Poesía de la Generación del 98
La Poesía de la Generación del 98 tiene límites difusos con el Modernismo, ya que ambos movimientos surgen en la misma época. Se caracteriza por una ideología progresista y la preocupación por la crisis política y social de España. La Generación del 98 recoge dos tendencias: la herencia simbolista francesa del Modernismo (Machado) y la herencia ideológica alemana (Unamuno). Mantiene el carácter impresionista en las descripciones y la idealización de la naturaleza y el paisaje castellano.
Antonio Machado (1875-1939)
Nace en Sevilla. Su ideología se va radicalizando progresivamente, marcada por un profundo humanismo existencial. Abandona España al acabar la Guerra Civil y muere en Francia. Su poesía sintetiza el clasicismo de las formas, el simbolismo del mundo sensorial y la indagación en las galerías interiores.
Tres etapas:
- Primera etapa: Representada por Soledades (1903), libro que fue ampliado más tarde. Muestra al poeta de lo interior, de la soledad y de la melancolía por la fugacidad de la vida y los paraísos perdidos.
- Segunda etapa: Representada por Campos de Castilla (1912). Supone su integración en la Generación del 98. Expresa el inconformismo y el desajuste con la realidad social.
- Tercera etapa: Representada en Nuevas Canciones. Es más reflexiva y su pensamiento llega a lo sentencioso.
Miguel de Unamuno (1864-1936)
Dramaturgo, novelista y ensayista. Expresa con estilo austero su desasosiego interior por los problemas existenciales y su visión estética de Castilla. Obras destacadas: Poesías (1907), Romancero del Destierro (1928) y Cancionero (1953).
Poesía de la Generación del 27
Grupo de escritores que se dan a conocer a partir de 1920.
Rasgos generacionales:
- Nacen entre 1892 y 1902.
- Semejante formación intelectual.
- Actividades comunes en la labor docente y las revistas literarias.
- Rinden homenaje a Góngora en 1927 por el tercer centenario de su muerte.
- Sus referencias son: Góngora, Juan Ramón Jiménez y Ramón Gómez de la Serna.
Influencias:
- Del Modernismo: el rigor artístico, actitud minoritaria y concepción misteriosa de la poesía.
- De Juan Ramón: la pureza estética y la poesía como conocimiento.
- De los vanguardismos: la deshumanización del arte, la modernidad en los temas, el tratamiento de las imágenes y metáforas, y el cosmopolitismo.
Rasgos estilísticos:
- Empleo de recursos expresivos de carácter irracional, como la sinestesia y el simbolismo.
- Cultivo de la metáfora y la imagen.
- Tendencia a experimentar en la métrica y en el ritmo.
- Progresiva utilización del verso libre.
- Visión de la realidad a partir de la propia experiencia interior.
Federico García Lorca (1898-1936)
Vive en Madrid, excepto durante su viaje de un año a Nueva York en 1929. Fue asesinado al comienzo de la Guerra Civil. Destaca en poesía y teatro. En ambos géneros, el tema central es la muerte o el amor conducido por el dolor, la frustración y la muerte.
Dos etapas:
- 1921-1928: Visión trágica del amor y la muerte de unos personajes marginados, los gitanos, en Canciones (1927) y Romancero gitano (1928).
- 1929-1936: Deja paso al surrealismo y rompe con el verso tradicional. Mantiene su actitud solidaria con los marginados. Poeta en Nueva York (1929) expresa la dialéctica entre naturaleza y civilización, entre humanismo y progreso ciego.
Rafael Alberti (1902-1999)
Pintor y poeta. Su obra en verso tiene tonalidades cromáticas y un perfecto ritmo y musicalidad mezclados en la tradición española.
Tres etapas:
- Se inicia con la estilización de las formas tradicionales y populares: Marinero en tierra (1925).
- La segunda etapa se abre con Cal y Canto (1927) y culmina con Sobre los ángeles (1929), libro surrealista motivado por una crisis personal, ideológica y religiosa.
- En la tercera, el poeta humaniza sus versos durante la República, la Guerra Civil y el exilio, al servicio de las ideas o de la solidaridad: Sermones y moradas (1939).
