Literatura Española: Siglos XVIII y XIX – Ilustración, Romanticismo y Realismo

Literatura Española: Siglos XVIII y XIX

Siglo XVIII: La Ilustración

La literatura del siglo XVIII no se caracteriza por un gran esplendor literario. Prevalecen el pensamiento y la investigación, el género ensayístico de carácter didáctico, crítico o erudito, y un conjunto de reglas, normas y propósitos educativos, lo que disminuye el interés por la creación literaria.

Tendencias del Siglo XVIII

Primera Mitad del Siglo XVIII
  • Literatura Post-Barroca: Literatura decadente.
  • Prosa Didáctica y Erudita: Destacan Feijoo y Luzán.

Feijoo, autor de «Teatro Crítico Universal» y «Cartas Eruditas», destaca por:

  1. Finalidad enciclopédica.
  2. Actitud crítica: Escribe contra los errores, supersticiones y prejuicios de la época, manifestando un afán didáctico y una actitud experimental.

Luzán, con su «Poética», propone una serie de reglas y normas para la creación en los géneros lírico y dramático (teatro).

Segunda Mitad del Siglo XVIII

Neoclasicismo: Es la tendencia típica de la época, aunque llega tardíamente. Se manifiesta en una literatura de tipo didáctico y erudito utilizada en el ensayo, y en una literatura de creación.

Literatura Satírica y Didáctica

Destacan Jovellanos, quien ocupó distintos cargos públicos hasta ser ministro de justicia y participó en las reformas ilustradas y en la política, escribiendo obras ensayísticas para elevar la educación cultural del país y mejorar los espectáculos. Entre sus títulos más importantes se encuentran «Memoria para el arreglo de la policía de espectáculos» e «Informe sobre el expediente de la Ley Agraria».

También destaca Cadalso, autor de «Cartas Marruecas», donde, mediante el género epistolar, revisa temas preocupantes de la sociedad española del momento, como la historia del imperio español y la libertad de las mujeres.

Literatura de Erudición e Investigación Histórica

Se agrupan los autores encargados de investigar en archivos y documentos sobre obras, y aquellos que escriben sobre retórica, crítica literaria, historia y filología.

Literatura de Creación

Literatura impregnada por el didactismo y condicionada por las normas y reglas.

  • Género Satírico-Novelesco: Destaca la figura del Padre Isla con su obra «Fray Gerundio de Campazas, alias Zotes», una crítica contra la oratoria sagrada.
  • Teatro: Se rige por la regla de las tres unidades (unidad de acción, tiempo y lugar), unidad de estilo y separación de géneros. Destacan las comedias de Moratín, como «El sí de las niñas», cuyo tema principal es la autoridad mal ejercida por parte de padres y tutores sobre las mujeres jóvenes, y trata del matrimonio de conveniencia. El pensamiento ilustrado se hace evidente en el triunfo de la virtud, la razón y la obediencia, y en una fina ironía que envuelve los diálogos, la descripción y el planteamiento de los personajes. Otras obras importantes son «El viejo y la niña» y «La comedia nueva o el café».
  • Lírica: Se pueden destacar tres líneas:
    1. Poesía de tema bucólico-pastoril dentro de la línea anacreóntica, cuyo autor más importante es Meléndez Valdés.
    2. Poesía didáctica que busca enseñar deleitando, manifestada en las fábulas. Destacan «Fábulas literarias» y «Fábulas morales».
    3. Poesía cívica y filosófica: Tiene su origen en la Escuela de Salamanca, donde se ve el contenido moral y filosófico, el trasfondo ideológico de los ilustrados y la exaltación del sentimiento (Jovellanos, Moratín).
  • Prerromanticismo: A finales del siglo XVIII y comienzos del XIX, se manifiesta básicamente en poesía. Destacan Meléndez Valdés y José Cadalso con «Noches Lúgubres», caracterizada por:
    • La presencia del sentimiento y el tono melancólico.
    • La presencia de un paisaje turbulento y agitado.
  • Tendencia Tradicional: Se plasma en el teatro popular de corte costumbrista, en los sainetes (piezas breves, humorísticas, que reflejan las costumbres, los tipos y la vida cotidiana. El lenguaje es sencillo y de léxico popular, como «Manolo»).

