Literatura Española Posterior a 1936: La Poesía de Posguerra

El primer autor destacable de este período es Miguel Hernández con su obra “Cancionero y Romancero de Ausencias”. En 1944, Dámaso Alonso publica “Hijos de la ira” y Vicente Aleixandre “Sombra del paraíso”.

Poesía Arraigada

Con Garcilaso (1943). Los autores utilizan moldes clásicos, de belleza formal. Los temas fundamentales son el amor, el paisaje (Castilla y el tema de España) y el sentimiento religioso (hacia un Dios que da sentido al mundo). Luis Rosales escribió “La casa encendida”.

Poesía Desarraigada

Espadaña nace como respuesta a Garcilaso. Es una poesía rehumanizada, donde el hombre con sus circunstancias es el principal tema poético. Es una poesía existencial, el hombre está angustiado por el tiempo y la muerte. Y más en aquellos años: represión, injusticias, hambre… Todo ello nos llevará, posteriormente, a la poesía social. Eugenio de Nora y Blas de Otero.

Poesía Continuadora

Encontramos el “Postismo” (1945). Se autodefine como el “surrealismo ibérico”. Carlos Edmundo de Ory, fundador. Se reivindica la libertad creativa.

Poesía del Grupo Cántico

“Cántico” (1947) es la revista de la poesía pura. Pablo García Baena es el principal representante. El amor es el tema fundamental. Habitualmente se trata de amores prohibidos.

Poesía de los Años 50

En los años 50 surge la poesía social. “Cantos iberos” de Gabriel Celaya y “Pido la paz y la palabra” de Blas de Otero. Se advierte un paso de lo individual a lo social. Se rechazan los problemas íntimos y el esteticismo. El poeta deja de lado sus problemas personales y pasa a comprometerse con la situación del momento. Blas de Otero es el poeta más importante, “Ángel fieramente humano” y “Redoble de conciencia”.

De los 50 a los 60

Un grupo de autores, surgidos en los años 50 dentro de la poesía social, se encargarán de renovar el ambiente poético: Ángel González, José Ángel Valente, Claudio Rodríguez… En los 60 vuelve a preocuparse por el hombre. Es una poesía inconformista y escéptica, prestan gran atención a lo cotidiano. “Poesía de la experiencia”. Mayor depuración estética y rigor poético, esfuerzo por lograr una obra bien hecha. Destacan Ángel González con “Prosemas o menos” y Claudio Rodríguez “El don de la ebriedad”.

Los Novísimos

José María Castellet, 1970, la antología “Nueve novísimos poetas españoles”. Algunos son: Montalbán, Félix de Azúa, Pedro Gimferrer… Incluyen el cine, los tebeos, nuevas músicas… Rechazan la poesía social. Preocupación máxima del lenguaje. Esteticismo. Literatura de la literatura. La presencia de los “mass media”. Presencia del surrealismo. Multitud de poemas de metapoesía. Montalbán “A la sombra de las muchachas sin flor”.

Poetas en los 70

Destacan Antonio Colinas, Antonio Carvajal, Jaime Siles… Hay diversas tendencias como el experimentalismo, culturalismo, clasicismo, metapoesía, minimalismo, antirretoricismo, neobarroquismo y la poética del silencio.

En la Actualidad

Persiste la poesía cultista de Carvajal y Vilena. Luis Martínez de Merlo se incorpora. Carvajal publica en 1998 “Alma región luciente”. La poesía crítica con Jon Juaristi. La surrealista con Blanca Andreu. La poesía de la experiencia es una de las más cultivadas, basada en recuerdos de la infancia o adolescencia. Realizan una poesía lárica (del latín lares). Destacamos a Felipe Benítez Reyes con “Los vanos mundos”, “La mala compañía”, “Sombras particulares”, “Vidas improbables” y “Equipaje abierto”.

Novela Española de 1939 a 1975

La narrativa, tras la guerra, se humanizó. Volvió los ojos al hombre para ocuparse de las cuestiones que le preocupan, tanto las de índole personal como las colectivas. El realismo personal siguió dos variedades: tradicional y existencial. Muchos intelectuales tuvieron que partir al exilio, marchándose a países sudamericanos principalmente. Allí elaboraron obras en torno a años previos a la guerra y el propio conflicto bélico. Ramón J. Sender, “Réquiem por un campesino”.

Años Cuarenta

La novela estuvo marcada por fuertes dificultades materiales, con pobreza de recursos como papel, energía, etc. Por ello, tomó un camino personal y existencial, tratando conflictos con la sociedad contemporánea y religiosos. Además, se dio una censura que restringió la libertad de expresión. Se escribieron 3 tipos de novela: nacionalista, realista y existencial, y tremendista. Delibes “La sombra del ciprés es alargada”.

