La revolución de 1848 da paso a una época de expansión demográfica y gran desarrollo industrial y comercial: el desarrollo tecnológico con nuevos inventos (telégrafo, teléfono, barcos de vapor, acero, aspirina…), la aparición de un sistema financiero basado en la bolsa, la industrialización, la expansión del colonialismo europeo en busca de nuevas materias primas, son fenómenos que hablan del afianzamiento del poder de la burguesía. Sin embargo, nuevas tensiones políticas y sociales se anuncian con la lucha del proletariado y la lucha de las organizaciones obreras en la segunda mitad de siglo: en 1848 se publica el Manifiesto comunista, en 1864 se forma la Primera Internacional
Como rasgos del realismo literario señalemos los siguientes:
a. Análisis científico de la realidad: los novelistas pretenden imitar el modelo científico de observación, por lo que la imaginación de los románticos se ve sustituida por la documentación rigurosa.
b. Verosimilitud de los argumentos: los personajes y sus conflictos son verosímiles, creíbles, y se desarrollan en ambientes reconocibles.
c. Atención a la realidad inmediata y análisis del medio social
d. Se abandona lo sentimental y el tono melodramático por el análisis psicológico complejo de los personajes.
e. El lenguaje de los personajes refleja su condición social y cultural, y se busca la precisión y la claridad
. 4. Autores y obras
· Francia: es el lugar de nacimiento del Realismo.
STENDHAL: es el pseudónimo de Henri-Marie Beyle y puede ser considerado el precedente o punto de partida del realismo. En sus obras es un observador penetrante y un analista que no halaga a nadie; se opone al arrebato de la fantasía y busca un estilo simple que dice aprender de la lectura diaria del Código civil. Desmenuza las intrincadas reacciones anímicas de Julián Sorel, protagonista de Rojo y Negro, y sus ambiciones para superar la pobreza de sus orígenes en el marco histórico de su tiempo. En La Cartuja de Parma narra las aventuras del joven italiano Fabricio del Dongo en el proceso de disolución del imperio napoleónico en Europa. Con Stendhal la novela psicológica y la reconstrucción de los hechos históricos en los que se desarrolla la trama alcanzan un reconocimiento general.
HONORÉ DE BALZAC: autor de una obra inmensa, creador de la novela francesa moderna, es el autor de La Comedia humana, un impresionante fresco compuesto de más de noventa novelas, en que se revela como un consumado creador de caracteres. Muchos de esos personajes persiguen el dinero, el poder y el ascenso social, y se dejan arrastrar por pasiones destructivas. Balzac persigue con esta obra escribir La Divina Comedia de su tiempo. Eugenia Grandet es un relato en el que la avaricia de un hombre, el señor Grandet, se ve compensada por la bondad de su hija Eugenia.
GUSTAVE FLAUBERT: con él el realismo llega a su cumbre. Es un autor minucioso, tanto en la documentación escrupulosa que necesita para ser fiel al realismo de personajes, ambientes y hechos, como en el estilo, pues considera que la perfección artística radica en la perfección de la frase, lo que lo lleva a una escritura lenta y obsesiva, producto de un trabajo solitario que prefigura las nuevas ideas de fin de siglo a favor del arte por el arte. Flaubert propone la impersonalidad narrativa para superar la perspectiva omnisciente de la narración, y así dar autonomía al mundo narrado, verosimilitud y objetividad, lo que lo lleva a dar peso al estilo indirecto libre. Salambô es una excepción en el realismo
pues una novela histórica sobre las guerra de Cartago contra Roma, en la que destaca la capacidad de su autor para reconstruir la vida en Cartago. Madame Bovary es indudablemente su gran novela, que desató un proceso judicial por inmoralidad: es la historia de una mujer gris, embebida de romanticismo, que intenta superar su mediocridad y su insatisfacción en el adulterio, lo que la conduce al suicidio. La regenta tiene indudablemente puntos en contacto con esta novela, pero también con otras novelas de adulterio. La educación sentimental viene a ser la versión masculina, y con elementos autobiográficos, de cómo los sueños de gloria se acaban convirtiendo en ilusiones perdidas; no solo el análisis psicológico, también es un gran logro la capacidad de su autor para reflejar los acontecimientos revolucionarios de 1848 en París.