Siglo XIX en España

Etapas del Siglo XIX

  1. Primera Etapa: El periodo absolutista de Fernando VII, desde la Guerra de la Independencia hasta la muerte de Fernando VII, caracterizado por la falta de libertades. Los liberales progresistas se oponen al rey en dos ocasiones (en 1812, promulgando la primera Constitución española, y en 1820 con el Trienio Liberal gracias al levantamiento militar del General Riego). En la literatura aparece un romanticismo de matiz conservador y tradicionalista.
  2. Segunda Etapa: La minoría de Isabel II da paso a un régimen liberal, pero continúa la oposición entre conservadores y liberales. En la literatura aparece el romanticismo liberal, el más exaltado por la vuelta de los intelectuales.
  3. Tercera Etapa: Reinado de Isabel II. La literatura es romántica, pero aparece también el posromanticismo y comienza el realismo.
  4. Cuarta Etapa: El Sexenio Revolucionario. Aparece la Primera República Española, una etapa de grandes conflictos sociales y del movimiento obrero. En literatura se desarrolla el realismo.
  5. Quinta Etapa: La etapa de la Restauración, un periodo más moderado de menos agitación política, con la burguesía y la clase obrera. Triunfa el realismo.

Inestabilidad Política y Social

A nivel político, en el siglo XIX hay una lucha por el poder entre conservadores y progresistas. Otros elementos de tensión política son las guerras carlistas. La inestabilidad social se debe a factores económicos e ideológicos. La clase obrera reivindica sus derechos frente a una burguesía cada vez más poderosa. El proletariado, para defender esos derechos, se organiza en movimientos obreros, debido a sus malas condiciones económicas y a la influencia de ideologías de izquierdas y anarquistas. Todo esto provocó manifestaciones sociales.

Movimientos Culturales del Siglo XIX

  • Primera Mitad: El romanticismo aparece debido a tres motivos básicos:
    1. La influencia del prerromanticismo.
    2. Las influencias filosóficas e ideológicas europeas que resaltaban la importancia de la naturaleza libre (el paisaje).
    3. La insatisfacción de los artistas ante la opresión de la «razón» y su insatisfacción por una realidad mercantilista.

    El romanticismo valora el cristianismo, lo tradicional, etc. En 1833 aparece el romanticismo liberal, con dos rasgos básicos: se valora al individuo por encima de todo, dando cabida a una expresión libre de sentimientos e imaginación, y se valora la naturaleza en libertad.

  • Segunda Mitad: Junto al posromanticismo aparece el realismo, debido a los siguientes motivos: una burguesía acomodada más pendiente de la realidad material, y la aparición del proletariado preocupado por sus derechos y por la realidad material. El realismo tiene dos rasgos básicos: valora la realidad social y material, y valora la psicología de los personajes.

El Romanticismo en España

Características del Romanticismo

  1. El Individualismo: Supone la afirmación del «yo», la exaltación de la personalidad del individuo mediante la libre expresión de los sentimientos, emociones e imaginación.
    • El autor expresa sus sentimientos amorosos, pero también aparecen la frustración, el pesimismo, la angustia y la melancolía.
    • Mediante la imaginación o fantasía, el autor se evade de la realidad que no le gusta y se va hacia un mundo ideal con tres formas:
      • En el espacio: Aparecen lugares exóticos (nórdicos, orientales).
      • En el tiempo: Crea mundos y ambientes medievales a través de su imaginación.
      • Hacia un mundo interior: El autor se recrea en un mundo interior, inaccesible y cargado de misterio, al que se aproxima por la intuición (se encuentran manifestaciones del romanticismo).
  2. La Actitud Idealista en el Plano Social: Destacan tres aspectos: el afán de justicia social, la defensa de la libertad individual en un mundo sin fronteras ni normas, y la valoración de los nacionalismos.
  3. La Presencia de una Naturaleza Asociada a su Estado de Ánimo: Así encontramos:
    • Naturaleza turbulenta: Altas cumbres, selvas, un mar tempestuoso, tormentas…
    • Ambientes lúgubres, solitarios o de misterio: Cementerios, paisajes nocturnos, ruinas…
  4. Libertad de Expresión Frente a la Normativa de la Etapa Anterior: Supone una libertad de creación, mezcla diferentes elementos, como géneros, estilos, estrofas y metros variados.

Siglo XVIII: La Ilustración (Repetición)

La literatura del siglo XVIII no se caracteriza por un gran esplendor literario. Prevalecen el pensamiento y la investigación, el género ensayístico de carácter didáctico, crítico o erudito, y un conjunto de reglas, normas y propósitos educativos, lo que disminuye el interés por la creación literaria.

Tendencias del Siglo XVIII (Repetición)

Primera Mitad del Siglo XVIII (Repetición)
  • Literatura Post-Barroca: Literatura decadente.
  • Prosa Didáctica y Erudita: Destacan Feijoo y Luzán.

Feijoo, autor de «Teatro Crítico Universal» y «Cartas Eruditas», destaca por:

  1. Finalidad enciclopédica.
  2. Actitud crítica: Escribe contra los errores, supersticiones y prejuicios de la época, manifestando un afán didáctico y una actitud experimental.

Luzán, con su «Poética», propone una serie de reglas y normas para la creación en los géneros lírico y dramático (teatro).