Años Cincuenta

Destacó el realismo social, siendo el tema preferido la sociedad española de ese momento, utilizada como instrumento de denuncia social y política.

• Surgieron novelas sobre la abulia, la apatía en la que había caído la juventud española al no levantarse contra el sistema de la dictadura.
• Tuvieron gran importancia las novelas sobre el campo, retratando los estamentos, los caciques, los humildes campesinos.
• Las novelas sobre el obrero y el empleado testimonian las circunstancias laborales y sociales de los obreros y oficinistas, su vida miserable, aspiraciones.
• En cuanto a las novelas sobre la vivienda, se trataba la situación de los inmigrantes que abandonan el pueblo y acuden a la ciudad en busca de trabajo.
• Además, había muchas novelas sobre los vencidos que sufren persecución por haberse levantado contra la sociedad, así como libros de viajes.
• Tuvieron también importancia las novelas de desmitificación. “Tiempo de silencio”, Martín Santos.

Autores Destacados

• Rafael Sánchez Ferlosio con su obra «El Jarama”, referente para la novela de abulia. En ella, un grupo de jóvenes madrileños pasan la semana queriendo irse el fin de semana al Jarama, pero no hacen nada, el tiempo pasa de manera monótona.
• Camilo José Cela, concepto negativo del mundo. «La familia de Pascual Duarte», confesión autobiográfica de un asesino mientras espera ser ajusticiado en la cárcel. «La colmena».
• El humanismo cristiano de Miguel Delibes le lleva a acercarse a los humildes y a criticar la sociedad burguesa. «El camino” y «Cinco horas con Mario”, costumbres y mentalidad burguesa provinciana.

Novela Experimental (1962-1975)

Se lleva a cabo una renovación del lenguaje. El realismo mágico triunfa en Hispanoamérica y hace que influya en España. Renovación también de las técnicas narrativas: ruptura de la línea cronológica mediante el flashback y el flash-forward. Y nuevas técnicas dialoguistas como el monólogo interior. Luis Martín Santos “Tiempo de silencio”. Juan Goytisolo “Señas de identidad”.

Novela Española de 1975 a 2000

Desde mediados de los años setenta, la narrativa comienza a moderar su ímpetu experimental y a tender puentes con la novela realista tradicional y con otros géneros considerados menores, como la novela negra, el folletín, el relato de aventuras o la ciencia ficción. Es difícil hablar de un proyecto común o de tendencias entre los nuevos narradores, dada la variedad de estilos y temas tratados, pero sí podemos decir que vuelve el interés por contar una historia, ganan terreno los temas intimistas y cosmopolitas y se recupera el gusto por el relato lineal.

En el contexto de lo que se denomina la era posmoderna, los narradores que empiezan a publicar a partir de los años ochenta continúan los caminos abiertos por los anteriores, siguiendo después trayectorias individuales. Lo que se percibe en el panorama último de la narrativa española es una amalgama de tendencias y géneros en torno a diversos temas, desde el intimista, autobiográfico y erótico, al histórico, político, legendario y de aventuras. La defensa de la condición femenina aparece en la obra de numerosas autoras. Son novelas de corte intimista que favorecen la exploración psicológica y ponen de manifiesto la problemática de la mujer moderna. También resultan evidentes las huellas del cine y el protagonismo de la imagen, así como la influencia de los medios de comunicación.

Figuras Relevantes

• José Luis Sampedro: “La sonrisa etrusca” (1985) donde ahonda en el tema del amor y de la ternura.
• Francisco Umbral, de tono elegíaco y autobiográfico “Mortal y rosa” (1975).
• Manuel Vázquez Montalbán, autor de las novelas negras y policíacas más exitosas de la literatura española, protagonizadas por el detective Pepe Carvalho “Asesinato en el Comité Central”.
• Luis Mateo Díez: “La fuente de la Edad” (1986), parodia esperpéntica.
• Javier Marías: “Tu rostro mañana” (2002-2007) donde indaga sobre la identidad, la traición y la violencia.
• Arturo Pérez-Reverte, quien conjuga su experiencia de periodista y de reportero de guerra ambientando sus relatos en un marco histórico. “La tabla de Flandes” (1990).
• Antonio Muñoz Molina: “Plenilunio” (1997).
• Andrés Trapiello: “Los amigos del crimen perfecto” (2003).
• Juan Manuel de Prada: “La tempestad” (1997).
• Juan José Millás, representante de novelas que tratan el proceso de la creación literaria, ejemplos de la “literatura dentro de la literatura” en obras como “El desorden de tu nombre”.

Luis Goytisolo, Juan Goytisolo, Lourdes Ortiz, Soledad Puértolas, Rosa Montero, Almudena Grandes… son escritores y escritoras que siguen escribiendo en la actualidad. Sus novelas admiten todo tipo de modelos y de mezclas.