La Poesía de la Generación del 50
Son el grupo de poetas que empiezan a publicar a partir de la década de 1950. Destacan Ángel González, Jaime Gil de Biedma y Claudio Rodríguez. Comparten con los poetas sociales la visión crítica de la realidad. Tienen una actitud humanista y de preocupación por los problemas del ser humano. Muestran una consciente voluntad de estilo y mayor esmero en el cuidado del lenguaje y de las formas poéticas.
Ángel González
Nacido en Oviedo. En su poesía se alternan los contenidos comprometidos con la poesía social con otros más íntimos y personales. Unas veces con tendencias al estilo coloquial e irónico, y otras, al conceptismo ingenioso. Obra destacada: Áspero mundo.
Jaime Gil de Biedma
Nace en Barcelona en el seno de una familia burguesa. Ejerce una gran influencia en la generación actual y en la tendencia llamada de la experiencia. Poesía irónica y de enunciación cercana a lo cotidiano. Obra destacada: Compañeros de viaje.
Claudio Rodríguez
Nacido en Zamora, profesor y Premio Nacional de Literatura. En su poesía se mezclan con armonía el surrealismo de las imágenes, el clasicismo formal y la transparencia del paisaje. Tiene un sentido humanista. Obra destacada: Alianza y condena.
La Novela del Modernismo y de la Generación del 98
Los temas de la novela son los mismos que los de la poesía (van de lo clásico a lo moderno y de lo medieval a lo romántico), mientras que las bases son la sensualidad, la idealización y la estilización de la realidad. La Generación del 98 recoge elementos de corrientes literarias como el Modernismo (descripción impresionista, renovación del lenguaje), el Naturalismo (temas e ideas, y huye del estilo vulgar realista), del pensamiento alemán (carga intelectual y existencial) o del Romanticismo (evocaciones nostálgicas).
Miguel de Unamuno (1864-1936): La Novela Intelectual y Existencialista
Nació en Bilbao y fue catedrático de griego. Posee una gran cultura. Cultivó todos los campos, destacando como narrador, dramaturgo, poeta, ensayista, intelectual y pensador (uno de los mejores de la época). Sus novelas destacan por la idealización del paisaje castellano y su enorme carga existencialista (preocupación por la trascendencia religiosa en San Manuel Bueno, mártir). Posee un afán de renovación del lenguaje, de la forma y las técnicas narrativas propias del Modernismo. Llama a sus novelas nivolas para distinguirlas de las realistas (lenguaje más intelectual y el autor impone sus propias leyes y criterios en vez de los de la realidad).
Pío Baroja (1872-1956): La Novela Social y Naturalista
Máximo novelista de su tiempo. Tenía un carácter solitario, aunque con un trasfondo tierno. Ve la naturaleza del ser humano bajo un pesimismo radical que le lleva a criticar a una sociedad globalmente corrupta. Además, concibe la vida como una lucha en la que siempre pierde el más débil y desconfía de todas las organizaciones del ser humano. En lo literario, recoge la desesperación y la angustia (del Romanticismo), la visión determinista del mundo (Naturalismo), el impresionismo descriptivo de ambientes y psicológico, y la evocación nostálgica. Esto le lleva a plantear ambientes difusos y a no profundizar en la psicología de los personajes. Escribió El árbol de la ciencia.
La Poesía de Posguerra
El exilio de numerosos intelectuales después de la Guerra Civil sumió a España en un profundo aislamiento, vigilado por una férrea censura política e ideológica. Debido a la falta de libertad y a la situación de la época, solo aparecen dos posturas posibles: aprobar la nueva situación (poesía arraigada) o reflejar la desesperanza (poesía desarraigada).
La Poesía Arraigada
Cultivada por autores de acuerdo con la dictadura, que adoptan una forma clasicista y un tono heroico e intimista. Destacan Leopoldo Panero (La estancia vacía), Luis Rosales (Retablo de Navidad) y Dionisio Ridruejo (Poesía en armas).
La Poesía Desarraigada
Es la tendencia opuesta a la anterior. Refleja la peripecia individual del ser humano en tiempos de angustia y dolor. Se caracteriza por su falta de fe en el futuro. Destacan Blas de Otero, Gabriel Celaya o José Hierro. Utilizan un lenguaje desgarrado, casi violento.