El desarrollo de la novela hispanoamericana en el siglo XX
El desarrollo de la novela hispanoamericana confirma que el siglo XX fue la época dorada de las letras del continente, con una intensa actividad narrativa y el boom de los años sesenta.
Tendencias a principios del siglo XX
Se distinguen dos tendencias a principios de siglo:
- El relato breve de tema fantástico (derivado del modernismo) que fue cultivado por Rubén Darío, seguido del poeta argentino Leopoldo Lugones y el uruguayo Horacio Quiroga.
- Por otro lado, se encuentra la novela realista y naturalista de tema autóctono, que presenta varias modalidades:
- Novela de la Revolución Mexicana: donde destaca Mariano Azuela.
- Novela indigenista: denuncia la opresión de los indios y destaca Ciro Alegría.
- Novela de la tierra: con el tema de fondo del conflicto entre civilización y barbarie, se narra la fuerza destructora de la selva, el caciquismo latifundista (Rómulo Gallegos), y la vida de los gauchos.
La narrativa hispanoamericana a partir de los años 40
A partir de los años 40, la narrativa incorpora nuevos elementos: el contenido se amplía con la introducción de temas urbanos, la estructura se enriquece con innovaciones de la narrativa europea y se incorpora lo irracional procedente del movimiento surrealista. Se distinguen:
- La narrativa de Jorge Luis Borges: constituye un precedente de toda la narrativa posterior. En ella, lo filosófico y metafísico se combina con lo fantástico y lo irónico. Borges destaca por sus cuentos recogidos en libros como El Aleph.
- La narrativa existencial: las preocupaciones existenciales propias de la literatura occidental se reflejan en autores hispanoamericanos, especialmente en Juan Carlos Onetti y Ernesto Sábato. Este último destaca con El túnel, obra que trata de un hombre que recurre al crimen como única salida a su radical incomunicación con los demás.
- La narrativa social: se centra en la denuncia de los conflictos raciales en Hispanoamérica. Los dos autores más importantes son: Miguel Ángel Asturias, guatemalteco, quien dedica su novela más importante, El señor Presidente, a la figura del dictador, que se sitúa en una atmósfera de pesadilla, donde se mezclan lo absurdo y lo grotesco; y José María Arguedas, (peruano) destacó por sus novelas como Ríos profundos.
- El realismo mágico: constituye una representación compleja del mundo, que admite al mismo nivel lo racional, lo onírico y lo fantástico y que persigue reflejar la identidad de América (objetivo que comparte con la novela indigenista). Destaca el cubano Alejo Carpentier, el primer teórico del realismo mágico.
- Las novelas del argentino Julio Cortázar: su principal novela, Rayuela, se caracteriza por su estructura en secuencias sueltas, que permite distintas lecturas e interpretaciones. Con ello pretende expresar mejor los temas del caos y el azar de nuestra vida y de la relación entre el artista y lo creado. Su obra más destacada son sus cuentos (Bestiario).
Destaca también Augusto Roa Bastos, autor de Yo el Supremo, entre otras.
El boom de la literatura hispanoamericana en los años 60
La narrativa hispanoamericana en los años 60 constituye el boom de la literatura hispanoamericana, que es el enorme éxito que alcanza a comienzos de los sesenta con la aparición de obras que plantean una ruptura con las formas tradicionales del relato y hacen mundialmente famosos a autores como Gabriel García Márquez, Carlos Fuentes o Mario Vargas Llosa. Destacan obras como Paradiso de José Lezama Lima.
Carlos Fuentes
La obra del mexicano Carlos Fuentes presenta una serie de constantes como la experimentación narrativa y el análisis de la problemática social y política de su país, centrándose en las consecuencias de la Revolución Mexicana. Obra importante suya es La muerte de Artemio Cruz, que a través de los recuerdos de un dirigente político corrupto que agoniza, se reconstruye la historia mexicana desde la revolución. La novela se estructura mediante tres distintos narradores y con saltos espacio-temporales.
Gabriel García Márquez
El colombiano Gabriel García Márquez (ganador del Nobel) es el más famoso y leído de los narradores hispanoamericanos. Su gran éxito es Cien años de soledad, que narra la historia de siete generaciones de una familia perseguida por un destino fatal y resume simbólicamente la evolución sociopolítica del subcontinente.
Mario Vargas Llosa
El peruano Mario Vargas Llosa (ganador del Nobel) destaca con su primera obra, La ciudad y los perros, donde expresa, a través de la denuncia del machismo y violencia de un colegio militar limeño, una crítica a la sociedad peruana.
La narrativa hispanoamericana reciente
En la narrativa hispanoamericana reciente destacan autores como Mario Benedetti, quien ha cultivado la poesía, el cuento y la novela; Manuel Mujica Lainez, que cultivó la novela histórica; José Lezama Lima, con su obra Paradiso; Adolfo Bioy Casares, que refleja su gusto por lo fantástico en sus cuentos y novelas; y Guillermo Cabrera Infante, quien se caracteriza por su experimentalismo.
Caben destacar también Álvaro Mutis, Alfredo Bryce Echenique, Augusto Monterroso y de generaciones posteriores como Isabel Allende, Roberto Bolaño, Eduardo Galeano, Cristina Peri Rossi, Laura Esquivel y Zoe Valdés.