Segunda Mitad del Siglo XVIII (Repetición)

Neoclasicismo: Es la tendencia típica de la época, aunque llega tardíamente. Se manifiesta en una literatura de tipo didáctico y erudito utilizada en el ensayo, y en una literatura de creación.

Literatura Satírica y Didáctica (Repetición)

Destacan Jovellanos, quien ocupó distintos cargos públicos hasta ser ministro de justicia y participó en las reformas ilustradas y en la política, escribiendo obras ensayísticas para elevar la educación cultural del país y mejorar los espectáculos. Entre sus títulos más importantes se encuentran «Memoria para el arreglo de la policía de espectáculos» e «Informe sobre el expediente de la Ley Agraria».

También destaca Cadalso, autor de «Cartas Marruecas», donde, mediante el género epistolar, revisa temas preocupantes de la sociedad española del momento, como la historia del imperio español y la libertad de las mujeres.

Literatura de Erudición e Investigación Histórica (Repetición)

Se agrupan los autores encargados de investigar en archivos y documentos sobre obras, y aquellos que escriben sobre retórica, crítica literaria, historia y filología.

Literatura de Creación (Repetición)

Literatura impregnada por el didactismo y condicionada por las normas y reglas.

  • Género Satírico-Novelesco: Destaca la figura del Padre Isla con su obra «Fray Gerundio de Campazas, alias Zotes», una crítica contra la oratoria sagrada.
  • Teatro: Se rige por la regla de las tres unidades (unidad de acción, tiempo y lugar), unidad de estilo y separación de géneros. Destacan las comedias de Moratín, como «El sí de las niñas», cuyo tema principal es la autoridad mal ejercida por parte de padres y tutores sobre las mujeres jóvenes, y trata del matrimonio de conveniencia. El pensamiento ilustrado se hace evidente en el triunfo de la virtud, la razón y la obediencia, y en una fina ironía que envuelve los diálogos, la descripción y el planteamiento de los personajes. Otras obras importantes son «El viejo y la niña» y «La comedia nueva o el café».
  • Lírica: Se pueden destacar tres líneas:
    1. Poesía de tema bucólico-pastoril dentro de la línea anacreóntica, cuyo autor más importante es Meléndez Valdés.
    2. Poesía didáctica que busca enseñar deleitando, manifestada en las fábulas. Destacan «Fábulas literarias» y «Fábulas morales».
    3. Poesía cívica y filosófica: Tiene su origen en la Escuela de Salamanca, donde se ve el contenido moral y filosófico, el trasfondo ideológico de los ilustrados y la exaltación del sentimiento (Jovellanos, Moratín).
  • Prerromanticismo: A finales del siglo XVIII y comienzos del XIX, se manifiesta básicamente en poesía. Destacan Meléndez Valdés y José Cadalso con «Noches Lúgubres», caracterizada por:
    • La presencia del sentimiento y el tono melancólico.
    • La presencia de un paisaje turbulento y agitado.
  • Tendencia Tradicional: Se plasma en el teatro popular de corte costumbrista, en los sainetes (piezas breves, humorísticas, que reflejan las costumbres, los tipos y la vida cotidiana. El lenguaje es sencillo y de léxico popular, como «Manolo»).

La Ilustración, el Siglo XVIII: El Marco Histórico, Social y Cultural

El siglo XVIII, marcado en toda Europa por la Ilustración, es en España una época de transformaciones sociales, científicas y culturales. Se inicia con un cambio de dinastía, se instaura la dinastía borbónica y con ella las nuevas ideas renovadoras francesas. Los Borbones adoptaron el despotismo ilustrado: intentaron un reformismo luchando contra el estado de decadencia y atraso en que se encontraba el país.

Las Reformas Ilustradas en España

  • Reformas Políticas: Centralización de la administración y fortalecimiento del poder real.
  • Reformas Económicas: Encaminadas al desarrollo industrial y al ascenso de la clase media y desarrollo de la agricultura.
  • Reformas Sociales: Tendencias a cambiar el nivel de vida y a la búsqueda del bienestar social.
  • Reformas Culturales: Dirigidas a la gran preocupación de los ilustrados, la educación. Para la reforma de la enseñanza pública se creó una red de academias, como la Real Academia Española.

Rasgos o Propuestas de la Ilustración

  1. Se valora la razón como guía para el conocimiento y el progreso (en contra del pensamiento teológico).
  2. Se valora la libre crítica o independencia intelectual para descubrir la verdad (en contra del dogmatismo anterior).
  3. Se valora la investigación y la búsqueda del conocimiento para el desarrollo científico en base al experimentalismo y para el desarrollo de las relaciones humanas.
  4. Se promueve el didactismo, es decir, la educación o enseñanza pública desde arriba.

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