El Teatro Español en la Primera Mitad del Siglo XX
El teatro, como género literario, está intrínsecamente ligado a su representación. Esto implica que las obras deben ser del agrado del público y, a menudo, de las autoridades. Esta condición generó una división entre el teatro innovador y el que triunfaba en los escenarios.
El Teatro Convencional y sus Representantes
Destaca José Echegaray, cuyo teatro, convencional y poco crítico, se alejaba del modernismo, lo que le valió el desprecio de jóvenes y críticos. Jacinto Benavente siguió la línea de Echegaray, cultivando la comedia burguesa. Su primera obra, *El nido ajeno*, que trataba sobre la situación de la mujer casada, no tuvo buena acogida, por lo que suavizó su estilo, haciéndolo más amable y menos crítico. Obras destacadas incluyen *Rosas de otoño* y *La noche del sábado*.
En el teatro en verso, sobresalen el modernista Francisco Villaespesa, Eduardo Marquina (con obras como *En Flandes se ha puesto el sol* y *Las hijas del Cid*) y Manuel y Antonio Machado (*Juan de Maraña*).
El Teatro Cómico y sus Subgéneros
El teatro cómico se desarrolló en dos subgéneros principales: la comedia costumbrista y el sainete. Los hermanos Serafín y Joaquín Álvarez Quintero destacaron en este ámbito, con obras como *Ganas de reñir* y *El patio*. Carlos Arniches cultivó el sainete regionalista y desarrolló la «comedia grotesca» (*La señorita de Trevélez*). También es fundamental mencionar a Pedro Muñoz Seca y su obra *La venganza de Don Mendo*.
El Teatro Innovador: Modernismo, Generación del 98 y Vanguardia
Este teatro, crítico con la sociedad y seguidor de las corrientes artísticas del momento, estuvo marcado por el Modernismo y la Generación del 98. Sin embargo, tuvo dificultades para encontrar espacios de representación. Se trataba de un teatro de ideas, con un diálogo denso. Azorín creó un teatro irreal y simbólico, centrado en el paso del tiempo y la muerte. Jacinto Grau, aunque reconocido en Europa, no tuvo el mismo éxito en España. El vanguardista por excelencia fue Ramón Gómez de la Serna, con métodos expresivos que chocaban con la época.
Pero el más destacado es, sin duda, Ramón María del Valle-Inclán.
Ramón María del Valle-Inclán y el Esperpento
Notas Biográficas
Nacido en 1866 en Villanueva de Arosa (Pontevedra), estudió Derecho y trabajó como periodista en México. Su imagen excéntrica reflejaba su inconformidad con la época. Concebía la ideología como una opción estética, declarándose carlista para destacar su convencionalismo y materialismo.
Obra y Evolución: El Esperpento
Sus raíces se encuentran en el esteticismo, evolucionando hacia el esperpento, su gran aportación al teatro. En 1920, publica *Luces de Bohemia*, la primera obra de este género, que mezcla lo burlesco y lo trágico, presentando personajes marginales o grotescos y una visión disconforme con la realidad. Valle-Inclán se veía a sí mismo enraizado con Quevedo o Góngora.
*Luces de Bohemia* narra la última noche de Max Estrella. El capítulo XII, donde Max y su amigo Latino de Hispalis dialogan, recoge la teoría del esperpento. Esta técnica se basa en la deformación de los elementos de la obra, principalmente los personajes, a través de la animalización, cosificación y muñequización. La obra tiene una clara intención provocadora, introduciendo elementos que dificultan su representación.
El Teatro de la Generación del 27
Tres características definen este teatro:
- Depuración del teatro poético.
- Incorporación de las formas de vanguardia.
- Propósito de acercar el teatro al pueblo.
Algunos de los autores más sobresalientes de este período son:
- Pedro Salinas: *El dictador*.
- Rafael Alberti: Antes de la guerra, escribió *El hombre deshabitado* (subrealista) y *Fermín Galán* (literatura comprometida).
- Miguel Hernández: Teatro social con aires de Lope de Vega, destacando *El labrador de más aire*. Utilizaba valores republicanos para divulgar ideas.
- Alejandro Casona: Combinación de humor y lirismo en su obra dramática, como en *Nuestra Natacha*.
- Max Aub: Comedias de vanguardia con temas como la incomprensión y la incomunicación.
Federico García Lorca: Un Teatro para Reflexionar
Notas Biográficas
Nacido en Fuente Vaqueros (Granada), se licenció en Derecho y Filosofía y Letras. En Madrid, entró en contacto con el ambiente artístico e intelectual de la época, centrándose en la creación literaria.
Concepción del Teatro
Lorca consideraba fundamental que el teatro hiciera reflexionar al público. Definía el teatro como «la poesía que se levanta del libro y se hace humana». Criticaba la privatización del teatro, abogando por una protección gubernamental. Distinguía dos facetas: la humana y la estética. Tenía una idea didáctica del teatro, considerándolo una «escuela de llanto y risa», con un enfoque social o popular.
Etapas de la Dramaturgia Lorquiana
- Inicial (Años 20): Experimentación formal y temática. Búsqueda de un estilo personal. *El maleficio de la mariposa*, *Mariana Pineda*.
- Vanguardista (Primeros años de la década de los 30): Crisis vital y estética que le lleva a un enfoque surrealista. *El público*.
- Plenitud: Rigor estético y sentido popular que conjuga con el éxito del público. *Bodas de sangre* (basada en un hecho real, llena de presagios de la muerte, con elementos líricos y populares), *Yerma* (drama de una mujer condenada a la infecundidad), *Doña Rosita la soltera o el lenguaje de las flores* (temas de esterilidad y frustración, combinando lo patético y lo ridículo) y *La casa de Bernarda Alba*.