ÉMILE ZOLA: es el creador del naturalismo, del que destacamos dos obras, La taberna, y Germinal, en la que cuenta la historia de una huelga de mineros.
· Inglaterra:
El gran representante del realismo inglés es CHARLES DICKENS, que llegó a ser muy popular en su tiempo gracias a la novela por entregas. Con él la injusticia social, los bajos fondos londinenses o la vida sombría de las ciudades de la revolución industrial en la época victoriana son la materia de novelas tan conocidas como Oliver Twist, David Copperfield o Tiempos difíciles.
· Estados Unidos:
MARK TWAIN fue un novelista de abundante obra, con fuerte component e humorístico y crítica social. Citamos sus Aventuras de Tom Sawyer.
NATHANIEL HAWTHORNE, autor de La letra escarlata, en la que la sociedad puritana condena a una mujer a llevar bordada la letra A en color rojo como marca de adúltera. Fiodor Dostoievski nació el 11 de julio de 1821 y falleció el 28 de enero de 1881, a los sesenta años, treinta y ocho de los cuales los dedicó con pasión a la escritura.
A los veintidós años, apenas graduado de ingeniero, Fiódor Dostoievski comenzó a trabajar en el Departamento de Ingenieros de Petesburgo, y ese mismo año, 1843, tradujo al ruso Eugenia Grandet, del escritor francés Honorato de Balzac, que se publicaría al año siguiente en el diario Repertorio y Panteón. Pese a su precaria situación económica, un año después, decidió consagrarse por entero a la literatura; ya el gusanillo de las letras había infestado su ser. Antes de cumplir los veintitrés trabajó en su primera obra: Pobres Gentes. El manuscrito llegó a manos del director de El contemporáneo; lo dio a leer al santón de la crítica, Bielinski, quien con enorme entusiasmo puso a Dostoievski la etiqueta de «creador de la novela social». Pobres gentes se publicó dos años después en Almanaque Petesburgués, cuando ya Fiódor estaba en plena elaboración de El doble, La patrona y Nietochka Nezvanona. A partir de allí su carrera fue imparable, a la par que su vida sufrió toda clase de vaivenes: se salvó de la pena capital por ataques a la Iglesia y al Estado. Se había unido a un grupo de jóvenes intelectuales que leían y debatían las teorías de escritores socialistas franceses, por aquel entonces prohibidos en la Rusia zarista de Nicolás I. En sus reuniones secretas se infiltró un informador de la policía, y todo el grupo fue detenido y enviado a prisión. La pena de muerte fue conmutada por cuatro años de presidio en Siberia, tras lo cual fue reclutado como soldado raso en el ejército; se enamoró apasionadamente de María Dmitrievna, (acababa de enviudar, era tuberculosa y tenía un hijo) y el mismo día de la boda, Fiódor sufrió un ataque de epilepsia y aquello marcó irreversiblemente las relaciones de la pareja. Estos datos son solo algunos de la cantidad de eventos que poblaron su existencia, que al mismo tiempo, pienso yo, son las que dan lugar a obras inmortales como Crimen y Castigo, Los hermanos Karamzov, El idiota, El jugador, entre muchas otrasEl jugador es una novela que se mueve en los umbrales de la intensa pasión psicológica que lleva a un hombre a convertirse en jugador empedernido. Está escrita en primera persona; Alexei Ivánovich, nos sirve de ventana a través de la cual nos situamos como fisgones y observamos el mundo que lo rodea, las pasiones y los deseos de la gente que lo trata como si fuese un ser anónimo, y que yo creo, es la única manera de infiltrarse sin ser un estorbo. Cada personaje lo utiliza como confidente, cada mujer se dirige a él como si fuese un ayudante de cámara ante el cual puede descubrir no solo su cuerpo sino su alma. Y cada hombre ve en él al ser insignificante que no proporciona mayor peligro pues no es un rival a tomar en cuenta. De esta manera, Alexei va enterando al lector de toda la trama en la que se basa la novela, que no es en realidad una historia extraordinaria, yo diría que más bien llega a rozar la caricatura de los amores imposibles de la época, en la que el amor más que un sentimiento, es un fin en sí mismo.