia, Mendiga, Criada); marginación de la mujer (condena de las mujeres de moral relajada, sumisión de las mujeres: Paca, hija de la librada Adela); y la honra (apoyada en la tradición, impone un comportamiento rígido, afectada por las relaciones de Adela, Poncia, Bernarda y las hijas de Bernarda).


Símbolos: Los pilares creadores en la producción dramática y lírica de Lorca. Llamamos símbolo a un elemento físico que alude a la experiencia psíquica interna. Un mismo símbolo puede aludir a más de un campo; así, por ejemplo, la luna se relaciona con la muerte, el erotismo, la fecundidad y la belleza, según el contexto en el que se encuentre.

Nombre y Posible Significado Simbólico

  • Bernarda: ‘con fuerza o empuje de oso’
  • Alba: ‘blanca’, que puede relacionarse con su obsesión por las apariencias.

Personajes y sus Significados

  • Angustias: Personaje triste, apagado, que suscita odios por su carácter.
  • Magdalena: Personaje que tiene tendencia a llorar.
  • Martirio: Fea, enferma, jorobada, acomplejada, que siempre se muestra agresiva.
  • Adela: Nombre que significa ‘de carácter noble’.
  • Poncia: Equivalente a Poncio Pilatos, que “se lavó las manos” y también es el ama, la gobernanta de la casa.

Los Objetos: El bastón de Bernarda simboliza el poder y la autoridad. Bernarda se sirve de él para imponer silencio y para golpear a sus hijas. Por eso, cuando Adela se enfrenta a su madre y rompe el bastón, proclama su victoria sobre la autoridad materna. El abanico de flores y el vestido verde de Adela son signos de su rebeldía, de su oposición a las normas emanadas del poder autoritario. El retrato de Pepe el Romano que tiene Angustias simboliza el deseo y la frustración de las hermanas. Es de Angustias, quien, en realidad, “ha perdido” ya al Romano; Martirio lo esconde porque ella no puede aspirar a conseguir el original. Las flores en el pelo y la oveja de M. Josefa son símbolos de rebeldía, libertad y amor. La oveja que lleva en sus brazos admite varias interpretaciones; puede entenderse como un signo de locura.

Los Colores: El contraste entre el negro y el blanco es muy revelador: el blanco se utiliza para simbolizar la vida, la alegría, el amor y la libertad; el negro para acentuar la tristeza, el odio, la represión y la muerte.

Los Decorados: Los tres actos coinciden en la sencillez y sobriedad de sus elementos. El espacio visible: la casa. La casa de Bernarda es la casa de la ley y de la rebelión, el lugar central de la obra, el verdadero protagonista. La casa simboliza el espacio cerrado, el lugar inhóspito en donde han de vivir recluidas, encerradas, las hijas de Bernarda. Por eso, la casa recibe denominaciones peyorativas en boca de los personajes: es un infierno para Angustias; es un convento y una casa de guerra para Poncia; y es un presidio para Adela. Dentro de la casa están las cadenas, el calor, el odio, el silencio, el negro de luto.

El Espacio Aludido: el mundo exterior. En la obra se alude en numerosas ocasiones al mundo exterior: el pueblo, el río, el olivar, el campo, lugares en los que se manifiesta el erotismo, según la poética lorquiana. La ventana y el corral constituyen los dos espacios aludidos de mayor interés. Ambos pertenecen al ámbito de la casa. Son los lugares de encuentro con el mundo exterior. El corral es el lugar del amor prohibido, de las relaciones eróticas condenadas por la moral. La ventana es para el amor de los novios permitidos y es allí donde tienen lugar las conversaciones entre Angustias y Pepe y donde esperó Martirio inútilmente a Enrique Humanes. Las mujeres acuden a mirar por la ventana en dos ocasiones. Así, a través de la ventana se establece el contacto con el mundo exterior y con el hombre.

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