El Realismo y el Naturalismo en la Literatura Española
Este movimiento cultural y artístico del siglo XIX surgió en Europa cuando aún el Romanticismo pervivía en la vida literaria y política, y defendía la representación de la realidad de una forma verdadera y lo más exacta posible. En la segunda mitad del siglo XIX, el Realismo como movimiento llega a España desde Francia por la influencia de autores como Balzac o Flaubert. El género que más destaca en este período es la novela.
Características del Realismo
- Búsqueda de verosimilitud.
- Uso de personajes reales.
- Temática social.
- Marco temporal.
- Estructura de inmediatez.
- Observación y documentación exhaustiva.
- Estructura lineal.
- Descripciones minuciosas.
- Estilo marcado por los abundantes contrastes.
- Diálogos ágiles y próximos a la lengua de la conversación.
- Narrador de 1ª o 3ª persona (omnisciente).
- Estilo indirecto libre.
- Monólogo interior.
Dentro de este género, cabe destacar la novela costumbrista, que pretende mostrar las diferentes formas de vida, los paisajes y los diferentes estratos sociales como elemento troncal de su estructura. Autores como Fernán Caballero con su obra más importante “La Gaviota”, Pedro Antonio de Alarcón “El sombrero de tres picos” Juan Valera, con “Pepita Jiménez” en la que hace un exhaustivo análisis psicológico de sus personajes, especialmente los femeninos, son los autores más representativos.
Principales Autores del Realismo
El Realismo como movimiento propiamente dicho tiene dos representantes indiscutibles: Galdós y Clarín:
- Benito Pérez Galdós: Su obra debe dividirse en los Episodios Nacionales. Dentro de sus novelas, se distinguen tres etapas:
- Novelas de la primera época que tienen una gran carga política, como Doña Perfecta.
- Novelas contemporáneas, que contienen un retrato genial de la sociedad madrileña, como Fortunata y Jacinta.
- Novelas espiritualistas, que incluyen valores cristianos como el amor y la caridad, como Misericordia.
- Leopoldo Alas, “Clarín”: Escribió novelas como La Regenta, cuentos como “¡Adiós Cordera!” y multitud de artículos de periódico con un enfoque crítico o lleno de sensibilidad.
El Naturalismo
El Naturalismo está relacionado con la idea del humano. Además, defiende que la literatura no debía limitarse a observar y reflejar la realidad, sino que tiene que proponer soluciones. El movimiento naturalista en España utiliza ciertos recursos narrativos y su interés por los ambientes míseros y degradados, pero no acepta por completo la idea de convertir la literatura en ciencia. El Naturalismo español no acepta ni la filosofía positivista ni el determinismo del naturalismo francés. La herencia y el medio, que determinan al individuo en el naturalismo francés, en el español solo le condicionan. Los autores más representativos son Emilia Pardo Bazán y Vicente Blasco Ibáñez.
Aunque el género mayoritario es el narrativo, en especial la novela, además de la poesía y el teatro. La poesía en la segunda mitad del siglo XIX está marcada por los románticos tardíos como Gustavo Adolfo Bécquer y Rosalía de Castro. La mentalidad superficial de la sociedad no favorece el desarrollo de una lírica realista. Sin embargo, podemos diferenciar de dos tendencias representativas: El prosaísmo de Ramón de Campoamor, que usa la ironía y el lenguaje vulgar. En cuanto al teatro, será diferente según vaya dirigido al pueblo llano o a las clases acomodadas. Los menos pudientes suelen acudir a las zarzuelas o al género chico. Sin embargo, en el teatro dirigido al público burgués triunfa la alta comedia, de carácter moralizante mostrando la rutina de la vida doméstica burguesa. El principal representante es López de Ayala.
Modernismo y Generación del 98
Modernismo y Generación del 98 son dos movimientos artísticos y literarios prácticamente coetáneos del último tercio del siglo XIX y los primeros años del siglo XX.
El Modernismo
El Modernismo buscaba renovar la estética mediante la búsqueda de la belleza y tuvo un impacto en todas las artes plásticas. Surgió en oposición al Realismo, con su origen en Hispanoamérica, liderado por Rubén Darío. Estaba influenciado por el parnasianismo y el simbolismo, caracterizado por el escepticismo, el escapismo hacia el esteticismo y la mezcla de referencias culturales. Sus temas incluían la evasión, la sensualidad, la mujer, la mitología, el cosmopolitismo y los personajes enfrentados a la burguesía. Su estilo se destacaba por la musicalidad, léxico elevado, sintaxis impresionista y una métrica que incluía el soneto y la silva.
Etapas del Modernismo
Las etapas del Modernismo están marcadas por la evolución de Rubén Darío, desde su fase parnasiana con obras como «Azul» y «Prosas Profanas» (1888-1896), hasta su influencia simbolista con «Cantos de vida y esperanza» a partir de 1896. Esta línea predominó en poetas españoles como Juan Ramón Jiménez y los hermanos Machado.
Destacan la combinación de influencias modernistas con la sensualidad andaluza en Manuel Machado y el simbolismo en Antonio Machado. Juan Ramón Jiménez refleja estados de ánimo como la soledad y la melancolía en sus obras «Ninfeas» y «Almas de violeta«. Por último, Ramón María del Valle-Inclán, con su etapa modernista hasta 1906, publicó las «Sonatas«, protagonizadas por el «Marqués de Bradomín«, abordando temas como el amor, la muerte, la religión y el erotismo.
