Eduardo Mendoza

Biografía

Nació en Barcelona en 1943. Estudió Derecho, trabajó de pasante en un despacho de abogados de Barcelona y de traductor para las Naciones Unidas. En cuanto a sus obras, fundamentalmente ha escrito novelas.

Obras

• La verdad sobre el caso Savolta (1975). Situada en 1917, es un estudio de la vida en Barcelona bajo el pretexto de novela histórica.
• El misterio de la cripta embrujada (1979)
• El laberinto de las aceitunas (1982)

Novelas policiacas de tono humorístico. En ellas aparece el personaje del pícaro y una visión deformadora de la realidad.

• La ciudad de los prodigios (1986) ambientada en el siglo XIX y XX durante los preparativos de las dos exposiciones universales de Barcelona.
• Sin noticias de Gurb (1991) diario escrito por un extraterrestre en la Barcelona antes de las Olimpiadas.
• La aventura del tocador de señoras (2001) vuelve el detective expulsado del manicomio.
• El asombroso viaje de Pomponio Flato (2008)
• El enredo de la bolsa y la vida (2012)

Eduardo Mendoza se define deudor de los autores clásicos españoles, sobre todo de Cervantes y el Lazarillo de Tormes.

1. La verdad sobre el caso Savolta

Considerada por muchos como la precursora del cambio que daría la sociedad española y como la primera novela de la transición democrática, la novela narra el panorama de las luchas sindicales de principios del siglo XX, mostrando la realidad social, cultural y económica de la Barcelona de la época.

Argumento

Durante la Primera Guerra Mundial, la masiva venta de armas había favorecido la prosperidad de la industria armamentística en los países neutrales. En septiembre de 1917, Paul André Lepprince, directivo de la empresa Savolta (dedicada a fabricar armas en Barcelona) acompañado por el joven Javier Miranda, al que había puesto a su disposición el señor Cortabanyes, contratan a dos matones para que escarmienten a los cabecillas de una huelga. Diez obreros son apaleados y la huelga fracasa, solo un curioso y marginal periodista (Domingo Pajarito de Soto) denuncia los hechos en un panfleto anarquista.

Decidido a callar las acusaciones de Pajarito, Lepprince le contrata para que realice con plena libertad una investigación sobre la empresa.

Mientras dura esta farsa, Miranda intima con Pajarito y también con su mujer, Teresa (quien busca desesperada el amor del joven para salir de su miserable situación).

Cerca de la Navidad, engañado por su esposa y utilizado por Lepprince, Pajarito muere bajo las ruedas de un coche mientras regresaba a casa borracho. A los pocos días, Savolta es asesinado a tiros.

Se encarga del caso el comisario Vázquez y como primera medida se ejecuta a varios anarquistas. Pero los atentados continúan: muere a balazos Claudedeu, jefe del personal de la empresa; Lepprince logra escapar ileso de un grupo de terroristas.

El tiempo pasa, y a causa de la entrada en la guerra de los americanos y del final de la misma, la empresa cae en bancarrota.

Lepprince, que se ha casado con la hija de Savolta, Rosa María, y ocupa el puesto más alto, tiene problemas con un importante accionista, Pere Parells.

El comisario Vázquez sigue los pasos de Miranda y de Lepprince ya que unas confidencias de un extravagante personaje que dará con sus huesos en el psiquiátrico (Nemesio Cabra) les propone como sospechosos de las muertes de Pajarito y Savolta.

Lepprince consigue que el comisario sea trasladado a Tetuán y más tarde a Guinea. Javier Miranda, siguiendo las indicaciones de Lepprince y como medio de ascenso social, acepta casarse con María Coral, aunque desconoce que ésta es amante del empresario.

María Coral es una joven gitana artista que Miranda y Lepprince conocieron al contratar a los matones que debían frenar la huelga.

El matrimonio entre ambos es un desastre; después de confesar su relación con Lepprince, intenta suicidarse.

Todos los esfuerzos de Lepprince para arreglar la crisis de la empresa son infructuosos. Hundido, hace que Miranda persiga a su guardaespaldas, Max, que se ha fugado con María Coral.

La fábrica se incendia con Lepprince dentro sin que puedan determinarse las causas.

El comisario Vázquez, que también morirá más tarde en extrañas circunstancias, descubre a Miranda los motivos de tantas muertes, afirmando que tenían otras conexiones más intrincadas que las aparentes.

Lepprince mató a Pajarito, Savolta y Parells porque habían descubierto que subministraba clandestinamente armas al ejército alemán en unión de un espía, Max.

Miranda y María Coral se instalan en EEUU.

Antes de morir, Lepprince, con el ánimo de dejar algún dinero a su mujer, había contratado en secreto una póliza de seguros americana que cubriera los riesgos de la fábrica. Miranda era el encargado de cobrarla y hacerla llegar a Rosa María Savolta. Cumpliendo este cometido, Javier es llevado a juicio porque la compañía aseguradora no quiere pagar. «Del juicio y mis declaraciones han brotado todos esos recuerdos», dice Miranda.