La Generación del 98
Respecto a la Generación del 98, se puede decir que su guía fue Unamuno y que un acontecimiento de unión les da nombre, la pérdida de las últimas colonias españolas. Todos ellos presentan preocupaciones filosóficas como el sentido de la existencia o el destino del hombre son fundamentales en muchas de sus obras, además de su preocupación por el tema de España, pues frente a los problemas económicos y sociales concretos los autores del 98 buscaron en general respuestas abstractas y filosóficas, y la esencia de lo español en el idioma, en la tradición, en la literatura medieval, en las vidas de las gentes sin historia o en el paisaje castellano. Cultivan géneros como el ensayo moderno y la novela.
Autores Principales de la Generación del 98
- Antonio Machado: Con una primera etapa ya citada que evoluciona hacia el compromiso cívico (Campos de Castilla) y una etapa más filosófica en Nuevas canciones.
- Valle-Inclán: Con sus esperpentos, de corte grotesco (Tirano Banderas).
- Miguel de Unamuno: Escribe tanto ensayo (En torno al casticismo) como novela (Niebla) con un estilo muy filosófico y reflexivo.
- Azorín: Que destaca por su trama ligera, el carácter autobiográfico y su obsesión por el paso del tiempo (La voluntad).
- Pío Baroja: Que muestra una concepción pesimista y desconfiada del ser humano y agrupando la mayor parte de su obra en trilogías con títulos como El árbol de la ciencia.
El Teatro Anterior a 1936
En cuanto al teatro anterior a 1936, destacamos el teatro comercial, con sus tres corrientes:
- La comedia de salón, en la que aparece una crítica amable contra las costumbres de la burguesía y cuyo autor más representativo es Jacinto Benavente (Los intereses creados).
- El teatro poético en verso, exaltando los valores nacionales y con autores como Eduardo Marquina.
- El teatro cómico, que tiene su origen en el género chico con autores como Pedro Muñoz Seca con su obra La venganza de Don Mendo.
Por otro lado, tenemos que hablar de un teatro renovador con distintos intentos por parte de ciertos autores, pero, sobre todo, Valle-Inclán, del que debemos destacar su etapa de creación del esperpento, presente en Luces de Bohemia, 1920.
A partir de los años 20 con la llegada de la Segunda República se crearon iniciativas culturales, acercando el teatro con compañías como “La barraca”, impulsada por Federico García Lorca. Este fue, precisamente, el dramaturgo más importante de la época con grandes tragedias rurales (La casa de Bernarda Alba o Bodas de sangre). Otros autores relevantes son Max Aub o Enrique Jardiel Poncela, dentro del género cómico (Cuatro corazones con freno y marcha atrás).
Las Vanguardias Europeas y su Influencia en España
El periodo entre las dos guerras mundiales (1918-1939) es el más fértil del siglo XX. Surgiendo en Europa los movimientos de vanguardia, también llamados los “ismos”. Algunos de estos “ismos”, como el Surrealismo o el Cubismo, la evolución del arte en el siglo XX. Aunque los “ismos” son muy diversos, presentan dos características comunes:
- La ruptura con la realidad y la lógica.
- La búsqueda y la exploración continuas de formas nuevas y sorprendentes.
Principales Vanguardias Europeas
- El Futurismo: Surge en Italia y rechaza el pasado y las actitudes nostálgicas y melancólicas. El Futurismo exalta el progreso técnico y literariamente supone la aparición de temas literarios hasta entonces inéditos y considerados antipoéticos: las máquinas, la velocidad, el deporte…
- El Cubismo: El cubismo descompone la realidad y la recompone después con una óptica diferente, sin lógica y con desorden para manifestar lo caótico de la realidad. A partir del cubismo, el poeta chileno Vicente Huidobro crea el Creacionismo, que juega con los efectos visuales del texto poético y la elaboración de caligramas y collages.
- El Dadaísmo o Movimiento Dadá: Es el movimiento de vanguardia más informal y también más efímero. Se define como el anti-arte y la anti-literatura. El movimiento Dadá aspiraba a instaurar una expresión original, ilógica y absurda. Su importancia radica en que prepara el camino para la aparición del Surrealismo.
- El Surrealismo: Surge en Francia de la mano del poeta André Breton, quien basa su propuesta en las teorías de Freud. Según las teorías de Freud, el ser humano solo se libera cuando deja de funcionar la conciencia sucediendo esto durante el sueño cuando se libera el subconsciente y aparece el “yo”. Llevado a la literatura, el Surrealismo propone la escritura automática, lo que genera textos caracterizados por la irracionalidad y su cercanía a los sueños. Sus mayores aportaciones son el empleo del verso libre o versículo y el uso de la imagen irracional. El Surrealismo contribuye a un proceso de rehumanización del arte en los años 30, ya que prioriza los sentimientos humanos.
Las Vanguardias en España
En España, los movimientos de vanguardia se asientan entre los años 20 y 30, cuando aparecen los poetas del grupo del 27. Pero podemos mencionar a dos escritores que se anticipan a su difusión: Guillermo de Torre y Ramón Gómez de la Serna.
- Guillermo de Torre: Funda la revista Ultra y es el impulsor del Ultraísmo. Este “ismo” es un híbrido de algunas de las vanguardias europeas: toma del Futurismo y del Creacionismo.
- Ramón Gómez de la Serna: Es un adelantado del vanguardismo. A través de la revista Prometeo. En su obra utiliza la lógica, las asociaciones audaces e inusuales de imágenes y la metáfora lúdica. Fue el creador del Greguería que él mismo define como metáfora + humor. Se basa en diversos procedimientos expresivos: metáforas, personificaciones, refranes…